Más de 600 personas participaron en la muestra de este estudio elaborado por Unión de consumidores de Galicia, que pretendía conocer en qué medida las personas consumidoras gallegas mantienen determinados hábitos de consumo que pueden incidir de una manera muy directa en las cifras de desperdicio alimentario que se producen nos nuestros hogares.
En primer lugar, el estudio quería conocer cómo de implantado está el hábito de realizar previamente una lista de la compra antes de acudir a las tiendas, en este sentido cabe destacar que más del 69% elaboran siempre o casi siempre una lista de los productos que necesitan. En este sentido, son los menores de 35 años los menos siguen este tradicional consejo de las asociaciones de consumidores (57%).
Más del 77% declara aprovechar las sobras para elaborar otros platos, por edades, son nuestros mayores quien más aprovechan los restos de comida (84%) y nuevamente son los menores de 35 años quien menos uso hacen de restos para elaborar otros platos (56%).
A la hora de ir a comprar, y como aspectos que pueden influir en las cifras de desperdicio a consecuencia de no aprovechar al máximo su potencial, el 45% de los gallegos afirman acudir a ofertas del tipo 3×2 o similares. Casi el 73% afirma respetar siempre o casi siempre las fechas de consumo preferente a pesar de que en ocasiones el alimento pueda ser consumido. Solo el 12% de los gallegos afirma comprar con asiduidad alimentos próximos a caducar, una práctica que no solo puede suponer una ahorro para nuestros bolsillos sino también contribuir a aminorar el desperdicio que se produce en el sector de la distribución.
Por grupos de alimentos, frutas, verduras y hortalizas son los que más veces acaban en el cubo de basura (un 50%), seguido de alimentos cocinados que nos sobraron (32%), carnes, fiambres y embutidos (29%). Los que menos son las conservas (9%), lácteos (16%), pescado (17%) y alimentos congelados y preparados (18%).
En un tercer bloque el estudio de Unión de consumidores de Galicia quiso abordar los hábitos del consumidor a la hora de comer fuera de casa y sobre este particular se trasladó la pregunta de en que medida según su experiencia los responsables de los establecimientos de hostelería les ofrecían por propia iniciativa llevar la casa los alimentos no consumidos (sea el propio personal o por indicaciones en el establecimiento).
El resultado resulta a juicio de Unión de consumidores bastante prometedor ya que el 44% de los entrevistados señalan que siempre o casi siempre reciben esta información por parte del establecimiento hostelero, el restante 56% con todo señala que nunca o casi nunca esta oferta surge de la iniciativa del restaurante.
Por el contrario Unión de consumidores de Galicia considera un buen dato que sean muchos los usuarios de los servicios de hostelería y restauración que manifiestan no mostrar reparo en solicitar ellos directamente que les sean preparados los alimentos no consumidos para poder llevarlos a su hogar como de hecho más de un 32% señala que por lo general siempre que sobran alimentos en el restaurante solicitan su preparación para llevarlos consigo. Con el 44% indica que lo hizo en alguna ocasión.
Preguntados por último sobre se los establecimientos les aplicaban algún coste por el envase utilizado para llevar los alimentos no consumidos más del 65% manifiesta que nunca o casi nunca les cobraron por el envase.