La Lotería de Navidad ya está a la venta. Los décimos empezaron a llegar a las administraciones de A Coruña a lo largo de la primera semana de julio, pero algunas ya se encuentran con la circunstancia de tener que pedir más. "Ahora mismo estamos prácticamente con lo que tenemos, pero no llega a Navidad ni de coña y aún faltan muchas reservas por hacer", explica el dueño de El filón de oro.

Precisamente esta administración situada en la rúa Nova de A Coruña, que repartió una lluvia de millones en 2023, ya vendió 1.300 décimos del segundo premio que se terminaron convirtiendo en 162 millones de euros para sus clientes. Desde entonces, han notado un aumento en el número de ventas, "ya en el sorteo de Reyes fue un incremento muy fuerte y este año se nota mucho en el día a día. Y ahora, más".

Cerca de El filón de oro está La buena estrella, otra de las administraciones céntricas de A Coruña, situada en la calle de la Estrella. "No llevamos mucho (vendiendo), pero se está vendiendo. La gente ya pregunta desde mayo por ella", explican. El verano es uno de sus mayores picos de venta "por los turistas", sobre todo nacionales, que quieren "llevarse lotería de A Coruña". 

¿Se sigue buscando un número en particular?

Dos clásicos a la hora de comprar Lotería de Navidad es buscar un número en concreto o una terminación. Ya sea porque esas cifras son especiales para el comprador o porque están consideradas como "de la suerte", como han podido ser tradicionalmente el cinco o el siete. Sin embargo, las administraciones detectan que "cada vez se pide menos terminación".

"O vienes directo a por el número porque sabes que lo hay aquí, o sino, la mayoría de gente te dice 'dame el que va a tocar', y claro, ese es el que yo quiera", explican de La buena estrella. Sus vecinos de El filón de oro no podrán repetir la venta del número que tan buena suerte trajo el año pasado, ya que nunca se mandan los mismos números dos años seguidos, salvo que sea abonado.

En cuanto al perfil de cliente, "la gente joven pasa un poco", explican, pero a partir de los 30 años y "sin límite", casi todo el mundo se anima a comprar Lotería de Navidad, buscando que la suerte (y los niños de San Ildefonso) les sonrían el próximo 22 de diciembre.