30 años no se cumplen todos los días, y menos aún si eres un local de hostelería. Esa es la situación del Chaflán, uno de los bares más conocidos de toda A Coruña. De los más conocidos, porque la palabra 'mítico' no le gusta a su dueño, Rafa: dice que le "hace muy viejo eso de mítico".
A sus 54 años, lleva más de media vida detrás de la barra de su Chaflán. Empezó con 24 junto a su madre y, pocos años después, se unió Anuska, su pareja con la que ahora comparte dos hijos y que cuenta que "yo un día entré a tomar un té y me casé con el camarero". Ella misma le dice a Rafa que "tú no te vas a jubilar en la vida, porque tú sin esto te mueres. Le va estas con la gente y la gente le quiere". Ese es el resumen del Chaflán y de su esencia, un local "muy familiar" y "de encuentro" que muchos definen como "su segunda casa".
La fiesta de aniversario
Como buen cumpleaños, este también tiene su fiesta particular. Este sábado, el Palexco acogerá a alrededor de 500 'chaflaneros' del Chaflán para celebrar junto al personal del bar su 30 aniversario. Primero quedarán en el local a las 12:00 horas para hacer la tradicional foto de celebración. Desde allí, irán todos en bus ambientados de los 80 hasta el Palexco.
Una vez en el puerto, comenzará la fiesta temática, donde habrá premios a los mejores disfraces para ayudar a que la gente "se lo curre un poquito más". La sesión vermú, con barra libre incluida en el precio total de 65 euros, correrá a cargo de Piel del oso hasta las 15:30 horas. Tras ellos, se celebrará la comida que incluye tostas, milhojas de bonito, empanada, croquetas, callos, chicharrones, jarrete de ternera, así como postre y bebida.
Por la tarde volverá a sonar la música con el grupo Alma Libre y el Dj Coque Alonso, incluyendo una recena de arroz con marisco. En este caso, las consumiciones no estarán incluidas en el precio global (salvo la primera), saliendo a 3 euros las cervezas y a 6 las copas. La fiesta llegará a su fin (al menos en Palexco) a las 00:00 horas.
El sitio de siempre, con la gente de siempre
"Hay gente que hace 30 años que abrimos y hace 30 años que vienen", explica Anuska. Se podría decir que es un bar de barrio, pero que acoge a gente no solo de toda A Coruña, sino de muchos rincones. "Se van para su casa, pasan los años, vuelven otra vez y te dicen 'es que cuando yo estudiaba venía aquí', ves que la gente vuelve a A Coruña y vuelve a verte y a saludarte. Hace mogollón de ilusión porque se ve que les quedó muy buen recuerdo de aquí".
Además, han dado servicio a varias generaciones de una misma familia: "Rafa empezó con 24 con sus amigos del instituto", explica Anuska, "pero luego vienen los hijos de los amigos del instituto, los amigos de los amigos del instituto... entonces la familia Chaflán va creciendo".
Tras 30 años, Rafa parece que aún no piensa en delegar labores: "a los 30 decía que a los 40 no se veía detrás de la barra, luego dijo que a los 50 y ahora dice que a los 60. Aquí seguimos". Anuska, por su parte, trabaja como enfermera de urgencias en el CHUAC desde la pandemia Covid, aunque también apoya en el bar cuando hace falta. Lo que tiene claro es que "no me gustaría que mis hijos trabajaron como trabaja su padre, porque es un negocio que vives aquí, son muchas horas".