La Costa Ártabra es una de las grandes desconocidas en Galicia, si bien alberga infinidad de paisajes espectaculares: desde los acantilados más altos de Europa hasta la única playa de arena negra de origen no volcánico de la Comunidad. En verano no hace falta cruzar el océano Atlántico para disfrutar de pequeñas y paradisiacas playas con aguas de color azul turquesa porque en la Costa Ártabra se ubican varios arenales aún por descubrir.
Si estás buscando una zona de baño tranquila y alejada de las grandes masificaciones, este artículo de Quincemil te interesará. Hoy te desvelamos tres playas únicas del norte de la provincia de A Coruña a las que deberías ir al menos una vez en la vida, aunque casi seguro que querrás repetir.
Cala de Mi Señora
En la pequeña cala de Mi Señora, en Cedeira (A Coruña), solo escucharás el rumor de las olas. Está situada en la Punta de la Robaleira, en el límite de los términos municipales de Valdoviño y Cedeira. Tiene 60 metros de largo y 15 metros de ancho, y el acceso más habitual es en barca, por lo que son pocos los bañistas que llegan hasta el arenal, incluidos los meses de verano.
Declarado Lugar de Importancia Comunitaria (LIC), en este arenal encontrarás mucha paz y aguas cristalinas de color azul turquesa. Es una zona ideal para practicar buceo o snorkel, y observar la flora y fauna marina que habita en ella.
Playa de Sarridal
La playa de Sarridal es uno de los mejores secretos guardados de los vecinos de Ortigueira. Este arenal es algo parecido al paraíso por la espectacularidad de las olas que hay en la zona, si bien si buscas refrescarte, quizás no sea la playa más idónea. Tiene 1.050 metros de largo y 100 de ancho, pero cuando sube la marea, la zona de arena casi desaparece, por lo que es muy importante consultar la tabla de mareas.
La playa de Sarridal está a un paso del mirador Pena Furada y muy cerca del banco más bonito del mundo. Además, a unos 14 minutos en coche por la carretera AC-862 está la playa de Esteiro, de arena fina y blanca, con sucesión de espacios dunares.
Playa de Porto Carrizo
En último lugar, y no por ello menos importante, también deberías visitar la playa de Porto Carrizo para un día de desconexión y relax. Está en la parroquia de Pantín, en Valdoviño (A Coruña), y carece de servicios propios, pero hace uso de los servicios de la playa contigua de Pantín.
De arena dorada y aguas cristalinas, la playa de Porto Carrizo está aislada de núcleos urbanos y, por tanto, es un lugar perfecto para desconectar del ajetreo del día a día. Cuenta con un equipo de salvamento en caso de urgencia.