Triacastela es un municipio ubicado en el interior de la provincia de Lugo integrado por 29 núcleos y siete parroquias, con una superficie de 52 kilómetros cuadrados y 700 habitantes (concretamente el núcleo de Triacastela tiene un centenar de censados). Su riqueza se debe principalmente a la ganadería y a que es una tierra por la que pasa el Camino de Santiago y multiplica su población durante los meses más intensos de peregrinaciones.
La alcaldesa, Olga Iglesias, ocupa el cargo desde hace 11 años y asegura que "ser alcaldesa de tu pueblo es un honor y te gusta y engancha". La edil fue diputada en el Congreso de los Diputados en Madrid durante varias legislaturas y ostenta el honor de haber sido la primera en ejercer el voto telemático en el Congreso desde la sede de la alcaldía de Triacastela debido a su maternidad.
Iglesias destaca sobre su tierra que tienen una de las tasas de paro más bajas de Galicia y curiosamente se encuentran en el top 10 de la comunidad de las zonas con un ratio elevado de vacas por habitante. Los atractivos turísticos de esta zona no son los más populares de Galicia, pero sí guardan interés, como por ejemplo la Iglesia de Santiago de Triacastela, una de las pocas dedicadas a esta figura.
Por su parte, la Cova de Eirós es donde aparecieron las primeras pinturas rupestres de la comunidad que datan del Paleolítico. Además, en Triacastela se da una excepción en cuanto a su terreno, mayoritariamente calizo, al contrario que la geología del resto de Galicia, que es granítica.
Esto se debe a que en la Edad Media, según describe el Códice Calixtino, los peregrinos cogían piedra caliza en Triacastela para llevarla hasta los hornos de Castañeda en Arzúa (A Coruña) para transformarla en cal que se empleó en la construcción de la Catedral de Santiago ubicada en la plaza compostelana del Obradoiro. En la Cova de Eirós (actualmente no visitable) se localizaron a su vez restos vitales de los Neandertales y este año, del 7 al 23 de agosto, está previsto que un grupo de arqueólogos realice excavaciones en busca de curiosos hallazgos que aporten luz sobre la historia de Galicia en esta zona.
Árboles centenarios y ternera gallega suprema como bandera
Triacastela puede presumir de tener dos árboles declaradas senlleiras por la Xunta: un castaño de más de 800 años en Ramil, en pleno Camino de Santiago, y un nogal centenario en la vía de Triacastela al lado del antiguo mesón ferrería que data del siglo XVI. Además, se unen a ellos los árboles frondosos autóctonos que están repartidos por las diferentes parroquias y que son el máximo exponente de la Serra do Oribio, la zona que ven los peregrinos a lo lejos al llegar a Triacastela y que forma parte del paisaje, donde también discurre el río del mismo nombre.
El monumento al peregrino es otro de los atractivos, consistente en unas piedras apiladas sobre otras con la imagen de Santiago en la parte superior, conmemorando así la costumbre medieval de coger piedras para llevarlas a hundir en cal para fundir y que formasen parte de la estructura de la Catedral de Santiago. De cara a acoger a las decenas de peregrinos que llegan desde Semana Santa hasta principios de noviembre, hay diferentes albergues, pensiones, albergues-pensión y hoteles repartidos por todos los núcleos poblacionales.
La gastronomía es muy rica en la zona, donde destaca por encima de todo la ternera gallega suprema, combinada con otras exquisiteces autóctonas como el queso de O Cebreiro, castañas o miel. A su vez, la zona está enmarcada dentro de la Serra do Oribio que da nombre a la Reserva de la Biosfera Ribeira Sacra e Serras do Oribio e Courel, un espacio considerado como de la zona cero de seísmos de Galicia y donde se registró el mayor terremoto de la comunidad en 1997.
Lejos de crear alarma, supieron aprovechar este fenómeno que les puso en el mapa y se creó el Terremoto Club, un equipo de motos de enduro y una prueba de trail que se celebró durante varios años.
Tierra de castros y de la familia Cela
El nombre de Triacastela se debe, según su alcaldesa, a los cinco castros que se sabe que están en la zona pero que no están excavados y en la antigüedad también se ubicaban en los alrededores hasta tres castillos. Las actividades principales de la zona son el Camino y diferentes rutas de senderismo.
En cuanto a personajes célebres, el abuelo del célebre escritor Camilo José Cela era natural de esta región, algo que aparece reflejado en ‘La Rosa’, publicación que recoge las memorias de la infancia del Premio Nobel, donde además añade que Triacastela y O Cebreiro "son de las partes más puras de Galicia". A su vez, hace unos años en el Concello inauguraron un salón biblioteca bajo el nombre de Camilo José Cela y acudió su hijo al acto.
Antonio López de Quiroga también es uno de los nombres destacados de Triacastela, ya que alcanzó una gran fortuna en Colombia con la explotación de minas. Las fiestas patronales están a la orden del día, la próxima el 17 de agosto con la romería de la Ermita de San Mamede, además de otras como las fiestas de Santiago en la parroquia de Cancelo (donde se pueden ver unas pinturas del siglo XV) o el Carmen en la parroquia de Lamas, entre otras.
Asimismo, la población es reducida pero cuentan con un colegio con educación infantil y primaria al que acuden 22 niños, además de tener una Casa Niño gratuita por parte de la Xunta (una iniciativa consistente en guarderías reducidas de 5 niños) y tres Casas do Maior, para que los más ancianos de la zona estén con los mejores cuidados y se mantengan activos.