Doce días después del accidente en el parque del Retiro, el árbol que mató al niño de cuatro años seguía caído en el mismo lugar. Este periódico, con la fotografía que lo prueba, preguntó al Ayuntamiento madrileño al respecto. Obtuvo como respuesta: "Ha seguido ahí porque debía acercarse la delegada de Medio Ambiente para examinarlo con los técnicos, pero esta tarde se ha quitado". Habían pasado dos semanas.
Esta llamada se producía durante la tarde del jueves. "¿Ya no está?", repreguntaba EL ESPAÑOL. "No, no". Pero varias horas después, hacia las ocho, el árbol caído seguía en el mismo sitio, tal y como acreditan las fotografías tomadas por Chema Barroso.
Los jardines del Buen Retiro han permanecido cerrados durante días después de que un temporal derribara un pino y acabase con la vida del pequeño, que paseaba con su padre mientras la madre, la hermana y la abuela hacían recados en establecimientos próximos.
El Ejecutivo de Ahora Madrid dijo haber revisado el árbol del accidente en los días anteriores. También reconoció haber abierto el parque a pesar de que la madrugada anterior hubieran caído otros dos árboles de características similares fruto del fuerte viento.
De ahí que Carmena decidiera cerrar las puertas del Retiro la semana inmediatamente posterior para realizar una nueva inspección. De momento, no se sabe cuántos árboles han decidido talar los servicios técnicos municipales. Un dato que se revelará cuando los históricos jardines vuelvan a la normalidad.