Las Perseidas volverán a iluminar el cielo este fin de semana en Santiago de Compostela. También conocidas como Lágrimas de San Lorenzo se podrán ver especialmente claras la noche del sábado 12 de agosto, en lugares con poca contaminación lumínica. Este año se prevén unas condiciones especialmente buenas al producirse tres días antes de la luna nueva, y sin demasiados problemas de visibilidad ya que se prevé que haya cielos despejados.

El fenómeno astronómico es, en realidad, polvo estelar, restos de un cometa que son iluminados por el sol. Deben su nombre, Perseidas, porque parece que estas estrellas fugaces llegan de un punto de la constelación de Perseo. Aparecen en este momento del año porque es cuando la Tierra, en su órbita alrededores del sol, atraviesa los restos que deja el cometa Swift-Tuttle, cuyo último acercamiento al sol fue en 1992.

Algunas recomendaciones para poder experimentar el fenómeno en su máximo esplendor es buscar un punto alto, alejado de las luces, sin prismáticos y mirar a los puntos opuestos a la luna, donde estará más oscuro. Las temperaturas pueden alcanzar de noche los 16 grados así que también es recomendable llevar ropa de abrigo. En caso de querer fotografiarlas lo mejor es usar la aplicación SkyMap para buscar la constelación de Perseo, llevar un trípode y ajustar el tiempo de exposición para realizar disparos entre 20 y 30 segundos.

Santiago de Compostela y su área de influencia cuentan con una gran superficie de entornos rurales desde donde poder observar sin apenas contaminación la bóveda celeste. Desde los altos más conocidos de la capital a otros más escondidos, te dejamos algunas opciones para disfrutar de la lluvia de estrellas este fin de semana.

Miradores más populares de la ciudad

Santiago de Compostela de noche desde el Monte Pedroso. Dreamstime

Si no te quieres desplazar de Santiago pero quieres disfrutar del fenómeno astronómico, una de las opciones más populares está en el Monte Pedroso. Es uno de los puntos más alto de la capital gallega y también el mirador más querido por los vecinos, desde donde se puede ver una panorámica de toda la ciudad.

Las luces de Compostela pueden suponer un problema para ver con claridad, así que recomendamos caminar hasta el punto más alto y donde hay menos vegetación. Desde allí, y con la vista puesta en los pueblos del sureste de la capital, podrás disfrutar de las lágrimas de San Lorenzo en todo su esplendor.

O Viso también es otra buena opción dentro del término municipal para observar la lluvia de estrellas. Mirando o bien al sur o al norte, y, como antes, alejándose siempre de las luces de la ciudad, habrá buena visibilidad de la bóveda celeste.

Puntos altos del área de influencia

Pico Sacro (Boqueixón)

Si estás dispuesto a alejarte algo más de la ciudad y quieres sacar fotos increíbles de bóveda celeste, en el área rural de Santiago tienes opciones ideales.

En Boqueixón, a unos 20 minutos de Compostela, está el Pico Sacro, un monte con una altitud de 533 metros. Durante el día se puede ver toda el área de la ciudad y, sin apenas afectación de las luces de un gran núcleo de población, por la noche es el punto perfecto para observar las estrellas. Para llegar hay que coger la carretera N-525 en dirección a Benavente. Saliendo del desvío de Lesdo estarás a apenas unos minutos del Pico Sacro.

En Teo hay dos opciones más recogidas pero también ideales para la noche de las lágrimas de San Lorenzo. Una de ellas está en el mirador de Montouto, con más de 300 metros de altitud. Situado en la parroquia de Cacheiras es un viaje de 15 minutos en coche.

La otra opción en la municipio vecino es el Mirador da Agrela. Sus 410 metros de altura permiten ver hasta algunas islas de la ría de Arousa como Sálvora o Cortegada. Es un esfuerzo subir hasta este alto, que también es mucho más íntimo y pequeño, pero proporciona una vista inigualable del fenómeno astronómico.

Playas

Los que prefieran la playa a la montaña, cerca de Santiago también tienen una variedad de opciones en las que observar las Perseidas. Lo mejor en este caso es evitar los arenales más urbanos e irse a calas más apartadas.

Los que son fans de acercarse hasta Porto do Son, por ejemplo, pueden optar por la playa de Ornanda o de las Gaviotas en lugar de irse hasta Coira, que, aunque es más grande, está más cerca de Portosín y puede tener más dificultad en términos de visibilidad.

Para los que prefieran ir hasta Muros, de igual manera, es mejor evitar la playa do Castelo e ir hacia Louro, uno de los puntos más famosos de la zona por su arena fina y las olas, perfectas para el surf.