Un bar de A Coruña es uno de los quince que competirán dentro de unos días en Palencia por alzarse con el título de la mejor tapa de patatas bravas del mundo. Como este plato solo se prepara en España, todos los restaurantes proceden de la geografía nacional.

El Central Park de la plaza de Vigo llevará su tapa de bravas al campeonato, acompañado también de otro establecimiento de Galicia, el restaurante Erva del Hotel Oca de Allariz. El chef de este hotel, Gerson Iglesias, junto con el cocinero Diego Hernán del ya mítico bar de la céntrica plaza coruñesa, tendrán que competir con otros trece establecimientos de España para llevarse este honor a Galicia.

Tradición con técnicas modernas

Según cuenta a Quincemil Fernando, responsable del Central Park, su receta de patatas bravas combina tradición con técnicas modernas. Usa patatas de Horta Daterra, procedentes de la reserva de la biosfera das Mariñas Coruñesas e Terras do Mandeo. Primero escogen las patatas, luego las lavan, las envasan al vacío y las cocinan al vapor, a 90 grados durante 60 minutos.

El objetivo de esta técnica es conservar la piel el mayor tiempo posible y que aporte todo el sabor a la patata, ya que la piel es la parte con más sabor de este tubérculo. tras este proceso se pelan y se pasan por un pasa puré, se incorpora sal y mantequilla, se mezclan bien y se añade fécula de maíz, combinándolo todo hasta conseguir una masa homogénea.

A continuación, se parten en dados y se frien en dos pasos: primero a 140 grados durante 7 minutos, y luego a 190 durante 4 minutos. La salsa brava es más tradicional: se usa un sofrito con cebolla, ajo, pimentón, caldo de carne y una pizca de chile chipotle.

La competición tendrá lugar el 23 de septiembre en Palencia y los rivales no serán nada fáciles: las patatas bravas son un plato muy popular en toda España, y particularmente las Castillas y Madrid son expertos en la materia.