Muchos hablan del circo como el mayor espectáculo del mundo. Un espectáculo, el del ocio y disfrute, que puede remontarse varios siglos atrás, pero que adquiere forma de circo como tal en el Londres de 1768. El jinete inglés Philip Astley decidió fundar el Astley Riding House, considerado el primer circo moderno.
Desde sus orígenes en las civilizaciones antiguas, hasta los circos más actuales, que combinan teatro, danza y tecnología, el circo ha sido siempre un lugar donde reírse y creer en los imposibles. Y es que este tiene la capacidad de provocar risa y asombro a partes iguales, dos cosas que no entienden de edades y que llevan años atrapando a todo tipo de públicos alrededor del mundo.
En España, el circo ha dejado una huella imborrable gracias a figuras icónicas como los hermanos Tonetti o los famosos Gaby, Fofó y Miliki, los icónicos Payasos de la Tele.
Hoy en día, lejos de ser un arte en decadencia, el circo sigue más vivo que nunca, reinventándose constantemente y conquistando nuevas audiencias. En Santiago, su presencia es especialmente significativa, con festivales y espectáculos callejeros, mucha gente del sector residiendo en la ciudad y una escuela histórica de esta disciplina.
El circo en Santiago
Presentación del Festival C 2024, en Santiago.