"Cómo se rieron de mí en Antena 3". Así empieza el vídeo de Daniel Morán, un joven de 18 años que compagina sus estudios de Medicina en la Universidad de Santiago (USC) con su otra pasión, ser gaitero. El joven, que actualmente vive en Santiago, comparte sus vídeos con este instrumento en TikTok, red en la que cuenta con casi 48.000 seguidores y más de 739.000 me gusta. Morán ha compartido con sus seguidores la mala experiencia que vivió la semana pasada tras ser invitado para actuar en el programa Y Ahora Sonsoles, de Antena 3.

"La semana pasada recibí una invitación para acudir como invitado a un programa de Antena 3. Yo ahora mismo estoy viviendo en Santiago de Compostela y por lo tanto el transporte debía correr a cuenta del programa. Sorprendentemente, después de estar toda la semana esperando la llamada, me llamaron a escasas 24 horas de que empezara el programa para darme los billetes de tren. Eran los últimos que quedaban, los horarios eran un desastre, pero aún así acepté", comienza a explicar el joven en un vídeo que acumula más de 4,8 millones de visualizaciones y cerca de 8.000 comentarios.

"Salí a las 05:30 horas de la madrugada de Santiago y entré a Atremedia a las 13:00 horas. Desde entonces hasta que empezó el programa, a las 17:00 horas, estuve pidiendo a todas las personas que trabajan allí la escaleta del programa para saber a que hora salgo, tanto para avisar a la gente que me quería ver y porque me interesaba saber si iba a llegar o no a mi tren de vuelta, que salía a las 20:20 horas".

El joven gaitero relata que tras dos horas pidiendo la escaleta, le dicen que lo han dejado para el final, a las 19:45 horas, "por lo que no me iba a dar tiempo a llegar a mi tren de vuelta". "Desde esa hora, cuando el programa aún no había empezado, estoy pidiéndole a todo el mundo que, por favor, me adelanten, porque no me iba a dar tiempo a volver a Santiago. No recibo respuesta".

Morán continúa explicando que "sobre las 18:30 horas recibo una llamada del equipo de producción que me dice que cambiar la programación de un programa en directo es realmente complicado y por lo tanto me voy a tener que quedar a dormir en Madrid. Cabe mencionar que antes de empezar el programa también me cambiaron lo que iba hacer. En principio iba a tocar cuatro temas impuestos por ellos pero me quitaron tres por falta de tiempo, por lo que se quedaba en un tema de 30 segundos. Poco más de dicen que deje la gaita en casa que no me va hacer falta".

"Aún así acepté porque soy muy profesional y una persona muy comprometida y si la semana pasada dije que iba ir a ese programa a hacer lo que tuviese que hacer, voy y lo hago con la mejor de mis caras. Sin embargo, no hubo feedback. Yo me comprometí pero la otra parte no. Después de esperar pacientemente toda la tarde, a las 19:30 horas me dicen que vaya a plató, estoy preparado, con el micrófono puesto, está todo para salir".

No obstante, el joven afincado en Santiago apunta que una hora antes había salido una última hora sobre el rey emérito que había ocupado todo el programa. "Pero si me llamaron a las 19:30 horas para ir a plató, digo yo que dejarán de hablar de esto, que llevan una hora hablando de lo mismo, y me darán pie a mi", reflexiona Morán: "Tonto de mi, vi como pasaban los minutos y yo en plató preparado y ahí no dejaba nadie de hablar del rey emérito".

"A las 19:45 horas me dicen que tengo un taxi en la puerta y que me voy para casa. La explicación fue que esta última hora la tenían que sacar fuese como fuese, no tenían tiempo y que tenían que prescindir de mi. Que lo sentían mucho pero que me fuese para casa. Me sacan corriendo literalmente para coger el taxi a ver si con suerte conseguía mi tren de vuelta. Llegué a las 20:20 horas a la estación y mi tren salía a las 20:23 horas. Se alinearon los astros y el tren tardó 10 minutos en llegar de Ourense, con lo cual me dio tiempo", apunta el joven.

"Esto no es una denuncia al programa, es simplemente una explicación que os quiero dar a vosotros, que me queríais ver actuar", aclara.

"'No, es que en un programa en directo nunca se sabe, la improvisación es muy importante, puede ocurrir de todo…', me decían. He estado en varios programas en directo y sé lo importante que es la improvisación. Y también sé que cuando pedí que se adelantara mi actuación antes de que empezase el programa, podría haber actuado e ir tranquilamente a la estación coger mi tren", expone Daniel Morán.

"Pero no pudo ser. Fue un día totalmente perdido, tengo 18 años, hice 1.200 kilómetros en un día, estoy estudiando Medicina, tengo cosas más importantes que hacer que ir a ese programa. Por lo que no voy a volver, ni mucho menos. Hay algo que se llama orgullo, he tocado en lugares con bastante más caché, y no me merece la pena", aclara en el vídeo.

Finalmente, Daniel reconoce que "me sentí bastante avergonzado y flipando con la poca organización que hay ahí dentro. Si los de producción me sacan un billete a una hora, los que hacen la programación supongo que deberán de tener en cuenta eso. Pero no, deben coger a los invitados y soltarlos donde cuadra".