Hasta las monjas de clausura han manifestado su estupor y rechazo a la sentencia que condena a 9 años de cárcel a cada uno de los miembros de 'La Manada'. Es el caso de las Carmelitas Descalzas de Hondarribia. La hermana Patricia Noya ha publicado en su cuenta de Facebook el siguiente texto:
"Nosotras vivimos en clausura, llevamos un hábito casi hasta los tobillos, no salimos de noche, no vamos a fiestas, no ingerimos alcohol y hemos hecho votos de castidad. Es una opción que no nos hace mejores ni peores que nadie, aunque paradójicamente nos haga más libres y felices que a muchxs. Y porque es una opción LIBRE, defenderemos con todos los medios a nuestro alcance (este es uno) el derecho de todas las mujeres a hacer LIBREMENTE lo contrario sin que sean juzgadas, violadas, amedrentadas, asesinadas o humilladas por esllo. HERMANA, YO SÍ TE CREO".
Manifiestan de este modo desde la congregación religiosa la solidaridad con la víctima de lo que el juez ha definido en la sentencia como 'abuso sexual continuado', pero que desde la Fiscalía se considera una 'agresión sexual'. Por este motivo, la sentencia será recurrida.
Las monjas también formamos parte de esto
La hermana Patricia Noya ha explicado en EITB que ese mensaje es su muestra de solidaridad con la víctima "con esa mujer en concreto y con todas las mujeres que tienen que pensárselo antes de cruzar una calle a oscuras o antes de irse solas a casa. Que tienen que hacer planes para saber cómo vuelven y con quién vuelven y que además tienen que sentirse juzgadas".
La hermana Noya dejó claro que "se trata de algo transversal. Esto no es una reivindicación de unas pocas, sino de toda la sociedad. Y nosotras que estamos aquí, en clausura y no salimos por las noches, también nos sentimos implicadas en algo que atañe a una injusticia. No se entiende que esto se califique como se ha calificado".
Noya concluyó asegurando que, aunque estén viviendo en clausura, "nosotras también formamos parte de esto. Por ser mujeres y por ser personas. Esto no es una guerra entre hombres y mujeres. Esto es una injusticia. No puede ser que al final la juzgada sea la víctima".
Monjas de clausura con página web y Facebook
Sorprende que las monjas de clausura tengan acceso a este tipo de tecnologías. Pero las Carmelitas Descalzas de Hondarribia cuentan con su propia cuenta en esta red social. No son las únicas. SUs homónimas de Zarautz tienen incluso su propia página web. El hecho de que las últimas hermanas en unirse a la congregación la hayan conocido por vía internet las llevó a potenciar este canal de comunicación. Responden de este modo a lo que decía el Papa Benedicto XVI en 2011: "la necesidad de abrirse al sexto continente, que es internet". Ahora, las monjas de HOndarribia han aprovechado este canal para solidarizarse con la víctima de la manada.