Noticias relacionadas
Son doce nombres -no sabemos si sin piedad- mujeres y hombres que actualmente defienden el legado, la herencia, el patrimonio, la filosofía, y la bandera que enarbolaba Francisco Franco Bahamonde, conocido por ellos como el Caudillo de España y, por sus detractores, como el gran dictador. Son nietos, bisnietos, hijos de ministros franquistas, abogados e incluso ex miembros de la banda terrorista Grapo reconvertidos al franquismo. Todos ellos tienen un mismo objetivo, que los restos de Franco no se saquen del valle de Cuelgamuros como pretende a toda costa el Gobierno de Pedro Sánchez. Va a ser una batalla dura, tanto desde el punto de vista legítimo como de la opinión pública cuando se cumplen 43 años desde que falleciera el dictador. Cuando el movimiento franquista parecía (nunca mejor dicho) enterrado, ahora las decisiones del Gobierno de Sánchez directamente lo han reavivado. Estos son sus nuevos líderes y defensores.
1. Luis Alfonso de Borbón
El primero de marzo de este año, la Fundación Francisco Franco nombró presidente de honor a Luis Alfonso de Borbón, quien no ha querido acceder a este cargo aún, dejando así un año de luto por la muerte de su abuela y anterior presidenta, Carmen Polo y Franco.
El bisnieto de Franco había mantenido un tono discreto estos últimos meses y no había querido convertirse en una figura visible. Pero esta posición cambió el pasado 15 de julio, cuando acudió a la manifestación del Valle de los Caídos a favor de la no exhumación y posterior traslado de los restos del dictador. Una postura que siguió defendiendo con vehemencia en los días siguientes en redes sociales en las que llegó a afirmar: “Solo había una España que progresaba alegre, orgullosa de su pasado y esperanzada en su futuro. Pero el rencor nos lleva otra vez a despertar rancios odios cainitas. La Historia castigará a quien profane este Templo grandioso, no por el tamaño de la Cruz, sino por el fraternal abrazo que representa, acogiendo bajo sus brazos a un solo pueblo reconciliado. No hay otro camino y nuestros padres lo sabían”.
Para él, su abuela Carmen era su segunda madre, su fiel confidente. La hija de Franco le dio todo el cariño, la ternura y la protección que le faltaban. Y, desde entonces, como contrapartida nunca la dejó sola a la vez que colaboraba en la gestión del patrimonio de su abuela.
Gracias a su unión con María Margarita Vargas el 9 de agosto de 2004, Luis Alfonso de Borbón entró en este mundo de opulencia y pujanza. Hoy, los duques de Anjou viven en Madrid, en La Finca, la lujosa urbanización de los ricos en Pozuelo de Alarcón. También Luis Alfonso ha visto incrementar de forma notable sus negocios en España. En el listado del Boletín Oficial de los Registros Mercantiles Españoles (BORME) continúa como administrador de la sociedad Borcorel S.L. dedicada a “la construcción, reparación y conservación de toda clase de obras” a las que ha sumado la gestión de las mercantiles International Transaction System SL, dedicada la consultoría informática y Borvar Inversiones S.L., su principal empresa con activos valorados a cierre del ejercicio 2016 en 9.130.657,94 euros.
La importancia de los negocios y la familia ejercen de contrapeso de la defensa del legado de su bisabuelo. La familia de su esposa, Margarita Vargas, no se muestra muy favorable a que muestre tan claramente su apoyo a la figura de su bisabuelo y prefiere que vuelva a un perfil más bajo. Algo que se ha visto nítidamente esta semana con la firma de su tío, José Cristóbal Martínez-Bordiú, del burofax en el que amenazaban a Moncloa con emprender acciones civiles y penales si exhumaban el cuerpo de su abuelo del Valle de los Caídos.
2. José Cristóbal Martínez-Bordiú
"Ponemos en su conocimiento, por si se les hubiera pasado inadvertido, que dicha aprobación contraviene el artículo 86 de la Constitución por falta absoluta del presupuesto habilitante al no concurrir el requisito imperativo de la extraordinaria y urgente necesidad”. Esto es parte del burofax remitido por la Fundación Francisco Franco y firmado por José Cristóbal Martínez-Bordiú que se envió al Gobierno un día antes de que aprobaran el Decreto-Ley sobre la exhumación de los restos de su abuelo.
José Cristóbal, nacido en 1958, lleva tiempo dando la cara por los que consideran ataques a la figura y legado de su abuelo. Ya firmó también junto a su madre la demanda interpuesta por la Fundación Franco contra las 19 personas que ocuparon hace un año (el 30 de agosto de 2017) el Pazo de Meirás a las que se las acusa de los delitos de odio, contra el honor, daños y allanamiento de morada.
José Cristóbal, aunque inició los estudios de Arquitectura, los abandonó para hacer la carrera militar, consiguiendo la graduación de Teniente de Infantería en 1979. Tres años después abandonó el Ejército español, ante la escasa posibilidad de promocionar sin la figura de su abuelo, para iniciar una nueva vida. Fijó su residencia en la finca familiar de Valdefuentes donde explota un picadero con el nombre de Cercano Oeste. Allí también se ubica otra de sus empresas, Joran Producciones SL, dedicada a la producción y programación de campañas publicitarias y promocionales. Se casó con la presentadora canaria de televisión Jose Toledo, con quien tuvo dos hijos y de la que recientemente se ha separado.
3. Francis Franco
El mayor de los hijos varones de la difunta Carmen Franco, posee los títulos de “Señor de Meirás” y “Marqués de Villaverde”. Por indicación de su abuelo que le ordenó perpetuar la estirpe, cambió el orden de los apellidos y se llama actualmente Francisco Franco Martínez Bordiú. Pero de poco le ha servido porque su hermana Carmen es la que ha heredado el duquesado de Franco, un título por el que siempre ha mostrado una gran debilidad, pero que la Ley de Igualdad para la Sucesión de Títulos Nobiliarios no le ha permitido conseguir.
Esto le ha generado resquemor, e incluso se ha enfrentado abiertamente a algunas de las posiciones familiares. A pesar de esto se le ha vuelto a ver en las últimas semanas en entrevistas en televisión y prensa. Francis Franco ha afirmado que la familia se hará cargo de los restos de su abuelo si es exhumado del Valle de los Caídos y ha descartado que vaya a ser enterrado en El Pardo, donde fue enterrada su abuela Carmen Polo, por motivos de seguridad. El mayor de los nietos varones del dictador ha argumentado que "gastar dinero en contra de un Gobierno es perder el tiempo porque si lo hacen y lo exhuman sería un brindis al sol", unas palabras que nada se parecen al burofax firmado por su hermano José Cristóbal.
Francis sigue volcado en los negocios, un mundo que siempre le ha apasionado. Empezó su controvertida trayectoria abriendo un chiringuito en Marbella y actualmente controla múltiples sociedades inmobiliarias especialmente dedicadas la compraventa de propiedades con inquilinos, a los que se unen otras mercantiles especializadas en la gestión de parkings, industria alimentaria e incluso del sector sanitario.
4. Juan Antonio Chicharro
Muy distinta a la posición “tibia” de Francis Franco es la del general Juan Antonio Chicharro, presidente de la Fundación Francisco Franco. En su última carta, publicada en la web de la Fundación afirmaba: “Al incluir en la misma la necesidad de la exhumación del Generalísimo el reciente Decreto-Ley no hace otra cosa que establecer un punto y seguido -que no punto final- en su afán destructor de una parte importante de nuestra historia. Esta es la situación y no es necesario darle muchas vueltas. Después de la exhumación vendrá la desacralizacion del Valle y a la larga la desaparición de la Cruz por acción u omisión. Por añadido que la monarquía será otro objetivo toda vez que esta toma su legitimidad del propio franquismo”. Todo un ataque ya no sólo al Gobierno, sino que incluso ya atañe a la Monarquía de la que fue su servidor como ayudante de Campo de Su Majestad el Rey cuando tenía el cargo de Teniente Coronel.
Chicharro, casado, con tres hijos y 11 nietos, está en la reserva como General de División desde el año 2010. Desde que entró en la presidencia de la Fundación dejó claro sus intenciones: "Mi esfuerzo principal no podrá ser otro que la defensa de la verdad histórica y desde luego, también, la propagación de las ideas que posibilitaron al pueblo español alcanzar un estado de bienestar no bien comprendido, hoy”.
Atrás quedan las fotos del general Chicharro saludando a las tropas o codeándose con altos cargos de la Casa Real en actos oficiales. En su currículum también figura que fue comandante y fundador de la Compañía Mar Océano de la Guardia Real.
En 2003, el gobierno de José María Aznar lo nombró Segundo Jefe de la Comandancia General de la Infantería de Marina. Dos años después, el ex ministro de Defensa José Bono le entregó la Gran Cruz de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo. Su último destino fue, ya como General de División, el de Comandante General de la Fuerza de Infantería de Marina.
Tras abandonar el uniforme, Chicharro se dedicó a escribir cartas y artículos variados, además de realizar algunas intervenciones incendiarias. En sus últimas apariciones pone en juicio el papel que pueda tener la Iglesia en la exhumación de los restos del dictador, un punto que también se refleja en otro comunicado de la Fundación: “Sólo la alta Jerarquía de la Iglesia Católica al amparo de la inviolabilidad que los Acuerdos con la Santa Sede otorgan a la Basílica puede impedir tamaño desafuero (...) Desde la Fundación Nacional Francisco Franco nos negamos a creer que la Iglesia Católica Universal no proteja a quién fue su salvador y protector en los momentos más críticos para esta en toda su historia”.
5. Pilar Gutiérrez
La línea dura de la defensa de la figura de Franco se encarna en la figura de Pilar Gutiérrez, la autodeclarada “mujer más franquista de España”. La presidenta del Movimiento por España, tuvo la iniciativa desde su grupo de Facebook, que ha alcanzado más de 32.000 seguidores, de movilizar a los nostálgicos del régimen para protestar por la iniciativa de retirar los restos de Francisco Franco. Se denomina como catalizadora de “una ola en el mar que estaba esperando a romper y ya ha roto”.
La mujer no ha dudado en venerar la Figura de Franco: “Amamos su vida, su obra, su historia”, ha afirmado a la vez que señala a Pedro Sánchez como “una marioneta de los masones”: "Es matarnos, matar a la oposición como hicieron con Calvo Sotelo en el 36”.
Pilar Gutiérrez, psicóloga de profesión, es hija de Joaquín Gutiérrez Cano, uno de los últimos ministros del Franquismo, personaje muy adicto al Régimen que, tras múltiples cargos, incluso como embajador, fue nombrado ministro entre 1974 y 1975 bajo la presidencia de Arias Navarro. Fue también presidente de la Fundación Francisco Franco,
El ex ministro no sólo ha transmitido su devoción por la obra, la doctrina y la memoria de Franco a su hija, sino también a su nieta.
6. Sandra Gutiérrez
Sandra Gutiérrez ya rivaliza con su madre a la hora de defender en los platós de televisión la figura de Francisco Franco, una postura que no es nueva. En 2014, por ejemplo, presentó a todos los asistentes al acto conmemorativo al 20-N en la Plaza de Oriente.
Sandra gestiona activamente la web del Movimiento por España que define como “un grupo de ciudadanos de a pie reunidos por medio de las redes sociales para recuperar la España que nos legaron nuestros mayores y que está siendo destruida a conciencia desde hace 40 años”, y que espera recoger más de 100.000 firmas en contra de la exhumación de la tumba de Franco.
En un manifiesto iniciativa de ella y de Pío Moa, no duda en señalar la exhumación como “profanación de la tumba de quien guió los destinos de España". Ella no vivió la dictadura franquista, pero insiste en que no hay que olvidar esa época en la que "el país era mucho más tranquilo, más en paz de lo que hay ahora".
7. Pío Moa
Pío Moa es uno de los grandes defensores del franquismo, al que dedica muchas de sus obras. Este vigués que militó en el GRAPO defiende que “al contrario de lo que suele creerse por influencia de la izquierda antidemocrática, el franquismo puede ser defendido desde los valores de la democracia liberal”.
Según Moa, “el franquismo fue autoritario, no totalitario” y también señala que “no es cierto que en el franquismo no hubiese libertades”. En su tesis revisionista no duda en encumbrar a Franco como una especie de héroe, señalando incluso que “no solo derrotó a la revolución también nos salvó de la guerra mundial, desbarató el maquis y el aislamiento impuesto injustamente a España” e incluso “reconcilió a la población”.
El cambio de postura política de Pío Moa ha sido radical. Participó en la oposición antifranquista dentro del Partido Comunista de España reconstituido y de la organización terrorista GRAPO, con la que participó en asaltos a locales falangistas, e incluso tomó parte en uno de los asesinatos del 1 de octubre de 1975, perpetrados en represalia por las últimas cinco ejecuciones del franquismo de dos miembros de ETA y tres del FRAP el 27 de septiembre, que entre otros firmó el abuelo de Sandra, con quien colabora ahora en el “Manifiesto por España”.
Su papel mediático se ha visto reducido en las últimas semanas por el peso de figuras como Chicharro o la emergente Pilar Gutiérrez.
8. Gonzalo Fernández de la Mora y Varela
Algo parecido ha pasado con Gonzalo Fernández de la Mora Varela, anterior presidente de la Fundación Francisco Franco. Es hijo de otro ministro franquista, Gonzalo Fernández de la Mora, fallecido en 2002, quien ocupó la cartera de Obras Públicas bajo la presidencia de Carrero Blanco e incluso fue diputado en Alianza Popular.
Gonzalo hijo continúa como director de la revista Razón española que fundó su padre y que en 2013 cumplió 30 años. Como tal firmó el “Manifiesto por la historia y la libertad”, que critica la nueva Ley de Memoria Histórica propuesta por el PSOE a la que tilda de “tipo soviético", "buscar reabrir viejas heridas" e imponer el "pensamiento único".
Gonzalo Fernández de la Mora es presidente de la empresa Sociedad Europea de Detección SL (Sedet), fundada en 2007 y de la que presentó concurso voluntario de acreedores en el Juzgado de lo Mercantil número uno de Valladolid.
9. Hermanos Alonso García (avalaron a Mario Conde)
Jaime y José Ángel Alonso García saltaron a la actualidad cuando en 2016 avalaron con las escrituras de cuatro fincas en Fuerteventura, tasadas en 610.818 euros, la fianza que la Audiencia Nacional exigió a Mario Conde para salir en libertad provisional.
Han sido amigos durante años. Mario Conde fue padrino de una de las hijas de Jaime, que a su vez es vicepresidente ejecutivo de la Fundación Francisco Franco. José Ángel también forma parte del patronato.
Jaime, abogado, católico y de derechas, tiene en su currículo el haber acabado con la carrera judicial de Baltasar Garzón desde Manos Limpias y ser portavoz de la Fundación Francisco Franco, una figura que ha llegado a afirmar: “Ha hecho mucho más por la democracia que los que se manifiestan en las calles".
10. Luis Felipe Utrera-Molina
“Un gobernante de exigua estatura moral pretende hacer historia con minúsculas profanando la tumba de quien hace 82 años cometió la osadía de unirse a una sublevación cívico-militar contra un proceso revolucionario marxista y ser el primero y único en derrotar al comunismo en el campo de batalla: Francisco Franco Bahamonde.”
Estas palabras son de una de las últimas columnas que el albacea de Carmen Franco Polo, Luis Felipe Utrera-Molina, ha publicado hace escasas semanas. El hermano de María del Mar Utrera-Molina, casada con el exministro de Justicia y expresidente de la Comunidad de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, es uno de los grandes defensores de la figura de Francisco Franco.
El albacea encargado de tutelar el reparto de la herencia de Carmen Franco Polo es licenciado en Derecho por la Universidad Pontificia de Comillas y socio del bufete J.Y. Hernández-Canut. Su padre, José Utrera Molina, muy ligado a la Falange, ocupó distintos cargos durante el régimen franquista, como gobernador civil de Sevilla o Burgos y ministro de la Vivienda con Carrero Blanco y ministro-secretario general del Movimiento con Arias Navarro y en cuyo entierro se llegó incluso a cantar el “Cara al Sol”.
Luis Felipe es muy activo en Internet, y sus cartas y mensajes en su blog muy seguidos por los nostálgicos del régimen.
11. Senén Pousa (Alcalde de Beade)
Senén Pousa volvió a arrasar en las últimas elecciones municipales con el apoyo del 78% de los votantes, y a punto de cumplir los 80 años aún no ha aclarado si volverá a presentarse en las del próximo año y dejar así la alcaldía tras 45 años ininterrumpidos. El alcalde de Beade, un pueblo de Ourense de 500 habitantes, no tiene problema en declararse “franquista hasta a la médula” pero también “demócrata”. Es alcalde desde 1974 y desde 1979, ya en democracia, no pierde ningunas elecciones. De hecho, hasta sus rivales renuncian a hacer campaña en su contra.
También se ha declarado admirador de José Antonio Primo de Rivera, fundador de Falange. Sus fotografías han estado colgadas en su despacho hasta que en octubre de 2013 un atentado, atribuido por el delegado del Gobierno al grupo Resistencia Galega, destrozó parte del edificio consistorial. Pousa ha rendido varios homenajes a Franco y a los "caídos por España" y en Beade, todos los 20 de noviembre, se oficia una misa en honor al dictador.
12. Luis Pineda
De contemplar el Valle de los Caídos desde su ventana a ver ahora los muros de la cárcel de Estremera en Madrid. Luis Pineda Salido, el que fue todopoderoso presidente de AUSBANC, en la cárcel de forma preventiva desde el año 2016 por la operación Nelson, nunca ocultó demasiado sus tendencias políticas. Presumía que uno de sus pequeños placeres era hacer subir la persiana de su habitación con un mando y contemplar el lugar en el que hasta ahora reposan los restos de Franco y de José Antonio, de los que fue un fiel seguidor.
Luis Pineda fue líder en su juventud de la formación de extrema derecha Frente de Juventud. Muy cerca de su casa, en la Plaza de Quevedo, organizó el lanzamiento de cocteles molotov en el primer aniversario del 23-F en 1982, con 19 años. En esa época tuvo incluso que huir a Gran Bretaña tras ser herido con arma blanca y ser amenazado, aunque él ha afirmado en ocasiones que, por rivales políticos, estas amenazas provenían de su mismo entorno de extrema derecha relacionado con la lucha por alzarse con la dirección del Sindicato de Estudiantes.
También fue famoso su atraco con violencia en el que “Luispi” (alias por el que le conocía la Policía) golpeó con culata de un revolver a la Marquesa de San Eduardo para robar fondos con los que financiar sus actividades de extrema derecha.
Aunque en sus negocios ha llegado a estar cerca desde la Esquerra Republicana de Catalunya del tripartito con Montilla a la Venezuela de Chávez y Maduro, siempre será un gran nostálgico del régimen aunque acomodado al cambio de tiempo.