Festa da Istoria: recordando las raíces sefardíes

Durante los dos días que dura la fiesta, que este año tiene lugar los días 30 y 31 de agosto, Ribadavia, una de las poblaciones más bonitas de Galicia, se convierte en una auténtica villa medieval para recordar la presencia judía, rememorando la época en la que los judíos se instalaron por primera vez en esta localidad, en torno al siglo XI, hasta que fueron expulsados en 1492 y posteriormente perseguidos por el Tribunal de la Inquisición.

La Festa da Istoria fue declarada de Interés Turístico Nacional y tiene una importancia tan grande en Ribadavia que todos sus habitantes se implican con los preparativos y el atuendo. Es importante vestirse de época porque sólo los que cumplen este código de vestimenta pueden entrar a las eventos que se realizan en lugares cerrados. Pero no te preocupes si te has presentado en Ribadavia sin traje medieval: durante la fiesta, la Coordinadora da Festa da Istoria habilita un puesto de información en la Praza Maior en el que se alquilan trajes, tanto de adulto como de niño a las personas que lo necesiten. 

En el marco de la fiesta se desarrollan distintas actividades de origen medieval, como exhibiciones de cetrería, desfiles, torneos a caballo, representaciones teatrales y hasta una boda judía en la Oliveira, uno de los eventos más esperados. También merece la pena acercarse al Auditorio do Castelo para ver el ajedrez viviente, así como presenciar el baile medieval de damas y caballeros y disfrutar de las numerosas actuaciones callejeras de música sefardí, malabaristas, títeres o cuentacuentos orientados a los más pequeños. 

El maravedí, la moneda oficial de la fiesta

Una curiosidad de esta fiesta es que está tan bien ambientada que hasta hay que pagar en moneda de la época, el maravedí. Cada año se imprimen cientos de maravedíes que funcionan como moneda oficial para pagar tanto en el mercado como en muchos restaurantes y comercios de la villa. Es la única moneda aceptada para pagar en los puestos. 

Para que este sistema de pago funcione, el Banco Alhóndiga, situado en la Praza Maior, es el encargado de facilitar la divisa a los mercaderes y a los negocios de la villa y de facilitar cambio a los visitantes. Es tal la importancia de esta moneda que los maravedíes ya se han convertido en verdaderas obras de arte realizadas a plumilla, de interés para muchos coleccionistas de moneda. 

Gastronomía popular sefardí

Y como en cualquier fiesta gallega que se precie no puede faltar la gastronomía popular: rosquillas de yema, galletas o las famosas estrellas de David son algunos de los postres heredados de los sefardíes, cuyas recetas guardan celosamente los reposteros locales. 

El broche final es la comida medieval, con reserva previa, que se celebra en la antigua iglesia de A Madalena, en la que se puede saborear empanada, lamprea, cordero, licores y postres. Todo ello regado con buenos ribeiros y albariños, que para eso estamos en una de las comarcas productoras de vino más importantes de Galicia. 

Más que fiesta en Ribadavia

Aprovecha la Fiesta da Istoria para conocer un poco esta bella localidad medieval y acércate a sus principales puntos de interés. Pasear por su casco histórico-artístico supone hacerlo entre templos y pazos desde el siglo IX. La Fortaleza de los Condes de Ribadavia, las iglesias de Santiago, Santo Domingo y la Praza Maior son algunos de los básicos que no te puedes perder en tu visita a la localidad ourensana. 

Pero si hay una zona imprescindible para el visitante es el Barrio Judío. Fundado entre los siglos XII y XIII en los alrededores de la Puerta Nueva de la antigua muralla, el Barrio Judío todavía conserva un verdadero ambiente medieval que se refleja en cada casa y edificio que nos vamos encontrando. 

Tienes más información sobre la Festa da Istoria en su página oficial https://festadaistoria.com. Además hay disponible una APP -Festa da Istoria- que permite seguir y localizar cada una de las actividades y eventos  que tienen lugar en esta espectacular fiesta, exaltación del pasado medieval y judío de Ribadavia.