Román Bascuñana, director de la escuela de Alta Montaña de Castilla-La Mancha y uno de los guías más renombrados del país al otro lado de los pirineos, es uno de los tres fallecidos por el alud en los Alpes suizos. A falta de la identidad de otro hombre, fuentes policiales confirman que la segunda víctima es Leila Pérez, agente de Policía nacional destinada en Madrid, adscrita a los servicios médicos.
De Talavera de la Reina, ya son varias las instituciones, incluida la propia escuela de montañeros, las que han confirmado la presencia de Bascuñana en el accidentado grupo de cinco españoles que hacía esquí de travesía este sábado en el cantón de Valais. Asimismo, varias asociaciones de policía han lamentado la muerte de su compañera Leila.
Bascuñana era, además, uno de los propietarios y guías de la empresa Freekguides, que ofrecía excursiones tanto en España como en el extranjero. A principios de marzo, esta corporación celebraba la traducción al castellano de "Avalanchas, nociones imprescindibles", "un compendio de sabiduría y buenas prácticas".
A las 16:45 del sábado, Bascuñana guiaba la expedición que se vio sorprendida por la avalancha de nieve. Las autoridades suizas han iniciado una investigación ya que, en palabras de la Policía local a distintas agencias, el paisaje había sido rotulado en varios lugares para informarse del riesgo de este tipo de accidentes. Será clave el testimonio de los dos supervivientes, que se recabará en cuanto se encuentren en condiciones.
La trayectoria de Román Bascuñana
El grupo partió de la cabaña de Konkordia y se dirigía hacia la estación de Fiescheralp, un camino que arroja unas vistas muy cotizadas en el mercado del esquí de travesía. Los afectados portaban dispositivos de identificación en caso de avalancha. De ahí que los dos españoles fueran de peligro pudieran ser rescatados con rapidez.
Brillante geólogo desde que se licenció en la Complutense de Madrid a mediados de los noventa, Bascuñana también era instructor en alpinismo y escalada, tanto en roca como en hielo. Había participado en más de treinta expediciones, algunas de ellas en el Himalaya hindú, en Perú, la Patagonia o Nepal.
Técnico en prevención de riesgos laborales, había realizado varios cursos de medicina de montaña y rescate profesional. El pasado invierno situó su base de operaciones en Chamonix, a los pies del Mont Blanc. Una residencia que alternaba con sus viajes a España.
La comunidad esquiadora está de luto. Tanto Freekguides como varias federaciones alpinas han colocado el crespón negro en sus páginas web.