El Quirónsalud de A Coruña utiliza una innovadora técnica endoscópica para tumores de páncreas

El Quirónsalud de A Coruña utiliza una innovadora técnica endoscópica para tumores de páncreas Quirónsalud

Salud

El Quirónsalud de A Coruña utiliza una innovadora técnica endoscópica para tumores de páncreas

Se trata de un tratamiento guiado por ecografía endoscópica que resulta menos invasivo que la cirugía convencional, ya que evita la extirpación de la parte del páncreas que contiene el tumor. Este hospital de A Coruña es el primero de la sanidad privada gallega en utilizarlo

9 junio, 2023 13:39

La sanidad privada gallega ha utilizado por primera una innovadora técnica endoscópica para el tratamiento de ciertos tumores pancreáticos. Y lo ha hecho en el Hospital Quirónsalud A Coruña. Se trata de un tratamiento guiado por ecografía endoscópica, una técnica que proporciona de forma simultánea imagen endoscópica y, desde el estómago o el duodeno, imagen ecográfica del páncreas.

A través del endoscopio se introduce una aguja con la que, con gran precisión, se punciona el tumor pancreático para destruirlo mediante la aplicación de radiofrecuencia. Aunque la radiofrecuencia se usa frecuentemente en otras disciplinas, su aplicación en la cirugía del cáncer de páncreas es innovadora ya que hasta ahora no se disponía de instrumentos específicos para este abordaje.

El doctor David Martínez Ares, especialista en Digestivo del Hospital Quirónsalud A Coruña nos explica: “la técnica se realiza a través de un ecoendoscopio, un instrumento que permite obtener una imagen ecográfica muy precisa del páncreas y de las vías biliares; el instrumento se introduce por la boca del paciente, una vez sedado. A continuación, tras la localización del tumor a tratar, por el canal de trabajo del endoscopio se introduce una aguja de forma similar a como se realiza para la toma de muestras de biopsia. Esta aguja está conectada a una fuente de energía que permite liberar en el interior del tumor pulsos de radiofrecuencia que provocan la destrucción del tejido cuando la energía liberada se transforma en calor. En definitiva, se trata de un método de ablación térmica.”

Las ventajas de utilizar esta nueva técnica

Entre las ventajas que supone esta nueva técnica con respecto a la cirugía convencional, el doctor David Martínez Ares señala que es menos invasiva, ya que únicamente se realiza ablación térmica del tejido tumoral, evitándose así la manipulación quirúrgica del abdomen y la extirpación de la parte del páncreas que contiene el tumor. Se evitan así las consecuencias de la pérdida de un órgano vital para la función digestiva y para el control de los niveles de glucosa en sangre, y también las complicaciones derivadas de la cirugía, especialmente frecuentes cuando es preciso realizar durante la cirugía la reconstrucción de
estructuras que se dañan al operar el tumor. Todo ello se traduce en una tasa de complicaciones mucho menor y en una estancia hospitalaria mucho más breve. En ausencia de complicaciones, el paciente se irá a su domicilio en un plazo entre 24 a 48 horas. Otra de las ventajas de esta técnica es que la cirugía se realiza bajo sedación en vez de anestesia general como sí es necesario en caso de la cirugía.

Los tumores para los que está indicada esta técnica (y aquellos para los que no)

Está técnica, con resultados excelentes, está indicada en el tratamiento de los tumores neuroendocrinos pancreáticos funcionantes (productores de hormonas) o en los no funcionantes (que no producen hormonas) de menos de dos centímetros de tamaño y con hallazgos en la biopsia que sugieren un comportamiento menos agresivo. En caso de tumores de mayor tamaño y agresividad hay que recurrir a la cirugía convencional, señalan desde Quirónsaludad.

Esta no es una técnica, por el momento, indicada en el tratamiento del cáncer de páncreas más habitual (el adenocarcinoma), en el que la cirugía es el único tratamiento que puede aspirar a la curación de la enfermedad. Por otra parte, hay estudios en los que se comunican resultados esperanzadores en el tratamiento de las lesiones quísticas del páncreas, que pueden ser precursoras de cáncer de páncreas.

Desafortunadamente, no es posible realizar este tratamiento en todos los casos. ¿En qué caso no es posible recurrir a esta innovadora técnica para tratar tumores de páncreas? Cuando la lesión está situada demasiado cerca del conducto pancreático no puede realizarse, dado que el dañar el conducto puede causar complicaciones graves. Además, cuando el tumor está muy cerca de un vaso sanguíneo, el tratamiento es menos efectivo porque la circulación de la sangre continuamente hace que se disipe el calor generado.

Finalmente, cuando la lesión esté demasiado cerca de la pared del estómago o del duodeno, la ablación puede provocar por daño térmico una perforación de la pared de la víscera, explica. Finalmente, serán contraindicaciones generales las que impliquen la imposibilidad de realizar una ecoendoscopia y/o una punción del páncreas o la sedación del paciente.

La preparación previa a la intervención es similar a la de una gastroscopia, precisándose un ayuno de 8 a 12 horas. Tras la intervención el paciente permanecerá en ayunas las 24 horas posteriores y, en caso de no producirse complicaciones, se iniciará la tolerancia a dieta oral y, generalmente, antes de las 48 horas después del procedimiento el paciente podrá ser dado de alta.