Una de las tiendas de reventa de zapatillas más grandes del norte de España (otra de dimensiones similares se encuentra en Barcelona) ya está en marcha desde esta semana en A Coruña. Se llama Kickstricker (Alfredo Vicenti, 11) y está dirigida por el joven emprendedor de 30 años, Anxo Ruibal, junto a otras tres personas, con el objetivo de ofrecer al gran público "un espacio seguro y libre de falsificaciones" donde poder encontrar modelos completamente agotados en otras tiendas o diseños descatalogados de multitud de marcas.
La tienda tiene una estética rompedora industrial y cuenta con atractivos como una cancha de baloncesto en el espacio al aire libre de la tienda, donde este jueves durante el evento de inauguración un grafitero hizo sus diseños para que se luzcan permanentemente en las paredes. Este evento contó también con música en directo y consumiciones.
Por su parte, las zapatillas que están en exposición están plastificadas (algo común en las tiendas americanas) porque "quedan bien estéticamente y para protegerlas", según el dueño, que aclara que si se quieren probar hay esos mismos modelos en otras tallas para que la gente se pueda llevar la zapatilla que quiera y que esté intacta. Nike, Adidas, Off-White, Salomon, New Balance, Reebok, Crocs y Merrell son las marcas actualmente a la venta, además de algunas prendas de estilo urbano.
El espacio es concebido por este joven emprendedor como "una galería de arte" de 160 metros cuadrados y la idea de este exclusivo espacio nació de su faceta de revender sneakers a nivel online hace ahora tres años. Un ámbito en el que es autodidacta y en el que subraya que es clave estar enterado siempre de los lanzamientos y últimas tendencias. Tiene su propia colección de zapatillas, en torno a unos 120 pares, a las que define como sus "pequeñas joyas".
En el mundo de la reventa se inició guiado por su filosofía de que "no todo lo que hay en España triunfa en España y que no todo lo que hay fuera tiene éxito", por lo que asegura que es importante comprobar los precios que se manejan para las zapatillas en cada lugar y la demanda que existe, además de detectar las necesidades de la gente y así "buscar los espacios de donde se pueda obtener beneficio".
Venta de zapatillas compradas a particulares: Sin usar, con etiqueta y control de calidad
Sobre el mundo de las zapatillas, Ruibal destaca populares marcas como Off-White, con modelos que pueden costar hasta 600 euros y que a su vez hacen colaboraciones con Nike y los precios se reducen a unos 180 aproximadamente, depende del modelo. Sin embargo, hace hincapié en que zapatos de ediciones limitadas que están descatalogadas desde hace años "podrían llegar incluso a valer 20.000 o 30.000 euros".
"Nos diferencia tener productos que en a negocios se les agotan. No vamos a trabajar con marcas directamente sino que compraremos zapatillas a particulares, siempre legitimadas y comprobadas que no sean una falsificación, nuevas con la etiqueta", advierte. Sobre la acogida del proyecto en A Coruña, confía en que funcionará porque "es una ciudad que está influida por Inditex y a la vanguardia de todo", opina.