Cuando se habla de Mugardos enseguida acude a nuestra mente la imagen y el sabor del exquisito “polbo á mugardesa”, una especialidad de este municipio coruñés que responde a la necesidad de mezclar el pulpo con patata y cebolla para hacer las raciones más abundantes en épocas de crisis. Y la fórmula parece haber funcionado, pues esta manera de preparar el pulpo se ha convertido en uno de los principales reclamos turísticos de la localidad y en su plato más popular.
No en vano cada mes de julio Mugardos celebra su Festa do Polbo, declarada Fiesta de Interés Turístico de Galicia, que tiene su origen en las reuniones y romerías campestres que los vecinos disfrutaban con el pulpo como protagonista.
Pero hay más planes interesantes que hacer en Mugardos además de comer pulpo. Estas son algunas de nuestras propuestas.
1. Recorrer su paseo marítimo
Cualquier pueblo marinero que se precie tiene su propio paseo marítimo. El de Mugardos, como lo son los de Malpica, Camariñas o Cangas, es el centro de la villa, punto de encuentro de sus vecinos y escenario ideal para el paseo a cualquier hora del día o de la noche.
Su amplia pasarela de madera con balaustrada fue en su momento origen de controversias por su alto coste de mantenimiento, pero hoy es uno de los elementos más característicos y diferenciadores de Mugardos.
Desde el puerto, el Cantón da Mariña, hasta la Playa de Bestarruza el trayecto no es muy largo y permite admirar la colorida fachada marítima en la que destacan algunas viviendas con galerías para dar entrada a la luz, además de disfrutar de un delicioso pulpo en las numerosas terrazas que se esparcen por el paseo.
2. Visitar su puerto y el Cabo Leiras
En uno de los extremos del paseo marítimo, en la Avenida do Mar, se ubica el pintoresco puerto de Mugardos, que fue en la antigüedad uno de los puertos más importantes de Galicia. Junto a su marina permanecen las casas de los pescadores, que reúnen todas las características de las viviendas de tradición marinera con sus galerías típicas de la costa coruñesa.
El muelle de Mugardos dispone de un fondeo-calado de dos metros y un pequeño muelle de pasaje. Aunque el marisqueo es una de las principales actividades económicas de la población, en el puerto tienen su base algunas embarcaciones dedicadas sobre todo a la pesca artesanal, costera o de bajura, con el pulpo y la nécora como capturas destacadas. Doblando el puerto, el Cabo Leiras, con el puerto deportivo de Ferrol justo enfrente.
Pasando la Ensenada de A Barca hay otro pequeño fondeadero, el de O Seixo, que también pertenece al municipio mugardés.
3. Descubrir un antiguo yacimiento romano
Para aquellos interesados en actividades culturales Mugardos también tiene su peculiar oferta, que quizá no esperarías encontrar en un pueblo marinero. Se trata de un yacimiento romano conocido como los Baños de Caldoval, encontrado en 1997 en la Ensenada de Santa Lucía.
En el emplazamiento original sólo quedan algunos restos y para ver los baños tendremos que dirigirnos al Centro de Interpretación de Caldoval, a donde se trasladó este complejo de baños que pertenecían a una “villa a mare”, una villa romana habitada entre los siglos I y V d.C. Se trata de los únicos baños privados con palestra descubiertos, hasta ahora, en todo el noroeste peninsular.
4. Darse un baño en la playa de Bestarruza
En el otro extremo del paseo marítimo de Mugardos se encuentra la pequeña playa de Bestarruza, con sus no más de 500 metros de longitud. Es una playa vecinal, dada su cercanía con el pueblo, tranquila y de aguas calmas, perfecta para darse un baño o tumbarse un rato al sol tras dar un paseo.
5. Hacer el Camiño Real de Mugardos
Los orígenes documentados de Mugardos datan del año 1105, cuando la mitad de la villa pertenecía al Monasterio de Caaveiro. Con posterioridad pasó a manos de la familia Andrade y al señorío de Montefaro, hasta que en 1805 se le declara libre, se le concede escudo municipal y se declara Real Villa.
Vestigio de este pasado es el llamado Camiño Real de Mugardos, que hoy puede recorrerse parcialmente una vez pasada la playa de Bestarruza, las ruinas del Pazo da Condesa y la aldea de O Baño. Esta ruta puede alargarse hasta el Castillo de la Palma (Castelo da Palma) girando por Punta Redonda.
6. Conocer el Castelo da Palma
Formando parte del llamado “triángulo de fuego” para defender la ría de Ferrol (junto con el Castillo de San Felipe y el antiguo fuerte de San Martín) se hallaba el Castelo da Palma, construido en el s. XVI. Carecía de armamento ya que su única función era vigilar el paso marítimo por la ría.
Acabó convertido en cárcel militar, donde fue encarcelado tras el 23-F el golpista y exteniente coronel de la Guardia Civil Antonio Tejero. Hoy en día se puede acceder a él los fines de semana mediante visita guiada. Para solicitar dicha visita y confirmar horarios lo mejor es contactar con el Concello de Mugardos.
7. Cruzar en lancha hasta Ferrol
Aquellos que gusten de los cruceros y los paseos en barca o de realizar alguna actividad distinta, disfrutarán cruzando la ría en lancha hasta Ferrol. La lancha se toma en el embarcadero de Mugardos y llega hasta el Porto de Curuxeiras en Ferrol. Es conveniente preguntar horarios y frecuencia en el propio puerto, ya que las salidas pueden depender de la demanda en cada momento.
8. Mugardos, puerta de entrada a la Ría de Ferrol
Hay muchas otras actividades interesantes en Mugardos, pero como puerta de entrada a la Ría de Ferrol y a la misma Costa Ártabra, partir de esta localidad nos permite conocer la ciudad de Ferrol, con sus museos navales, su puerto y su ruta modernista.
También conocer otra interesante fortaleza como el Castillo de San Felipe (enfrente de la Palma) o las playas más próximas a la urbe ferrolana, léase Doniños, meca del surf, la familiar playa de San Xurxo o el espacio protegido de la laguna y arenal de Valdoviño.
Emma Sexto