
Corcubión, A Coruña
Los 10 mejores planes y cosas que ver en Cee y Corcubión de visita
Cee y Corcubión, así como sus alrededores en la Costa da Morte, ofrecen multitud de experiencias repletas de cultura, playas y un entorno de naturaleza que sorprende por su espectacular belleza
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La ría de Corcubión (A Coruña) baña los ayuntamientos de Cee, Corcubión, Fisterra, Dumbría y Carnota. Un paraje espectacular donde se precipitan las aguas del río Xallas en la cascada do Ézaro, uno de los lugares más impresionantes de la costa gallega. Cee es un municipio de menos de 8.00 habitantes con una superficie bastante irregular y a una distancia de 95 kilómetros de A Coruña. Por otro lado, Corcubión tiene poco más de 1.000 habitantes y se encuentra a una distancia de 98 kilómetros de la ciudad herculina. Esta ría de la Costa da Morte sorprende por estar en un entorno de máxima naturaleza que invita a perderse en cada uno de sus rincones. Te contamos los 10 mejores planes que ver y hacer en Cee y Corcubión.
Esta ría comienza en la punta del Faro de Fisterra, donde los romanos ubicaron el "fin de la tierra", hasta la Playa de Carnota, la más extensa de Galicia con sus 7 kilómetros de arenal. A partir de aquí se encadenan pequeñas playas y calas en el litoral, que hay que recorrer con calma para no perderse ninguno de sus matices.
1. Conocer el patrimonio arquitectónico de Cee

Castelo do Príncipe de Cee
Cee es un municipio que cuenta con un gran patrimonio histórico, artístico y cultural, encabezado por la iglesia de Santa María da Xunqueira, del siglo XV. Esta construcción cuenta con una puerta gótica que resistió a lo ataques de las tropas napoleónicas. Las leyendas dicen que durante su emplazamiento en la Praza do Mercado de Cee se apareció la Virgen, y de ahí su nombre. Otros ejemplos son la capilla de Santo Adrián de Toba y la iglesia de santo Estevo de Lires.
Por otro lado, el Castelo do Príncipe datado del siglo XVIII fue declarado Bien de Interés Cultural en el 1994. La mala noticia es que es de propiedad privada, por lo que su interior no se puede visitar. Debemos conformarnos con admirar su exterior y la preciosidad de sus murallas.
2. Visitar el jardín botánico de Cee

Jardín botánico de Cee
El Museo-Fundación Fernando Blanco, un nativo de la localidad nacido en Cee en 1796 es, sin duda, otro de los atractivos culturales de Cee. Tras emigrar a Cuba y conseguir una buena cantidad económica, regresó a su tierra de origen e invirtió gran parte de su dinero, como hicieron los emigrantes conocidos como "indianos". De esta forma, nació este museo que alberga instrumentos científicos del siglo XIX, instrumentos musicales, arte y muestras de animales y minerales, entre otros.
En el jardín botánico del instituto existe una gran diversidad de árboles centenarios de gran tamaño y diversas formas, como cedros del Líbano, cedros del himalaya, magnolios y hasta abetos griegos y del Cáucaso.
3. Pasear por la playa urbana de Cee, A Concha

Paseo marítimo de la playa de A Concha, Cee
El nombre de esta playa proviene de su peculiar forma. Este arenal urbano de Cee tiene una longitud aproximada de 185 metros y una anchura de 35 metros. Está rodeada de zonas ajardinadas y de un fantástico paseo marítimo ideal para caminar o para ir en bicicleta, pues cuenta con carril bici.
Desde el lado izquierdo de la playa se puede observar las hermosas vistas de Corcubión. A 1 km podemos encontrar el puerto deportivo denominado 'Puerto Deportivo de Corcubión'. También, muy cerca se encuentra Fisterra, la playa de Gures, la playa de Lira y la playa do Quenxe.
4. Recorrer el casco antiguo de Corcubión

Iglesia de San Marcos, Corcubión
La villa de Corcubión fue declarada Conjunto histórico-artístico en el año 1995. Esto es así porque a pesar de ser el municipio de la provincia coruñesa con menor extensión, cuenta con una gran cantidad de monumentos de interés turístico que la convierten en una visita obligada por su belleza, cultura e historia.
El casco antiguo del municipio, declarado Bien de Interés Cultural, está compuesto por varias iglesias medievales, como la Iglesia de la Redonda, construida en el siglo XIII, o la iglesia románica de San Marcos, del siglo XII, si bien es cierto que sufrió reformas posteriores. Además de esto, también cuenta con una fortaleza defensiva, el Castillo del Cardenal, datado de mediados del siglo XVIII cuya construcción fue pensada para proteger la entrada de la ría, así como numerosas casas solariegas y grandes pazos como el de los Condes de Altamira, del siglo XV.
5. Bañarse en la playa de Gures

Vista de la playa de Gures, en Cee
La playa de Gures, situada en la parroquia de Ameixenda (Cee), es una de las playas más espectaculares de la Costa da Morte y que merece mucho la pena visitar. Destaca por el color turquesa de sus aguas y por su arenal rodeado de auténtica belleza natural. Desde ella se puede observar el cabo de Fisterra, el Monte Pindo y las Islas Lobeiras.
Es una playa virgen de arena fina y aguas tranquilas, con una longitud de unos 350 metros de largo y 25 metros de ancho. Hay que recalcar que su acceso es un tanto difícil, pues hay que bajar un camino de tierra que finaliza en las rocas desde las que puedes acceder a la playa.
6. Disfrutar de las vistas desde algún mirador de la Costa da Morte

Mirador do Ézaro
A lo largo de la ría de Corcubión tienes la oportunidad de disfrutar de panorámicas espectaculares desde varios de sus miradores. Destaca, por ejemplo, el mirador de Gures, desde el que contemplar una vista increíble de Fisterra, la ensenada del Ézaro, el monte Pindo, las islas Lobeiras y la ría de Cee y Corcubión. Aquí podrás ver el amanecer y el atardecer en su máximo esplendor desde alguno de sus bancos, mientras contemplas la inmensidad del océano.
Otro mirador de visita obligada es el mirador del Ézaro, aunque subir a él es complicado por su gran pendiente. No obstante, te aseguramos que merece mucho la pena porque te quedarás asombrado con su impactante panorámica. También, el mirador do Monte Quenxe con su castro, abierto a la ría y con vistas sobre Corcubión.
7. Hacer la ruta de los molinos de San Adrián de A Toba

Molinos tradicionales en Cee Cee (A Coruña)
El pequeño paseo que recorre los Muíños de San Adrián de Toba invita a descubrir el encanto detrás de un conjunto de cinco molinos de agua que fueron restaurados a finales del siglo XX. Estos están situados muy cerca de la iglesia de San Adrián, un majestuoso hórreo de unos 15 metros de longitud.
Nacido en las laderas de Pedra Monteira, el Rego das Laxes serpentea por la parroquia de San Adrián de Toba antes de fundir sus aguas con las del río Cee. Aunque el recorrido de este riachuelo es breve, antiguamente los habitantes de la zona aprovechaban la fuerza del mismo para poner en funcionamiento los engranajes de los molinos.
Su entorno fue acondicionado con caminos de piedra y todo tipo de bancos, barandillas, mesas y barbacoas para poder disfrutar de una experiencia completa rodeado de naturaleza y tranquilidad.
8. Explorar la playa y el faro de Lariño

Lariño y su faro
Si decides visitar los municipio de Cee y Corcubión debes visitar varios de sus alrededores. Para descubrir la ría de Corcubión al máximo puedes empezar en la villa de Muros, uno de los pueblos más bonitos de toda Galicia o, al menos, eso es lo que dice todo aquel que lo visita.
Una vez te hayas empapado de su belleza medieval y marineda, puedes continuar bordeando todo el litoral dirección al norte para llegar al famoso Monte Louro y su estupenda playa con laguna. Muy cerca de ahí puedes aprovechar para visitar la playa de Lariño, junto al faro de Punta Ínsua o faro de Lariño, construido en 1913, hoy reconvertido en hotel.
9. Hacer la ruta hacia el Monte Pindo

Vistas desde el Monte Pindo
Pocos lugares hay más reconocidos por los alrededores de la Costa da Morte que el Monte Pindo. Se trata de un macizo de 627 metros de altura, ubicado en el municipio de Carnota. Junto con la playa de Carnota, forman el espacio natural llamado Carnota-Monte Pindo, catalogado como Lugar de Importancia Comunitaria y que se encuentra incluido en la Red Natura 2000.
Se puede acceder hasta sus alturas a través de una ruta de senderismo que no deja a nadie indiferente. El paisaje y las vistas que tendrás ante ti hacen que merezca la pena el esfuerzo físico que supone.
10. Visitar la playa de Carnota y su hórreo

Playa de Carnota
Si por algo es conocido el municipio de Carnota es por su espectacular playa kilométrica y por su famoso hórreo, entre los más grandes del mundo.
La playa de Carnota está considerada la más extensa de Galicia, con un total de 7 kilómetros de longitud. En ella puedes disfrutar de diferentes zonas, destacando la de Caldebarcos y la de Boca do Río.
Por su parte, el hórreo de Santa Comba de Carnota se sostiene por 22 pies a lo largo de sus 3 metros de largo. Se encuentra junto a la iglesia parroquial de Santa Comba y está acompañado por un antiguo palomar.