Es todo un referente en el área de A Coruña. O Quinito lleva desde 1982 siendo todo un reclamo. Su ubicación tan especial con vistas a la playa de Barrañán y su amplia terraza han hecho de este restaurante uno de los más cotizados. "Llevamos meses con las mesas completas los fines de semana", señala Roberto Aldao, que regenta junto a su hermana Inma Aldao y Alberto Sánchez este local.
En septiembre cumplen tres años al frente del negocio tras ser traspasado por la anterior propietaria, que a su vez era la hermana del dueño original. Se trata de un establecimiento lleno de historias, empezando por su nombre. "Había un vino dulce llamado Kina San Clemente que era muy popular en los sesenta y setenta por unos anuncios que protagonizaba un niño que se llamaba Quinito. Al primer dueño le gustó la idea porque era un vino que abría el apetito y él quería abrir su propio restaurante", cuenta Roberto.
Nadie tendrá dudas de que O Quinito es un local representativo en la zona. Sus actuales propietarios lo sabían y cuando se enteraron de que se traspasaba quisieron cogerlo. "Había otras personas interesadas", señala Roberto. Desde el primer momento, quisieron darle un lavado de cara al local. "El primer año hubo una inversión importante, que se vio frenada por la pandemia", continúa explicando el propietario.
El chiringuito de los surfistas
O Quinito se convirtió con el tiempo en punto de reunión de surfistas de toda la comarca. "Es una playa donde siempre se ha practicado mucho este deporte y muchos clientes son surfistas de aquí y de otros lugares. Llegó a haber tres escuelas aquí", señala Roberto. Pero no son el único grupo de clientes que tiene O Quinito.
"Durante la semana viene mucho trabajador de Inditex y de Sabón. Tiene su propio comedor, pero les gusta el local y la terraza. De hecho, hemos ido invitados a su sede a prepararles nuestra popular carne asada", cuenta Roberto. Su terraza es el principal atractivo del local. Se remodeló hace unos 15 años y a día de hoy acumula prácticamente todas las mesas del establecimiento. "A partir del miércoles ya tenemos todas las mesas completas para el fin de semana. Nuestro sistema de reservas ya lo teníamos antes de la pandemia, pero ahora es imprescindible para controlar aforos y medidas de seguridad. Llevamos muy a rajatabla este asunto", señala Roberto.
Las vistas al mar están garantizadas tanto en verano como en invierto gracias a los toldos que cubren la terraza. "Cambiamos y renovamos prácticamente toda la estructura. Hubo que juntar mesas para ajustarnos al aforo actual. Pasamos de tener capacidad para 130 personas a 75-80″, comenta.
Pese a haber tenido que cerrar durante tres meses el pasado año por la pandemia, el verano fue provechoso. "Hubo muchísima rotación de mesas y aumentaron mucho las cenas. Al no haber ocio nocturno, la gente se animaba más a ir por ahí de picoteo. Nosotros lo notamos", comenta Roberto.
Una nueva carta
O Quinito no tiene menú del día. "No solo un lugar de paso, sino que nuestros clientes vienen porque conocen el sitio", señala Roberto. Cuenta con una carta de tapas y raciones que está a punto de renovarse por completo. Mención especial merece su carne asada, el plato estrella y el más solicitado, sobre todo entre los grupos más grandes.
"Somos un local de cocina casera, pero estamos renovándonos. Vamos a introducir una cocina más elaborada, con nuevas propuestas de carnes y pescados. Tenemos tapas, pero también carta amplia y raciones para grupos", comenta Roberto. Otro de los puntos fuertes de O Quinito es su precio. "Ahora mismo tenemos un arroz con carabineros para dos personas a 31 euros. No nos quedamos en las típicas raciones, sino que tenemos pulpo a la plancha o mariscos. Muchos se sorprenden con el precio", apunta Roberto.
En O Quinito conviven quienes van con la familia o amigos a darse un homenaje con grupos más pequeños que están de paso o van a Barrañán. "Hay de todo, por eso tenemos tantas opciones en la carta. Además, vamos a introducir ahora dos tipos de hamburguesa, una premium y otra más sencilla. Sobre todo para esa gente que sale de la playa con hambre", señala Roberto.
Una terraza de revista
O Quinito debe gran parte de su fama a su terraza. Este verano estará cargada de novedades, pues volverá a instalarse una barra de coctelería. "Es una parte del negocio que quisimos reforzar. Contratamos a una trabajadora con muy buena reputación y experiencia en distintos locales de A Coruña", apunta Roberto.
Habrá que esperar a que aflojen las restricciones para concretar otros eventos que los responsables del local tienen en mente. "Nos gustaría hacer conciertos, fiestas como San Juan y otras cosas, pero de momento vamos a esperar a que se normalice la situación", señala.
En O Quinito se preparan para la época de mayor actividad del año. "El verano es nuestro momento. Sobre todo durante julio y septiembre. Es un no parar. La terraza y el buen tiempo son la clave. Este marzo, que hizo bastante sol, también se notó", afirma.
En el interior del local, además, han creado una zona chill out como alternativa a la terraza. Poco a poco, O Quinito recupera la normalidad de antes de la pandemia y se renueva paulatinamente para lo que viene. ¿Cuál es la clave de su éxito? "Una buena organización, eso lo es todo".