Javier Saavedra, director de Los Satélites, con su trombón.

Javier Saavedra, director de Los Satélites, con su trombón.

Música

Javier, de Los Satélites: "El público de Galicia nos sigue a todas partes y nos pide no cambiar"

El director de la popular orquesta coruñesa lleva la batuta desde hace 28 años. Su agenda para este verano apenas tiene fechas libres y para 2025 hay ya más de cien contrataciones. Javier Saavedra defiende que el sello de Los Satélites es "el cuidado de la música", interpretada para los amantes del baile, "da igual la edad que tengan", y recuerda la figura de Sito Sedes, fallecido ayer

25 julio, 2024 05:00

Ayer Arteixo, hoy O Burgo, en Culleredo. Este es un mes de no parar para Los Satélites, la veterana orquesta fundada en A Coruña en 1938. Allí donde hay fiesta, suena su música. Y en agosto, más de lo mismo. Incluso ya tienen decenas de fechas contratadas para el próximo año y el siguiente. Pero esta rutina profesional no agota a sus miembros.

Al frente, con el trombón en las manos, Javier Saavedra (Rianxo, 1967), en la orquesta desde 1986 y director de la formación desde una década después. Durante el año llegan a tocar hasta Argentina, Alemania e Inglaterra, pero en verano recorren Galicia de cabo a rabo y saltan alguna noche a Asturias y Castilla y León, adaptándose a los tiempos y a los públicos: "No queda otra".

Pero no solo hablamos del trabajo actual de la orquesta con Javier Saavedra, al que le cuesta asimilar el golpe recibido esta semana: Sito Sedes, quien fuera uno de los emblemáticos cantantes de la formación, falleció ayer de un infarto. El día anterior habían quedado para que hoy Sedes interpretase en estudio las voces para un nuevo tema del grupo. El luto acompañó a Los Satélites en su actuación en Arteixo, a la que salieron más tristes que nunca.

Se ha ido Sito Sedes. ¿Qué pierde la orquesta y las orquestas?

Buf, un emblema. Era alguien que si se hacía amigo tuyo lo tenías para toda la vida. Cantaba con toda el alma y el público sentía esa alma. Ya nadie canta como él, lo daba todo.

¿Trabajó mucho a su lado?

Cuando yo entré en la orquesta estuvimos juntos dos años, pero en los años siguientes él siempre colaboró con nosotros, nos ayudó, grabamos juntos, montamos actuaciones tras la pandemia... Se prestaba a muchas cosas y a veces se unía a cantar. Esta semana ibas a grabar voces para un nuevo tema.

(Sito Sedes) cantaba con toda el alma y el público sentía esa alma. Ya nadie canta como él, lo daba todo

Javier Saavedra

La orquesta engancha. Y vaya ritmo que llevan este mes. ¿Tienen algún día de descanso?

Tres.

¿Y en agosto?

Otros tres. Los cogemos nosotros de descanso porque si no, no los tendríamos hasta finales de septiembre.

¿Cuánto dura la temporada alta de la orquesta?

Desde mediados de junio, con el San Antonio, hasta el 12 de octubre. Es un ritmo casi diario. Te preguntas: ¿pero a mediados de semana también hay fiestas?

En Galicia sobran fiestas, y verbenas.

Antes había más la tradición de celebrar la fiesta el día del calendario que tocase, fuera lunes o sábado, pero ahora se celebran más hacia el fin de semana. Aunque hay pueblos que, afortunadamente, mantienen la tradición, lo que nos da más trabajo.

El año ya lo tienen cerrado, ¿no?

A lo largo del año se va contratando. De hecho, a estas alturas tenemos cerradas para 2025 más de 130 actuaciones.

No me diga que para 2026 también.

Pues debe haber unas 80. Y para 2027 unas 30 o 40.

¿Qué hay que tener para ser músico de Los Satélites?

Depende del puesto. Si necesitas determinadas características para un puesto de trompeta, que hay tres, tienes que hacer pruebas específicas. Si necesitas un cantante, ves lo que tienes y lo que te hace falta, por ejemplo para temas más actuales. Se suelen hacer pruebas.

Y ustedes que son muchos, ¿se entienden bien?

Ahora somos 15 músicos y cinco técnicos. Es un arduo trabajo de mentalización entenderse [risas]. Por la orquesta entran y salen músicos, pero no por problemas, sino por otras inquietudes laborales, otros objetivos. Buscamos gente que sea de calidad, con buena proyección profesional. Han pasado por Los Satélites varios directores de conservatorios de música. Si tienes gente muy buena, es normal que busquen otras salidas.

¿Qué distingue a Los Satélites de otras orquestas gallegas?

Nuestro sello es que cuidamos la música, y todo lo que hacemos es nuestro: música en riguroso directo y hacia un tipo de público que le guste bailar, da igual la edad que tenga. Hacemos música de baile de todos los estilos y todas las épocas.

"Entran y salen músicos en la orquesta. Buscamos músicos de calidad con buena proyección profesional. Por Los Satélites han pasado directores de conservatorios de música"

Javier Saavedra

¿Se adaptan a cualquier demanda bailable?

Si nos llaman para una sala de fiestas y solo hay juventud, pues tocamos para ellos. Nos contrataron para una convención de dentistas y no querían nada cantado, solo instrumental y suavecito. Normalmente, tocamos tres horas pero tenemos repertorio para cinco, y si nos avisan con tiempo interpretamos los temas que nos pidan.

¿Cómo se ha adaptado la orquesta al paso del tiempo, a los gustos y a las modas?

Te tienes que adaptar sí o sí. Esa es la clave de nuestro éxito, de que sigamos ahí. De cómo era la orquesta a cómo es ahora hemos evolucionado muchísimo, sobre todo en infraestructura: escenario móvil, iluminación, pantallas… Los gustos han cambiado y si quieres tener repertorio para todo tipo de público es primordial que te adaptes a las tendencias del momento, pero siempre dándole el toque personal que tiene la orquesta.

También apuestan por temas propios, ¿no?

Es otra apuesta nuestra. El más reciente es Corazón galego. Pero tenemos muchos, y unos 14 discos editados.

¿Ustedes tocan de todo, incluso reguetón?

Dentro de los estilos de hoy, hay unos que se adaptan a cómo es la orquesta y otros que no. Si tuviéramos que tocarlo lo haríamos, pero reguetón no hacemos. Es que por nuestra formación no nos encaja. Divertimos a la gente con otro repertorio.

¿Añoran otros tiempos?

Sí. Sobre todo la calidad musical de los temas que tenemos que preparar. Con la radiofórmula, la música de hoy es casi de usar y tirar. Cada 15 días salen temas nuevos, como churros, calcados unos a otros, cada vez con menos instrumentación y más ordenador. Hoy los temas del verano duran dos semanas. Y la calidad vocal, quitando dos o tres artistas, es cada vez menor. Lo que se vende hoy en día va en contra de encontrar un repertorio para una orquesta con nuestra formación.

"Hoy salen temas como churros calcados unos a otros, cada vez con menos instrumentación y más ordenador. Y la calidad vocal, quitando dos o tres artistas, es cada vez menor"

Javier Saavedra

¿Cómo responde el público de hoy que va a escuchar a las orquestas?

Hay dos tipos de público: el que va a la verbena y le da igual lo que suene y el público más fiel. Hay gente fiel en Galicia que planifica sus vacaciones dependiendo de donde actuemos. Me sorprende los esfuerzos que hacen en venir a vernos y el dinero que gastan en desplazarse.

¿Qué les dice ese público?

El que nos sigue a todas partes nos pide no cambiar, que sigamos igual.

¿Qué tipo de músico es Javier Saavedra? ¿Le gusta experimentar, estar atento a las novedades, escuchar otra música…?

Todo eso soy. Es que tiene que ser así. Tienes que estar escuchando todo lo que sale porque montamos lo que sale, creamos temas nuevos, tienes que ver lo que vale y lo que no, adaptarte… Hay personas que me envían canciones, sugerencias, y lo escucho todo porque nunca sabes dónde puedes encontrar algo que merezca la pena. Una vez un camionero me mandó grabado un estribillo de algo que dijo que había soñado, en casete. Lo escuché y me sirvió para Qué bonito es el matrimonio, un pasodoble.

¿Hay algún artista que nunca han interpretado y les gustaría hacerlo?

Por ejemplo, nunca tocamos nada de Alejandro Sanz. Nunca coincidió para que encajase en un repertorio nuestro, y eso que tiene temas buenos. Y hay otros artistas que nos gustaría tocar pero no encajan con lo que ofrecemos para una verbena, como Chicago o la Electric Light Orchestra. Como hoy la música es de usar y tirar, mucha gente quiere escuchar lo que suena en este momento.