El próximo jueves 19 de septiembre empezará a funcionar el sistema de control de accesos a la ciudad histórico mediante los bolardos inteligentes, instalados en el marco del programa Smartiago.

Los bolardos estarán instalados en las rúas de Casas Reais, Algalia de Abaixo, Cardeal Payá, Porta da Pena, San Clemente y Porta Faxeira, todos en sentido entrada; en San Fins, San Francisco y rúa das Carretas, tanto en sentido entrada como en sentido salida; y en Algalia de Arriba y la travesa de Fonseca, en sentido salida. 

Así lo ha anunciado este jueves el concejal de Mobilidade, Xan Duro, quien ha señalado que con este sistema buscan "controlar a afluencia de tráfico na zona vella" y garantizar que solo accedan "aqueles vehículos que contan con autorización".

El edil ha explicado que la entrada en funcionamiento de los bolardos no modifica los circuitos de circulación que ya estaban en vigor en la zona histórica, por lo que se mantienen los puntos de entrada y salida de vehículos que venían utilizando los vecinos. Tampoco habrá cambios en lo relacionado con las diferentes modalidades de tarjetas ni con los horarios de acceso establecidos.

Xan Duro ha recordado que antes de la puesta en funcionamiento de los bolardo, el departamento de Tráfico abrió el proceso para renovar las tarjetas de acceso, "unha actualización que non se fixera nos últimos 20 anos, de maneira que nas bases de datos figuraban ainda tarxetas de persoas que xa non son residentes no ámbito ou de vehículos que xa non están en circulación". Una circunstancia que, según ha apuntado el concejal, "dificultaba o control dos accesos".

Actualmente, están activas un total de 1.371 tarjetas de acceso, de las cuales 653 son para residentes; 367 de uso comercial y profesional; 185 son de paso y parada y 157 están vinculadas a la Praza de Abastos, por lo que tiene acceso autorizado por la Praza de San Fiz. Además, están concedidas nueve tarjetas por razones familiares.

Varios retrasos

El responsable de Mobilidad ha explicado que la puesta en funcionamiento del sistema sufrió varios retrasos debido a la necesidad de reconfigurar el sistema de bases de datos de las matrículas de vehículos autorizados al acceso, de forma que se garantizase la actualización automática de cualquier cambio.

El nuevo sistema también se ha integrado el lector de matrículas de la rúa de San Pedro. Además, las bases de datos del sistema como las imágenes de las cámaras de control de accesos y el sistema de telefonía se han trasladado de servidores externos a servidores municipales.