Los mil negocios legales de 'El Castaña': taxis, intercambio de parejas, un bar para la amante...

Ante el juez se exhibe como un simple promotor inmobiliario cuya fortuna surgió, dice, a partir de 200.000 euros que cobró de un socio hace más de 20 años. Pero Francisco Tejón Carrasco, Isco, el mayor de ‘Los Castañas’, tiene mucho más que eso. Aparte del poder sobre el terreno, su fortuna, amasada durante años junto a su hermano a base del control del 70 por ciento del hachís que entra en España, está valorada en 30 millones de euros.

Una fortuna que, durante años, les ha proporcionado a 'Los Castañas' una vida de lujo y desenfreno. Que han mantenido oculta gracias a los distintos negocios que ha ido abriendo tanto a su nombre como a nombre de sus mujeres: tiendas, empresas, establecimientos de hostelería o casas de citas. La titularidad de todos ellos estaba convenientemente distribuida entre distintas personas de su entorno. Incluso, según ha podido saber EL ESPAÑOL, uno de ellos figura a nombre de una mujer identificada como la amante del propio Isco. 

En el auto de ingreso en prisión, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, el juez atribuye el dinero a los réditos que ha generado durante años la organización que mantenía con su hermano Antonio Tejón Carrasco, con quien erigió un imperio: el del hachís.

Exterior del chalet que sirve de casa de citas y donde se grabó el famoso videoclip con Isco. Pedro Montes

Todo ello lo logró, hasta su entrega este miércoles a las autoridades, junto al otro Castaña. Ambos se convirtieron en los principales narcotraficantes de hachís en el Estrecho. Los Castañas, el clan más importante de la zona de Campo de Gibraltar, la mayor organización de narcotraficantes de hachís de Europa. Con el golpe de este miércoles, y el que fue perpetrado el pasado mes de junio cuando la Policía Nacional detuvo por fin al menor de los dos hermanos, Antonio Tejón Carrasco, los agentes dan por concluido, por el momento, uno de los operativos más importantes en la zona con años de trabajo a sus espaldas: la caza a los Tejón ha tocado a su fin con el mayor de los dos entregándose a las autoridades en un conocido restaurante de La Línea de la Concepción (Cádiz).

El miércoles 16 de octubre de 2016 comenzó la 'operación Ronald'. En medio de la noche, los Castañas controlaban un alijo de varias toneladas de hachís en una playa de Campo de Gibraltar. Abortaron la misión en cuanto se enteraron de que agentes del GRECO en la Costa del Sol, justo en ese momento, entraban a la fuerza en varias de sus casas. El alijo se quedó a medias y ellos, subidos a una lancha rápida, huyeron como forajidos a Marruecos.

Según fuentes policiales, los frutos recogidos de aquella operación ayudaron ya a situar sobre el tablero algunas de las propiedades del clan. 30 personas fueron detenidas, se incautó una tonelada de estupefacientes y 350.000 euros en efectivo. 21 casas y naves industriales del Campo de Gibraltar fueron registradas. Se intervinieron 16 vehículos, tres embarcaciones semirrígidas, varias armas de fuego. Se intervinieron 17 inmuebles cuyo valor ascendía a tres millones de euros. A la vez, se bloquearon 24 cuentas pertenecientes a diferentes personas físicas y jurídicas cercanas a ambos hermanos.

Ahora, con ambos en prisión, EL ESPAÑOL desgrana algunas de las propiedades que los Castañas, a juicio de las autoridades, empleaban para ocultar el dinero procedente de los alijos que durante tantos años introdujeron por el territorio que ellos controlaban.

Taxis, cafeterías, casas de citas

La otra cara de Francisco Tejón es la del hombre de negocios. Con esa pátina de businessman se presentó ante el juez para que le tomase declaración. Allí negó todos los delitos que se le imputan. Dice que todo lo que hace es legal y que no hay nada que le incrimine en las descargas de hachís. Un testimonio, según el auto del instructor, absolutamente inverosímil.

La casa que sirve de chalet de intercambio de citas, propiedad de Francisco Tejón, cuenta con cámaras de vigilancia. Pedro Montes

El magistrado no tiene duda de dónde proceden los ingresos de los Castañas. Tampoco de cómo han tratado de ocultar las toneladas de dinero procedente de las descargas de hachís: “Los hermanos Tejón Carrasco, puestos de común acuerdo con terceros, tratarían de dar apariencia de legalidad a los mismos, ilícitamente obtenidos, mediante la constitución de numeras empresas y sociedades, con objetos diversos, con la finalidad de entremezclar los activos y ocultar cualquier rastro de ilicitud en el amplio patrimonio del que son titulares Antonio y Francisco”.

Según datos del registro mercantil consultados por EL ESPAÑOL, Francisco Tejón figura, como autónomo, una empresa de transporte de taxi que está situada en pleno corazón de La Línea, en la calle Júpiter, en el barrio de la Atunara, el epicentro del narco en Campo de Gibraltar. Es en ese barrio donde Isco ha permanecido oculto los dos últimos años entre los suyos. Apenas se ha dejado ver. Se trata de una zona de confort de casas bajas y pegadas, comunicadas entre sí, en las que es posible huir corriendo de tejado en tejado.

Esta técnica de utilizar, presuntamente, una empresa de taxis como tapadera para lavar droga la copiaron tiempo atrás ‘Los Castañas’ de los narcos de Ceuta. Según fuentes policiales, este método consiste en comprar licencias de transporte y poner en ella gente a trabajar.

Allí ‘Los Castañitas’ contaban con un ejército de empleados y emisarios: desde puntos a los que pagaban 1.500 euros por vigilar los movimientos de la Policía Nacional y de la Guardia Civil durante las noches, hasta pilotos de lanchas y alijadores en tierra. Allí fue donde este miércoles el otro gran bastión del clan se entregó, en un conocido restaurante, a las autoridades.

[Más información:'Los Castañitas', los dos hermanos que controlan el 70% del hachís en España]

Francisco Tejón figuraba también, hasta su cese en el cargo en febrero de 2015, como administrador mancomunado de una sociedad limitada cuyo nombre es “Punto Limpio Sebastián del Sur S.L.”. Según el registro, la actividad de la sociedad es, en teoría, la “recuperación de productos” y la “separación y clasificación de materiales”. Está situada en el polígono INCOSUR, en la Avenida de Zaragoza, en el municipio de San Roque, a 17 minutos en coche de La Línea. Junto a su nombre, aparece otro, el de su socia mancomunada, Raquel María Pérez Sody: se trata de su amante, también detenida en octubre de 2016 durante la operación en la que los dos hermanos huyeron a Marruecos. En el lugar, hasta el que se ha desplazado este periódico, no hay nada en activo. El negocio parece estar cerrado.

La piscina del chalet de intercambio de parejas.

La tercera de las empresas en cuyos papeles aparece el nombre del mayor de ‘Los Castañas’ se llama MOMAR Estructuras Metálicas y es una sociedad limitada unipersonal, situada en el polígono industrial Palmones, en Los Barrios, Cádiz, a escasos 15 minutos en coche de la costa y de la bahía de Algeciras. En ella figuraba como administrador mancomunado junto a otras dos personas.

Estas son todas las empresas en las que aparece el nombre de Isco. Pero, ¿y sus más allegados? No hay más que fijarse en la propia amante, Raquel María Pérez Sodi, empresaria autónoma que supuestamente regenta el Café Lounge Morana, también en Los Barrios.

Por otro lado, su mujer, María Ángeles Florido Gómez, aparece también como autónoma. Regenta, en teoría, un establecimiento de bebidas, una cafetería en Casarabonela, Málaga. El último nombre que aparece en el entramado empresarial del círculo más cercano de ‘Los Castañas’ es el de Zaraida López Domínguez, la mujer de Antonio Tejón, el menor de los dos líderes del clan.

Regenta en calidad de autónoma, en teoría, un negocio de Alquiler de películas de video y discos en la calle Doñana, también en pleno barrio de la Atunara, en La Línea. El lugar, según los datos del Registro Mercantil, funciona también como comercio al por menor de artículos de joyería, relojería, platería y bisuteria. “Incluyendo reparación”, se matiza. Allí, cuando pasa por delante EL ESPAÑOL, donde debería estar el negocio no hay más que un pequeño negocio de ultramarinos rodeado por edificios.

Los nombres de las mujeres de ‘Los Castañas’ les resultaron claves desde el principio a los agentes del GRECO. Precisamente ellas dos fueron detenidas en aquel operativo de octubre de 2016 con el que empezó la caza de los hermanos Tejón Carrasco. El juez que llevaba la investigación, del Juzgado número dos de La Línea, las dejó en libertad con cargos. Las acusó de formar parte de una banda organizada y de blanqueo de capitales. Fue entonces cuando los agentes del GRECO comenzaron a seguirles el rastro para ver si en algún momento contactaban con sus maridos.

Una casa de citas

Francisco Tejón 'Isco' es el narcotraficante de hachís más buscado del país. Está en busca y captura. La Policía Nacional detuvo a su hermano Antonio en julio de este año. Están considerados los líderes del mayor clan de la droga del Campo de Gibraltar. Vídeoclip

La casa de citas se encuentra casi en la desembocadura del río Guadarranque, junto a la carretera nacional N-340. Cerca de la casa hay decenas de lujosos chalets. Durante muchos años, los narcos han construido ahí narcoembarcaderos que daban acceso al río directamente a la zona de los chalets. Uno de ellos es propiedad de Isco.

El mayor de los dos hermanos decidió convertirlo en una casa de citas, de intercambio de parejas. Se llama Swingers Midnight y en este mismo lugar, en su interior, fue donde se grabó el ya célebre videoclip de ‘Candela', un tema del cantante Clase-A.

Por el momento, con el clan prácticamente desarticulado, Isco y Antonio se encuentran ya en prisión, esa condición de encierro que el narco quiere ahora evitar aduciendo a distintas dolencias físicas. Unas dolencias, como dice el juez en su auto, que no parecían existir en el videoclip, en el que Isco celebraba, de algún modo, su última fiesta. El juez deja claro en su escrito que no se cree ni una palabra de esa versión de un Francisco Tejón lesionado: “Figura el detenido bailando y disfrutando de la música y de compañía femenina, sin atisbo alguno de las dolencias físícas alegadas”. El otoño, sin duda, es tiempo de castañas.