El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, anunció el pasado lunes que las farmacias gallegas podrán suministrar los sistemas personalizados de dosificación de medicamentos a los pacientes ya este trimestre. La Ley de ordenación farmacéutica de Galicia, aprobada en 2019, permite a las oficinas prestar este servicio mediante una declaración responsable sin necesidad de que se tramite la autorización.
Muchas farmacias gallegas, sin embargo, ya disponen de esta opción para sus clientes. Algunas de ellas efectúan la labor de forma manual, mientras que otras han apostado por una máquina que facilita la labor a los trabajadores. Los beneficios, en todo caso, son numerosos para los pacientes, ya que mejoran su adherencia al tratamiento y evitan cometer errores u olvidos en la toma, entre otros.
El funcionamiento de la máquina de SPD
La Farmacia Pablo Durán de Oleiros (A Coruña) presta este servicio a sus clientes, tanto particulares como de residencias de ancianos. "Trabajamos desde hace unos meses con el Sistema Personalizado de Dosificación (SPD) informatizado y robotizado porque el sistema SPD convencional, como preparar un pastillero sencillo, ya lo teníamos", explica una de las trabajadoras de la farmacia, Sandra Solís.
El responsable del establecimiento decidió apostar por esta máquina para prestar un mejor servicio a sus clientes, y actualmente la Farmacia Pablo Durán es una de las pocas en Galicia que dispone de un SPD robotizado. "Es una gran inversión. Nosotros decidimos apostar por ella porque creemos que es el futuro. Es una forma de llegar a residencias y ofrecer un servicio de más calidad y más profesionalizado", explica la técnico en farmacia.
Evitar errores u olvidos en la toma
"La máquina envasa la medicación según la pauta médica, respetando las pastillas de la comida, de la cena… Lo que conseguimos con esta máquina es que cada bolsita vaya identificada con el nombre del paciente y que se vea la pastilla por dentro y su nombre indicado por fuera", explica Solís. Así, cada bolsa individual contiene en su interior las pastillas de cada toma y, en el papel identificativo, el nombre la persona que las va a ingerir y qué medicación en concreto es la que va a tomar, información fundamental no solo para el paciente sino también para sus cuidadores.
Esta herramienta de atención farmacéutica es de gran ayuda para los pacientes, que disponen así de una forma más sencilla de cumplir con la pauta marcada por el médico, evitando equivocarse u olvidarse de alguna toma. Pero no solo eso: la máquina permite preparar medicación para el tiempo que solicite cada persona, por lo que muchas podrían evitar desplazamientos innecesarios para adquirir su tratamiento llevándoselo ya preparado para varias semanas.
"Así siempre tienen la medicación en casa preparada sin necesidad de tener que estar acudiendo a una farmacia continuamente", explica Sandra Solís, que añade: "Al final, con este sistema sabes que tu padre o tu madre está tomando bien la medicación y que la tiene en casa, que no va a estar a los dos días sin ella".
El perfil de los clientes que solicitan este tipo de sistema es amplio, desde personas mayores o con una gran cantidad de medicación hasta ciudadanos con atención domiciliaria o usuarios de residencias, pasando por aquellos más jóvenes con dificultad para recordar el tratamiento debido, entre otras posibles razones, a periodos de estrés. La Farmacia Pablo Durán ofrece este servicio a sus clientes, que pueden solicitarlo en cualquier momento, aunque Solís recomienda avisar con alguna antelación para poder garantizar que está lista a tiempo.