La Policía Nacional ha detenido esta mañana a otros diez trabajadores de la empresa funeraria El Salvador de Valladolid que supuestamente habrían colaborado en la estafa por la venta de ataúdes cometida durante 20 años, según ha informado la Delegación del Gobierno.
Con estas nuevas detenciones se elevan a 26 los implicados en el marco de la Operación Ignis, de los cuales el dueño y dos de sus hijos se encuentran en prisión: el padre (Ignacio M.) sin fianza, uno de los hijos bajo fianza de 800.000 euros y una hija de 400.000 euros.
Los nuevos detenidos son trabajadores de la empresa que, en menor o mayor grado, habrían colaborado con la trama. Por lo tanto, se les considera autores de sendos delitos de estafa continuada y de organización criminal.
Las previsiones de la Policía Nacional indican que podrían pasar, previsiblemente mañana, a disposición judicial.
Por otra parte, hasta el momento se han presentado más de 300 denuncias de personas que se sienten perjudicadas en el caso que se investiga, según han informado a Efe fuentes de la Delegación del Gobierno.
El Juzgado investiga en concreto si el Grupo Funerario El Salvador se quedaba con ataúdes comprados antes de incinerar los cadáveres y los revendían, con la posible retirada de casi 6.000 féretros entre 1995 y 2015, un número calculado de forma provisional, según fuentes del TSJCyL.