La gastronomía gallega es bastante uniforme, pero a lo largo y ancho de la comunidad hay especialidades diferentes, incluso varias formas de preparar un plato. El pulpo es á feira, pero también a la mugardesa o a la brasa. Por su parte, la tortilla de patatas poco a poco se rinde al estilo Betanzos, y claramente sin cebolla.

En el caso de los bogavantes, a la receta de cocerlos desde hace tiempo les ha salido como rival la de freirlos o hacerlos a la plancha, acompañándolos de patatas fritas. Esta forma de presentar el lubrigante se ha ido haciendo más y más popular en las Rías Baixas, añadiendo también los huevos fritos, y recientemente esta versión ha llegado al corazón de A Coruña, a la Vermutería Martínez de la calle Galera.

Este restaurante tiene decenas de vermuts diferentes, pero también cuenta con una de las mejores cartas de marisco fresco de la ciudad: ostras, carabineros, gambas de Denia y, desde hace unos meses, bogavantes con huevos camperos y patatas fritas. El éxito del plato ha sido tal que a principios de julio Fran, responsable del restaurante, instaló un acuario a la entrada para mantener a los bogavantes vivos y poder servirlos durante toda la semana.

Hasta entonces compraba los bogavantes los jueves y solo preparaba el plato durante el fin de semana, pero ahora la pecera le permite mantenerlos en carta todo el tiempo. Además, es entretenido mirar cómo se mueven y a veces se pelean entre ellos. "Menos mal que tienen las pinzas atadas", comenta el hostelero.

Una especialidad que triunfa: "La gente flipa"

Fran comenta que el plato está siendo un éxito y que los clientes están encantados con el resultado: "La gente flipa", resume. Los bogavantes que el local compra y mantiene en el acuario son todos del tipo azul y proceden de cetarea, siendo siempre autóctono o de la costa escocesa. El responsable del restaurante prefiere comprarlos hembras por la abundancia de coral.

Una de las cosas que más ha llamado la atención es la forma de pedirlo o comerlo. Técnicamente, la manera de degustar este plato es rompiendo los huevos y mezclando su yema con los trozos de bogavante y las patatas, a modo de revuelto. Sin embargo, hay muchos que lo comen por separado, al estilo plato combinado. 

Los clientes pueden pedir el número de huevos que quieran para acompañarlo, algo que ha provocado algunas sorpresas. Hay clientes que lo piden como segundo plato, pero ya hay varios que lo han ordenado como entrante, acompañándolo luego de un chuletón de vaca vieja.

En cuanto al precio, aunque el del marisco oscila, el plato cuesta siempre lo mismo: 55 euros por medio kilo de "bicho". Un bogavante suele pesar entre 500 y 800 gramos, por lo que el plato cuesta entre 70 y 100 euros. Desde la Vermutería indican que "sabemos que perderemos dinero en Navidades", pero optan por mantenerlo siempre igual para que sea un plato de referencia del restaurante.

Famoso en O Grove, también en Mera y Caión

El plato de bogavante frito con patatas y huevo es muy habitual en Baleares, especialmente en las islas Pitiusas, Formentera e Ibiza. En algún momento de las últimas décadas esta receta comenzó a llegar a varios restaurantes gallegos, pero hay una localidad donde es especialmente conocida.

En O Grove, capital gastronómica de Galicia y por lo tanto del mundo, hay dos sitios que tienen gran fama preparando este marisco a la plancha. Uno es la marisquería D'Berto, la más reputada de la zona, que lo hace con patatas chips, mientras que el otro es el restaurante Pan de Millo, que lo presenta sobre patata panadera.

La forma de preparar el bogavante frito se ha ido extendiendo y desde hace años se hace con huevo en otros lugares de las Rías Baixas. En el caso de Pontevedra, en el asador Albanta y Casa Román se prepara desde hace años así. Fue el primero el que inspiró a Fran para llevar el plato a A Coruña, aunque no a la brasa como en el Albanta, sino a la plancha.

En el área herculina también hay otros restaurantes que cocinan así este crustáceo. Se trata de Furna Atlántica, en Caión (A Laracha), y de A Taberna do Arxentino, en Mera (Oleiros). En A Coruña ciudad la Vermutería Martínez ha sido, que sepamos, el primero en ofrecer bogavante con huevos y patatas. Pero estamos seguros que no será el último.