Patricia Aguilar rompe su silencio. La joven alicantina de 19 años secuestrada durante 18 meses por una secta de Perú ha logrado "abrir los ojos" y relatar "la pesadilla" que vivió -junto a su bebé- siguiendo al gurú Félix Steven, ahora encarcelado por trata de personas. "Tiene que quedar claro que Steven es muy peligroso. Si sale de la cárcel, no habrá una sola adolescente, una sola mujer que esté a salvo en ningún país del mundo", advierte Aguilar.
En una entrevista a El Periódico, Patricia asegura que se está recuperando en Elche junto a su familia y bebé, por lo que ha pedido declarar en el juzgado de su ciudad natal para cambiar su primeras palabras en sede judicial en Perú. En aquel momento, explica, seguía manipulada y tenía miedo de contar la verdad.
Aguilar relata cómo en la secta ha habido "malos tratos, amenazas, abusos y violaciones" hacia las víctimas por parte de Steven y, aunque le "cuesta hablar de ello", considera que dar a conocer públicamente su historia es "la única forma de intentar que esto no vuelva a ocurrir". Ahora es consciente del "enorme daño" que le ha hecho el que se hacía llamar Príncipe Gurdjieff: "hombre destinado a repoblar el planeta tras el apocalipsis".
"Se aprovechó de mi edad, de que yo buscaba respuestas, cariño, y me engañó, me robó mi adolescencia y mi vida. Ahora soy consciente de que nos estaba matando", recuerda Aguilar en la entrevista concedida a El Periódico. "Si pudo llegar a la habitación en España de una chica de 16 años, como yo, estando a miles de kilómetros, y arrancarme de mi familia, puede hacerlo con cualquiera. Por eso es muy importante que siga en prisión. Para que las víctimas podamos recuperarnos y todo esto pare, necesitamos que pare", añade.
Además, se muestra convencida de que Steven "volverá a delinquir" si sale de prisión: "Captar a menores y abusar de ellas económica y sexualmente es su modo de vida. Lo fue antes de conocerme a mí, lo ha sido durante el tiempo que he estado con él y va a seguir siéndolo en cuanto ponga un pie en la calle. No tengo duda, no debemos subestimarle, no sabe hacer otra cosa. Es súper inteligente, peligroso y muy violento. Cuando estás con él, solo hay dos opciones: obedecerle en todo o atenerte a las consecuencias".
"Los videos que grabé hace un año en Perú diciendo que yo estaba allí por mi propia voluntad, no eran tal. La manipulación era enorme: no era yo, es decir, hablaba yo, pero el mensaje era de él; yo hablaba por él", concluye.