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¿Cuáles son las setas venenosas más comunes en Galicia y cómo diferenciarlas?

El otoño es la época ideal para lanzarse al bosque en busca de este alimento, pero los recolectores deben tener mucho cuidado para evitar hacerse con especies venenosas

31 octubre, 2023 17:47

Silvia Penelas

Guía práctica para recoger setas en Galicia y no morir en el intento

El otoño es la estación perfecta para la mayoría de setas. Entre los meses de octubre y noviembre los hongos crecen hasta alcanzar el tamaño perfecto. Galicia es una comunidad conocida por las ricas variedades que existen en sus bosques, dada la gran cantidad de hábitats que coexisten en sus límites geográficos.

Pasear por el bosque tranquilamente mientras se buscan tesoros culinarios como las setas, es un plan ideal para muchos amantes de la naturaleza y de la gastronomía. Con todo, es importante realizar este práctica con mucho cuidado y teniendo los conocimientos básicos muy claros. Por ello, lo recomendable es estar acompañado de un experto durante las primeras aventuras como principiante en la recolección de setas.

Desde Quincemil recogemos cuáles son algunos de los hongos más peligrosos y más comunes en Galicia.

Amanita phalloides

Es una seta muy tóxica para los humanos, además de ser muy común en Galicia. Su aspecto es muy parecido al de otras especies sí aptas para el consumo humano. Tal es así, que a este hongo también se la conoce por nombres como oronja mortal, mataperros o seta del diablo.

Las láminas que posé bajo su tallo son una de sus características más distintivas. Son láminas blanquecinas, anchas, desiguales y apretadas. En su parte superior, sin embargo, adopta un color amarillento, incluso verdoso, que se va oscureciendo a medida que llega al centro. Su textura esponjosa y su olor agradable pueden llevar a confusión a los más novatos.

Ante la más mínima sospecha de que podemos estar frente a una Amatina phalloides es mejor dejar el ejemplar. En el mundo de la micología es importante no arriesgarse.

Amanita muscaria

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La amanita muscaria es de la misma familia que la mataperros o seta del diablo. En este caso es más sencillo reconocerla, puesto que llama la atención por su color rojo intenso y sus pecas blancas. Adopta tener un tamaño considerado en su etapa de maduración, entre los 10 y los 20 centímetros.

Este hongo destaca por capacidad alucinógena. En caso de consumirla podríamos comenzar a tener síntomas como vómitos, agitación psicomotriz y sensaciones similares al de una intoxicación etílica.

Cicuta blanca

Es una de las más complicadas de toparse, ya que generalmente suele proliferar en primavera. Es característico su color blanco intenso, sus grandes láminas desiguales y su pie blanco, delgado y alargado.

Amanita virosa

Cicuta Blanca

Al contrario que la Amanita phalloides, este hongo se caracteriza por su olor fuerte y desagradable. No tiene mucha carne, por lo que no es viscosa. El pie es también esbelto, incluso velludo. Le caracteriza su forma de huevo y su base con anillo.

Cortinarius orellanus

Su veneno ataca a los 10 días al hígado y a los riñones. Es extremadamente peligrosa, ya que el afectado por su veneno tarda días en darse cuenta de la intoxicación. Su aspecto es muy característico, destaca su color marrón rojizo. Sus láminas, sin embargo, se asemejan al rojo sangre.

Dónde buscar y cómo recolectar

Para recoger setas la normativa establece que debemos hacerlo con cuchillo o navaja y nunca arrancarla de la tierra. A la hora de almacenarlas lo más recomendable es una cesta de mimbre por su permeabilidad y su disposición abierta, que permite la circulación del aire y la liberación de esporas.

Los mejores lugares para practicar la micología en Galicia son las zonas de interior. Una buena opción es la Ribeira Sacra o el Courel.