Respeto, tolerancia, compañerismo, solidaridad, empatía, conocimiento, cuidado y protección de la naturaleza y la protección del más débil son los valores que se promueven desde el momento en el que uno de los miembros del Grupo Scout 19 de Ferrol pone un pie en los jardines del Baluarte de San Juan, en el barrio de Ferrol Vello, cada sábado, de 11:00 a 13:00 horas.
Lo hacen porque así lo transmiten con entusiasmo y claro convencimiento los 10 monitores que actualmente pilotan esta formación de manera totalmente voluntaria con el propósito de que estos valores sobrevuelen al día a día de cada uno de sus miembros. La coordinación recae desde hace casi 15 años en Raquel Piñeiro Rodríguez.
Lo integran cerca de 40 scouts de la comarca: 14 en el grupo denominado Manada (de entre 8 a 11 años), 9 en la Sección Scout (de 12 a 14 años), 9 en la Unidad Esculta (de entre 15 y 17 años) y 5 del Clan (de 18 a 21 años).
En 2023 celebraron el 60º aniversario del grupo con varias actividades y cerraron el año con el tradicional campamento de invierno: tres noches con la mejor disposición en el albergue del centro etnográfico del río Mandeo, en el Concello de Curtis, entre el 27 y el 30 de diciembre.
Durante estos tres días de convivencia, la Sección Scout y Manada exploraron el entorno, realizaron una guía de los servicios básicos de la zona urbana y aprendieron la importancia del ciclo del agua. La Sección Scout, Unidad Esculta y Clan organizaron salidas por las inmediaciones y los Esculta se encargaron también de diseñar actividades de rastreo para la Manada puesto que, resalta Raquel, "el deber de un scout empieza en casa" y en esa tarea eran necesarios.
Además, los dos grupos de pequeños se encargaron de preparar los bocadillos para la merienda de todos, la Unidad Esculta hizo los desayunos y los mayores cocinaron las comidas y cenas. También prepararon un postre a base de freixós, realizaron yoga cada mañana y entre todos crearon un ambiente que facilitara dar la mejor versión de cada uno. "Nuestro espírito es el de estar animoso ante las dificultades".
"El movimiento scout sigue vivo en Ferrol después de 60 años", destaca Raquel, "y vamos a por otros 60". Un claro ejemplo es Juan Gil Nieto, que se mantiene comprometido con el Grupo 19 desde que entró como educando el año en que se creó, hace 60 años. "Sigue implicado, nos proporciona apoyo logístico, nos imparte formación en primeros auxilios y sobre todo nos premia con su sabiduría", dice con cariño Raquel.
Una emotiva ceremonia para mostrar un compromiso
Para llegar a eso lo primero es comprometerse con los valores del escultismo y con uno mismo y demostrar que se trabajará según la ley scout en todos los aspectos de la vida. Así lo hicieron en un emotivo evento durante el campamento en Curtis seis miembros rodeados de sus compañeros y monitores y apoyados por sus familiares.
Es en este momento cuando reciben el popular pañuelo para el cuello del color que fija cada agrupación y que identifica la promesa de un scout en el mundo entero. En este campamento también se celebró la ceremonia de bienvenida a los nuevos integrantes, otros seis, que antes de hacer su promesa deberán conocer los valores del grupo y del movimiento scout.
Para ello, además de reunirse cada sábado en el Baluarte de San Juan, cada trimestre realizan salidas de un día y un campamento de varias noches, pero es en verano cuando tiene lugar la gran acampada, de unas 5 ó 6 noches, donde ponen en práctica muchos de los conocimientos adquiridos durante las reuniones. En el último, por ejemplo, una de sus labores fue adecentar y limpiar el entorno de la ermita de San Cristóbal, cerca de donde estaban acampados.
En estas salidas conviven en plena naturaleza jóvenes de varias edades —los más pequeños están muy arropados por los mayores— para valorar y mimar su entorno sin necesidad de abundancias. De hecho, una de las preguntas a las que tiene que responder el miembro que hace la promesa es "¿qué ventaja material esperas?", a lo que todos responden "ninguna". También debe argumentar por qué quiere ser scout, a lo que responden "para aprender a servir mejor a los que me rodean" y citar el artículo de la ley scout con el que más se identifican, entre otras cuestiones.
El Grupo Scout 19 de Ferrol pertenece a la Organización Mundial del Movimiento Scout (OMMS) a través de la agrupación a nivel gallego, que forma parte de la Federación de Asociaciones de Scouts de España (ASDE).
Sus monitores, que compaginan su vida laboral y personal con su compromiso voluntario con el movimiento scout, proceden de muy diversos sectores, como el de la informática, la tecnología, la biología ambiental, el comercio, el cuidado de mayores, el mundo militar y otros servicios públicos, entre otros.
Cada uno de ellos se encontró en algún momento de su vida con el movimiento scout, cuenta Raquel con agradecimiento, descubrieron su utilidad y ahora se esfuerzan por devolver su conocimiento y entusiasmo a las nuevas generaciones "tratando de poner nuestro particular granito de arena en su formación".