Hace poco más de un año, el Potro Brunch se ha instalado en la calle Anxo Senra número 25 de O Burgo (Culleredo, A Coruña) conquistando a decenas de clientes con buena repostería casera a base de tartas, gofres o pancakes; opciones saladas como tostas de huevos benedictinos, sándwich bikini o brioche de pastrami y también zumos elaborados con frutas y verduras, milkshakes con helado y leche o açaí casero con fruta, granola y yogur.
El objetivo del establecimiento, según su dueño Alejandro, es ir orientándose cada vez más a la cocina vegana y sin gluten, porque reconoce que es una demanda cada vez mayor del público. El ambiente del amplio local (con capacidad aproximada de 150 personas) no pasa desapercibido ya que tiene una influencia muy marcada por la equitación y los caballos, dado que la familia del dueño (su padre es el responsable de El Potro, también en O Burgo) siempre ha tenido caballos y él montaba cuando era niño.
Un gran potro negro recibe a la clientela en la puerta y es la mejor carta de presentación. La experiencia hostelera de este canario de Las Palmas es amplia (ha trabajado en locales de referencia de la ciudad como el Pazo de Vilaboa o el Hotel Finisterre), además de tener su propio negocio repostero durante un tiempo en Barcelona.
Ahora ha comenzado esta aventura en Galicia teniendo muy presente la filosofía de su familia, ya que una gran mayoría trabaja en el sector de la hostelería, ya sea en cocina o en sala. "Desde pequeño ya estaba metido detrás de la barra", cuenta, a la vez que apunta que "todo queda en casa" porque su mujer es la repostera de El Potro Brunch.
Recomienda reservar mesa para brunch los fines de semana y el local abre de 08:30 a 23:00 horas de miércoles a domingo también con opciones más elaboradas para poder comer y cenar como el risotto con secreto, tequeños, croquetas o unos deliciosos rollitos vietnamitas con salsa agridulce.
Sin menú cerrado, bagels o tostada francesa
El local cuenta con bebidas poco habituales aún en la mayoría de bares de Galicia como la Kombucha o la Fritz-kola, además de otras opciones más convencionales como té matcha. Además, los pancakes los elaboran con leche de avena, la tostada de aguacate la aderezan con tomate, pimienta, lima o sal (y se da la opción de complementar con huevos poché) y los huevos benedictinos se sirven en pan de bagel de la panadería Mercedes de Carral (A Coruña).
A esta especialidad le han introducido a su vez una innovación, sustituyendo la tradicional salsa holandesa por la denominada bearnesa, es decir, que posee la misma base que la holandesa pero se elabora con ingredientes como vinagre o estragón. El açaí lo preparan ellos mismos utilizando la fruta, que congelan y trituran para a continuación darle una textura de helado que se combina con crema de cacahuete, fruta o granola.
Los pancakes se sirven con sirope de arce y fruta y los gofres proponen una modalidad en carta: con nutella, oreo, sirope de chocolate y nata. Por su parte, el sándwich principal es el bikini (a base de jamón y queso) aunque también hay otras opciones como el de aguacate con queso brie y espinacas como opción vegetariana.
La tostada francesa es otra de las especialidades, una especialidad a base de plátano y helado con pan de molde brioche sumergido en leche de avena con huevo, canela y esencia de vainilla. "Como si fuera una torrija tradicional, pero a la plancha", aclara el responsable del establecimiento.
El bagel más popular es el de salmón, queso crema y pepino y también se puede pedir focaccia, que viene especiada con aceituna negra y aceite de oliva, a lo que se añade aguacate, tomate, pechuga de pollo ahumada, queso y mostaza con miel. Uno de los beneficios del Potro Brunch es que no obliga a escoger entre opciones cerradas de brunch como muchos otros locales de este tipo, sino que ponen la carta entera a disposición del público para que combinen todas las opciones como más les guste.
A primera hora, cuando más gente acude a desayunar, ofrecen packs de desayuno con zumos, tostada y café, aunque también hay plato inglés con bacon, tostada de aguacate y mermelada con mantequilla. Las hamburguesas son opciones más demandadas al mediodía, junto a los mini brioche de cochinita pibil o una ensaladilla coronada con huevo frito.
Zumos naturales, café ecológico y futuro obrador
Los zumos están elaborados con frutas y verduras y algunos tipos son: de zanahoria, naranja y limón, el green con espinacas, pepino y manzana u otro de manzana piña y kiwi. Los milkshakes tienen base de helado y leche y algunos llevan crema de lotus, algo que se puede acompañar con un café ecológico de Candelas. La elección de este tipo de café no ha sido al azar, sino que el dueño pretende orientarse cada vez más al café de especialidad y este es el primer paso.
El precio del brunch es de aproximadamente 15 o 20 euros por persona y en cuanto a la clientela desde el Potro Brunch cuentan que es variada: desde personas de 50 y 60 que se toman sus huevos benedictinos durante la mañana a los grupos de jóvenes que vana desayunar o de brunch.
Las tartas caseras son otra de las estrellas de la oferta del local, siendo la gran triunfadora la cheesecake tradicional, aunque también destacan otras variantes con esta misma base a las que se añade nutella, dulce de leche, frutos rojos y a veces como base bizcocho de zanahoria y queso.
La carrot cake y la red velvet también salen, además de algunas de Ferrero Rocher o chocolate con nutella. De cara a los próximos meses, para seguir creciendo desde el local plantean apostar por inaugurar un obrador repostero cerca para así abastecer de sus dulces especialidades caseras al Potro Brunch y al Potro, además de vender estos postres a particulares.