"¡Esto parece Juan Luis Guerra! La indignación se escupía así en la playa de Riazor. Aludiendo, como en una vergonzosa comparación, al símbolo máximo de la bachata dominicana. Para repudiar a Xoel López que presentaba Atlántico". Así comienza el primer capítulo de ‘Atlántico. El disco de la libertad de Xoel López’, en el que el periodista musical Javier Becerra hace un exhaustivo recorrido por la gestación y recepción del álbum que cambiaría la trayectoria personal y artística del músico coruñés.

Esta publicación se realiza con motivo del décimo aniversario de la publicación del disco en cuestión, en abril de 2012. El libro está editado por Hércules de Ediciones y cuenta con la colaboración del Concello de A Coruña. 

Tras dejar a Deluxe en su momento más exitoso, Xoel López tomó un avión con destino a Buenos Aires. Tres años después vería la luz ‘Atlántico’. “Muchos no entendieron la necesidad de cambiar el rumbo, pero en América encontró lo que necesitaba, se empapó del folclore de México, Colombia y Venezuela y se mezcló con músicos de San Francisco, República Dominicana y Uruguay. Y en Nueva York confirmó que lo que él buscaba tenía más que ver con una rumba bastarda que con el enésimo espejismo de modernidad propuesto desde el mundo anglosajón", explica Becerra.

La publicación llegará a las librerías el próximo 3 de mayo y a lo largo de 18 capítulos, recoge el periplo de Xoel López en la ciudad argentina, los procesos compositivos y las influencias que marcaron temas como ‘Hombre de ninguna parte’, ‘Tierra’ o ‘Por el viejo barrio’. "Sin dejar de mirar a Serrat y The Beatles, reconciliándose con su infancia en el Caribe y cambiando el modo de estar en el mundo, nació Atlántico (2012), un disco maravilloso pero incomprendido en su momento, con el que el artista tuvo que ver como parte de sus propios fans lo rechazaban y la crítica lo despachaba con tibieza", detalla Becerra en el libro.

Al mismo tiempo, el autor define el disco como "un ejercicio de valentía que contiene algunas de las mejores canciones de pop en castellano de los últimos tiempos". "Un pulso entre la libertad del artista y las expectativas de su público, en el que venció definitivamente la belleza", subraya el autor, que en el último capítulo refleja como tres años después el álbum cuajó definitivamente entre el público.

Vuelta a la escena española y apoyo de compañeros de profesión

"A veces, canciones que piensas que pueden funcionar no empiezan a hacerlo hasta los dos años. Me ha pasado muchas veces en mi carrera. Pero las de Atlántico tardaron mucho más en calar. Pero, eso sí, una vez que lo hicieron, calaron para siempre", subraya el propio Xoel López. El libro recoge desde episodios como ‘La caravana americana’, en la que recorrió América de Norte a Sur, como las dificultades que surgieron a la hora de presentar el álbum de regreso en la España del boom de los festivales, en una escena en la que Love of Lesbian, Vetusta Morla o Lori Meyers copaban carteles y escenarios.

"Me costó muchísimo reubicarme en la escena española. Incluso me planteé la posibilidad de entrar en la escena de músicas del mundo, pero no sabíamos bien qué hacer y, al final, seguimos yendo a los festivales de indie rock y nos trataban como una cosa menor, la verdad", reconoce Xoel. ‘Atlántico’ cuenta con prólogo del guitarrista de Vetusta Morla, Guille Galván, y epílogo de Álex Díez, líder de Los Flechazos y Cooper.

Asimismo, el libro dedica también un capítulo a recoger las impresiones sobre ‘Atlántico’ de compañeros de profesión como Juan Aguirre (Amaral), Nacho Vegas, Igor Pascual, Zahara, Leiva, Iván Ferreiro, Santi Balmes (Love of Lesbian), Jairo Zabala (Depedro), Bunbury, Guadi Galego o Leiva. Este último asegura que "Atlántico es un disco en estado de gracia. Más allá del carácter sónico y la ruptura estilística, está lleno de cancionazas y textos inspirados donde todo suena ligero y fácil en el mejor sentido", concluye el exintegrante del dúo Pereza.