Las controvertidas imágenes en las escaleras de la Praza de Praterías (Santiago de Compostela) de un grupo de peregrinos acampando con sacos de dormir siguen generando polémica. La última en pronunciarse al respecto ha sido la compostelana Patricia Pardo, presentadora del programa de Telecinco, Vamos a ver.
"Este tema, Patri, te va a afectar especialmente", advertía una compañera antes de dar paso al vídeo en el que se ve cómo un vecino de la ciudad increpaba al grupo de turistas por dormir a los pies de la Catedral, señalando que "Santiago de Compostela no es un circo".
"Muy bien dicho, nuestra ciudad por supuesto que no es un circo y no está para recibir a vándalos. No sois peregrinos, sois vándalos", respondió, enfadada, la periodista gallega.
Pardo cargó contra los comportamientos incívicos de muchos peregrinos, alegando que "la gente que no sabe respetar lo que significa Santiago de Compostela, que es Patrimonio de la Humanidad, no merece estar en la ciudad". "La Praza del Obradoiro no está para hacer un pícnic, con un camping gas, como hace dos días", señaló en referencia al grupo de turistas que hizo un pícnic en la dársena de Xoán XXIII el pasado fin de semana.
"No se puede ir a la ciudad sin respetar a los vecinos, gritando, insultando, pintando las piedras de la Catedral de Santiago", criticó la conductora de Vamos a ver, refiriéndose a varias pintadas que aparecieron este verano en la Catedral.
"Vosotros, supuestos peregrinos, ¿sabéis lo que significa la Catedral de Santiago? ¿Sabéis lo que significa cada milímetro de esas piedras? La primera de ellas se colocó hace 1.075 años, así que actuad en consecuencia", continuó la periodista gallega.
Patricia Pardo aprovechó para poner en valor la hospitalidad de los compostelanos, defendiendo que "no somos antipáticos, somos los mejores anfitriones porque estamos acostumbrados a recibir a peregrinos. Pero hay que respetar". La compostelana negó que exista turismofobia, explicando que "recuerdo toda mi vida ver japoneses, alemanes, ingleses… gente que respeta. Vandalizar una ciudad no es respeto".
"No puedo concebir que si de verdad vas como peregrino visitar al Apóstol y la ciudad, ¿de verdad es necesario que pintes tu nombre y la fecha en la que has llegado en la piedra de la Catedral?", se preguntaba Pardo, señalando que a sus 41 años "jamás en la vida vi a un peregrino firmar en la Catedral".
Para la compostelana, estos comportamientos "menoscaban lo que significa ser un verdadero peregrino". Una opinión compartida por sus compañeros, que llegaron a vaticinar que se va a convertir Santiago "en el Magaluf de la Península", a lo que Pardo sentenció: "Me niego, que se queden en su casa, lo siento mucho".