Las matriculaciones de coches diésel han disminuido en los últimos meses, consecuencia de las medidas que limitan su uso y que aumentan el precio de su mantenimiento. Los concesionarios luchan, a pesar de las malas noticias que rodean al gasoil, por sacar a flote a este tipo de transportes. Los grandes puntos de venta, de primera y de segunda mano, utilizan las promociones para poder vender los vehículos que tienen en stock. Los precios han bajada, las ofertas se acumulan en los establecimientos y las ventas caen sin parar. El ascenso de las promociones se vive como una manera de atraer a nuevos clientes, personas que titubean a la hora de hacerse con un transporte de este tipo ahora que las medidas institucionales acotan su uso.
El gasóleo ya es el combustible menos querido por los nuevos conductores. El diésel ha recibido, en los últimos meses, numerosos golpes que amenazan a la continuidad de sus vehículos sobre las carreteras del país. Las medidas presupuestarias y las restricciones de circulación en las grandes ciudades han hecho del gasoil un carburante despreciado para los consumidores.
Caen las matriculaciones de turismos diésel
Las ventas de vehículos diésel han caído de una forma estrepitosa. Los datos, aportados por el informe oficial de matriculaciones de ANFAC, al que ha tenido acceso este medio, lanzan una radiografía de cómo ha cambiado la tendencia de compra con respecto al año pasado. En el análisis, hecho en el mismo periodo, reluce una bajada de demanda de los transportes que utilizan este carburante.
En septiembre de 2017, se matricularon en España 41.713 turismos de gasóleo, un dato que choca con el de este mismo mes en 2018 con 25.555 matriculas. Una bajada de 38,74 % tal y como confirman en la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC).
"La incertidumbre que se está creando en torno al diésel y que está lanzando un mensaje equivocado al comprador sobre esta tecnología, le hace un flaco favor al mercado porque distorsiona la demanda. Cualquier crisis de confianza, sea del tipo que sea, es un enemigo a batir", dilucidan desde le departamento de comunicación de la institución.
La caída de las matriculaciones se produce el mismo mes en el que entró en vigor el nuevo reglamento de medición de emisiones WLTP. Fue, precisamente, durante los meses anteriores -julio y agosto- cuando las ventas de turismos vivieron su mejor momento. Las matriculaciones en el mercado nacional se dispararon hasta llegara un 48,7% más si se compara con el mismo mes del año anterior, acciones que se llevaron a cabo junto treinta días antes de que llegaran las nuevas mediciones europeas de emisión de CO2.
La solución de los vendedores
Las cortapisas impuestas a los turismos diésel y su bajada en cuanto a las ventas, han tenido consecuencias en los concesionarios nacionales. Los vendedores buscan la forma de sacar al mercado estos vehículos, mirados con recelo, a través de ofertas y promociones. Tal y como adelanta El País, turismos de segunda mano han vivido una rebaja en sus precios que se desliza desde el 10% hasta el 15% de descuento en su coste habitual.
La temporada estival se inauguró en los puntos de oferta de automóviles con promociones que dejaban ver la necesidad de ofrecer, con estímulos, este tipo de vehículos diésel. El verano vio cómo las ventas, apresuradas por sus ofertas, aumentaron y los clientes se dejaban seducir por la bajada de los precios.
Explican, desde los establecimientos de venta, que los vehículos más dañinos para el medio ambiente son aquellos que tienen más de diez años y que las nuevas producciones diésel emiten una cantidad mucho menor de CO2, por lo que su salida al mercado puede ser mucho más beneficiosa que su mantenimiento en el stock de los concesionarios.
[Más información: Quiero deshacerme de mi coche diésel pero con 10.000 euros de ayuda como en Alemania]