Los Mossos d'Esquadra han encontrado el cadáver de Janet Jumillas, la mujer de 39 años que desapareció a mediados del pasado mes de marzo. Han conseguido confirmarlo tras varias horas trabajando en la zona de El Prat, Barcelona.
La zona en la que los agentes llevan toda la tarde es, precisamente, en la que vive el presunto autor material del asesinato de Janet. El cuerpo ha sido localizado en una nave abandonada cercana a la zona y hay agentes en el perímetro de seguridad analizándolo todo para tratar de confirmar los hechos.
Según relata La Vanguardia los investigadores no tienen ninguna duda de que se trata del cuerpo de la mujer. Y a esta hora de la tarde, dos policías del cuerpo autonómico se dirigían al domicilio de la familia a comunicar que acababan de encontrarlo.
El cuerpo de la policía autonómica buscaba de forma desesperada a esta mujer, madre de dos hijos pequeños, desde el pasado día 13 de marzo.
Dos detenidos, autor y encubridor
Hay dos personas detenidas y acusadas como presuntos culpables de la desaparición y posible asesinato de esta mujer. Uno de ellos es un hombre llamado Aitor García. El otro su amigo Cristian. Todavía no se sabe de qué conocían a Janet. No eran novios. Tampoco amigos. La familia de la desaparecida dice ahora que sospechaba de él desde el primer momento. También los investigadores.
Y es que las evidencias estrechaban el cerco en torno a un área muy determinada del barrio de Riera, en Cornellà de Llobregat: en un perímetro de no más de 700 metros estaba aparcado el coche de Janet. Allí está ubicada la oficina de Hacienda donde Janet llegó a realizar una gestión, en una localización muy próxima a la vivienda de Aitor García.
Uno de ellos, Aitor, se encuentra en prisión como presunto autor del crimen. Tiene 32 años y se le acusa de homicidio con ocultación de cadáver. Al acogerse a su derecho a no declarar, las cosas han resultado más complicadas para los agentes. El otro, Cristian, también procesado, ha sido puesto en libertad provisional e imputado por un presunto delito de encubrimiento.
Fregonas manchadas de sangre
Los Mossos le tenían en mente y le vigilaban desde algunos días después de la desaparición de esta mujer. El 21 de marzo por la mañana, ocho días después de la desaparición, tanto él como el otro sospechoso, salieron de la casa de Cornellà mostrando "un comportamiento extraño". Aquel lugar era, en teoría, donde los investigadores piensan que fue asesinada.
Les vieron caminar hasta un contenedor cercano. Allí tiraron varias bolsas de basura. Los agentes siguieron los movimientos de ambos individuos, según desveló El Periódico, de forma sigilosa. Al ir a recuperar lo que habían tirado a los contenedores de la basura de la calle, los agentes encontraron tres fregonas manchadas de sangre. Era la de Janet. En otra de las bolsas hallaron el vidrio de los cristales de unas gafas del mismo modelo y de la misma graduación que las que llevaba la víctima en el momento de la desaparición.
Todo cuanto habían encontrado en aquellas bolsas pertenecía a la mujer desaparecida.