El gallego Nicolás Fernández Taibo —con nombre artístico Bynick (@bynick119)— publicará en Youtube este viernes, desde las 00.00 horas, ‘Onde se acaba o mar‘, la canción que acaba de dedicar al Racing de Ferrol.

Este joven de Sada de 22 años, a punto de graduarse en Ingeniería de Diseño Industrial y Desarrollo del Producto en el Campus de Ferrol, quería poner su granito de arena en la carrera de ensalzar y apoyar al equipo que adora y sigue desde niño, cuando entró por primera vez en el estadio de A Malata de la mano de su padre.

Tras escribir la letra de varias canciones y ofrecer algunos conciertos, este futuro ingeniero echó mano de su afición a la música, a la que se aproxima de forma autodidacta, para escribir la letra de una canción que habla de los Diablos Verdes y del deseo de una ciudad entera por ver a su equipo en Primera División, de cómo ruge el estadio y de que perder ya no es lo normal, de que en esta ciudad hay corazón y de cómo desde las grúas del astillero se puede llegar al cielo.

"Echaba de menos una canción que hablara del equipo y de Ferrol desde un punto de vista positivo. Me parece que la canción de Los Limones tiene un toque melancólico y quise hacer algo diferente", explica. Así surgió esta pieza, que espera se pueda escuchar también en Spotify a partir de la próxima semana.

Candela (@candycanxx) pone la voz y el productor Alex (@alex_babi0) da el toque final a una canción trap al estilo gallego, "un poco Tanxugueiras", explica Nicolás. "Quería inyectar más ilusión al equipo y a la afición, que se vengan más arriba, y también hablar bien de Ferrol".

Una ciudad con más ambiente "gracias al Racing de Ferrol"

A punto de lanzarse al mundo laboral y abandonar el Campus, Nicolás ha visto en sus años de universitario una evolución en la ciudad. "Ha habido un cambio muy grande en Ferrol gracias al Racing, sobre todo en el ámbito universitario".

Ahora, recuerda, el estadio de A Malata "se llena en cada partido y se ven muchísimos aficionados en la calle animando al equipo. Eso es una maravilla". Por contra, comenta este universitario, "la ciudad se ve un poco agrietada, tanto que hace poco se vino abajo un edificio muy cerca del Campus", lamenta.