Ay la cena de empresa. Ese evento amado y odiado a partes iguales en el que compartes mesa –y, quizá, copas– con compañeros que no son amigos, con amigos que sí son compañeros y, claro, con jefes.
El único momento del año en el que cabe la posibilidad de ver al presidente de la compañía con una diadema de reno y en el que puede suceder de todo exige, claro, un estilismo y un maquillaje a la altura porque, admitámoslo, para la mayoría las cenas de empresa son una suerte de 'obligación' que no figura en ningún contrato, pero en las que hay que estar.
Y, ojo, porque quizá la cena de empresa de 2024 se convierta en la fiesta de tu vida. Y hay que estar preparada. En materia de estilismo, algunos tips que pueden parecer obvios pero que no siempre se tienen en cuenta. Desecha todo aquello que no te haga sentir cómoda, no es momento para experimentar.
Aunque el vestido negro pueda parecer socorrido, solo lo aconsejamos en el caso de que se trate de una cena (muy) formal. Camisa blanca y falda negra, una combinación clásica pero que es un sí rotundo (es elegante y no, no tiene porqué resultar aburrida). En su defecto, el traje masculino también es una apuesta en la que no existe margen de error.
Pero, ¿qué sucede con el maquillaje? ¿Cómo consigo un look favorecedor y, al mismo tiempo, natural y de vocación nocturna? A continuación, recopilamos algunos consejos sobre cómo maquillarte (y acertar) en tu cena de empresa de estas Navidades.
No, no es la fiesta de fin de año de tu mejor amiga
Es probable que te apetezca algo diferente, al fin y al cabo estamos en Navidad, rodeados de brillos, glitter y lentejuelas. Pero reserva esos 'excesos' para otro momento. Si vas a una fiesta, la noche de fin de año es perfecta para arriesgar con todo esos tonos y texturas con los que no te atreves el resto del año.
Pero la cena de empresa, no. Al igual que sucede con la ropa, lo más recomendable es ir sobre seguro, recurriendo a productos que sabes que te funcionan y técnicas que ya dominas –no es el momento de probar con el eyeliner si no eres una experta, por ejemplo–.
En este caso, menos siempre es más
Aunque son fechas en las que parece que (casi) todo está permitido, en la cena de empresa, no. Tu look de maquillaje debe de cumplir dos premisas básicas: camuflar los signos de cansancio y aguantar impoluto muchas horas (nunca se sabe lo que la noche puede dar de sí). Para ello, la preparación de la piel es esencial.
Tómate tu tiempo, aplícate una mascarilla hidratante y, si te apetece, una ampolla efecto flash con la que conseguirás buena cara de manera instantánea. Con esto ya tienes una gran parte del camino recorrido, porque si te preparas bien la piel, no necesitarás grandes cantidades de base de maquillaje y podrás recurrir a fórmulas ligeras que no apelmacen.
La piel será la clave de tu maquillaje
Esto no significa que no puedas recurrir a un labial rojo o una sombra de ojos discretas, pero si te esfuerzas en este paso, el resto no será tan necesario. Después de prepararte la piel, escoge tu base de maquillaje de confianza para unificar el tono de la piel sin dejar efecto máscara.
Como hemos mencionado en el punto anterior, lo mejor son fórmulas ligeras y luminosas con las que conseguir un 'efecto glow' instantáneo. A continuación, aplica el corrector en la zona de la ojera y en las imperfecciones que quieras disimular. Es importante que no apliques mucha cantidad y que su fórmula sea muy hidratante, así evitarás que se cuartee con el paso de las horas. Por último, aplica un poco de colorete para animar las mejillas.
Elige ojos o labios y dales todo el protagonismo
A pesar de que en el mundo del maquillaje no existen reglas (afortunadamente). En este caso sí que conviene recordar que el resultado será mucho mejor si solo le concedes protagonismo a una parte de tu rostro. ¿Qué elijo, ojos o labios? La respuesta es sencilla, haz lo que suelas hacer habitualmente.
Es decir, si no estás acostumbrada al labio rojo, no te plantes esa noche con un labial mate de larguísima duración, y si lo tuyo no son los smokey eyes, no se te ocurra ponerte a difuminar sombras como si no hubiese un mañana. Tanto para los ojos como para los labios, apuesta por la gama de los marrones, tostados, rosas y nudes, son fáciles de aplicar y te permitirán conseguir un look favorecedor y minimalista.
¡Disfruta!
Tanto si eres de las que espera este momento del año con ilusión como si, por el contrario, no te puede dar más pereza, ¡disfruta! –y procura no perder los papeles–.