El pozo de en torno a 110 metros de profundidad en Totalán (Málaga) en el que se busca desde el domingo a Julen Jiménez -propiedad de la familia del pequeño y en el que se encontraría éste- carece de permisos.
Estos agujeros, que tienen como fin el hallazgo de aguas subterráneas, requieren en primer lugar de una exploración para constatar que efectivamente hay una bolsa de agua. Un informe técnico de la Consejería de Medio Ambiente debe avalar la conveniencia de la prospección y sólo en ese caso, el ayuntamiento correspondiente, en este caso el de Totalán, concede la licencia de la obra.
Según El País, no se da esta circunstancia en el pozo en el que se hallaría Julen, de apenas dos años y medio. Asimismo, se encontraba sin sellar con una arqueta o sistema que impida accidentes de este tipo. Sobre este asunto, EL ESPAÑOL consiguió hablar con el empresario que realizó la perforación, Antonio Sánchez Gámez: "Sellé el pozo, alguien quitó la piedra después y Julen cayó", explicó a este medio.
La Guardia Civil no tiene por el momento ninguna evidencia de que Julen se encuentre dentro de esa cavidad. "No estamos convencidos de nada. Estamos intentando saber qué hay debajo del tapón", ha señalado Bernardo Moltó, portavoz del Instituto Armado.
La familia, indignada
Los equipos de rescate del menor encontraron una masa compacta de tierra, barro y piedra a unos 73 metros de profundidad del pozo. La Benemérita entiende que el niño ha de estar entre ese tapón y el fondo del orificio. Por el momento sólo cuentan con el testimonio de los padres y unos tíos de Julen, quienes este domingo relataron que lo vieron caer sobre las dos de la tarde.
El padre de Julen, José Jiménez, ha criticado las acciones que hasta ahora se están realizando porque las considera insuficientes: "Muchos tuits de apoyo, muchos votos pero medios, ninguno". En declaraciones a Telecinco, ha pedido a los medios: "No pongáis que están viniendo ni el alcalde ni nadie, poned lo que están haciendo aquí que es que no están haciendo una puta mierda", ha dicho indignado.
A la indignación se ha sumado el alcalde de Totalán, Miguel Escaño, que, entrevistado en Antena 3, ha lamentado que "todas las acciones que se hagan empeoran el pronóstico y disminuyen las posibilidades de encontrar al niño con vida".