El delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, ha insistido este martes en que la manifestación a favor de Palestina que reunió a miles de personas el pasado domingo en Santiago de Compostela "transcurrió pacíficamente", sin "ningún tipo de incidente".

Preguntado por la diferencia de dispositivos policiales en Santiago y A Coruña, Blanco ha asegurado que los incidendes "ocurren con posterioridad, una vez finalizada la manifestación", debido a "un grupo muy reducido que irrumpe en un local hostelero, cortan el tráfico y alteran el orden público".

El delegado ha señalado que las detenciones se produjeron por los "daños provocados" y ha insistido en que "no mezclemos cosas". "No debemos mezclar actitudes de violentos con actitudes de personas que ejercen un derecho fundamental que es el de manifestación".

Blanco ha informado que las autoridades están revisando imágenes e identificando a personas para esclarecer lo sucedido. En el caso de los identificados, ha explicado que en los casos que tengan relevancia penal, será el juzgado de instrucción quien lo determine; mientras que en caso de no existir relevancia penal, se aplicará la sanción correspondiente.

Nueve detenidos

Los incidentes se saldaron con nueve personas detenidas, que quedaron en libertad en la medianoche del pasado lunes tras permanecer desde mediodía en los calabozos de la Comisaría compostelana.

Los hechos ocurrieron cuando, al finalizar la protesta, un grupo de manifestantes se dirigieron al Burger King de la rúa da Senra, en el centro de la capital gallega, al considerar que estas empresas colaboran con Israel. Hasta el lugar de desplazaron varios agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP), que detuvieron a cinco personas.

Tras las detenciones, decenas de personas se concentraron a las puertas de la comisaría santiaguesa, ubicada a unos 250 metros del lugar de los altercados. Durante la tarde se producieron otras cuatro detenciones.

Además, desde el Sindicato Unificado de Policía (SUP) denunciaban este lunes que nueve agentes resultaron heridos, uno de ellos con el codo fracturado. El sindicato ha anunciado que se personará en la causa como acusación particular para reclamar por los daños sufridos por la policía e "impulsar la acción de la justicia".