Sufrir un pinchazo o un reventón en plena travesía es una de las peores cosas que le pueden ocurrir a un conductor en la carretera. Sobre todo si está en mitad de un viaje largo, requiriendo realizar una parada en el arcén, colocar el dispositivo de seguridad, elevar el coche con el gato y cambiar la rueda. Eso teniendo en cuenta que no resulte accidentado. Con esta idea en mente, Michelín ha presentado lo que podría ser la solución a todos estos problemas: un neumático sin aire con el que los conductores podrían olvidarse de pinchazos, presiones y reventones en un futuro bastante cercano.
Uptis (o Sistema Único de Neumáticos a Prueba de Pinchazos) es el nombre con el que han bautizado a la última generación de neumáticos sin aire. La compañía especializada en fabricación de neumáticos ha prometido que sus nuevas ruedas son 100 % sostenibles, ya que están realizadas con materiales totalmente renovables o de origen biológico. Además, las posibles averías que surjan serán reparables a partir de piezas imprimibles en 3D, lo que hará que sus ruedas sean más respetuosas con el medio ambiente.
Con este prototipo, el fabricante francés pretende reducir la gran cantidad de neumáticos deteriorados o inutilizables que acaban amontonados en vertederos. Calculan que al año se desechan 200 millones de cubiertas.
Goma, aluminio y un material de alto rendimiento que denominan "resina insertada en fibra de carbono" son los grandes elementos responsables de este revolucionario producto dentro del mundo del automóvil. Al no tener cámara de aire, estas ruedas serán mucho más eficientes, ya que opondrán mayor resistencia al desgaste y más seguridad ante los pinchazos, mejorando la seguridad al volante.
Con todas estas ventajas, cabe preguntarse cómo serán capaces de aguantar el peso de un vehículo convencional. La pared lateral del neumático se ha sustituido por radios flexibles pero extremadamente resistentes. Esta idea, aunque no es novedosa (desde el año 2004 se han mostrado prototipos semejantes), se ha conseguido materializar gracias a los avances en investigación de la compañía gala.
Durante el Movin’On, la cumbre de movilidad sostenible que se celebró en Montreal (Canadá) esta semana, los máximos representantes de Michelín anunciaron que la creación de este neumático ha sido posible gracias a la estrecha colaboración que han tenido (y tendrán) con el Grupo General Motors (GM), compañía que abarca muchas de las principales marcas automovilísticas.
Por esta razón, las primeras pruebas que se harán de estos neumáticos en entornos reales se hará con varios Chevrolet Volt, un vehículo eléctrico muy similar al Opel Ampera que se vende en Europa. Los test se llevarán a cabo en Michigan (Detroit) a finales de año, y se calcula que podrían salir a la venta en el año 2024 si todo sale como esperan.
¿Por qué la prueba se hará con un eléctrico? Desgraciadamente, el destino de estos neumáticos no pasa por conectar a los coches de combustión con el asfalto, sino únicamente a coches eléctricos, compartidos o autónomos. Al menos, por el momento. Creen desde Michelín que es un hito para la "movilidad del mañana", que pasa por la sostenibilidad y el respeto al medio ambiente.
"El prototipo UPTIS se adapta especialmente bien a las nuevas formas de movilidad. Los vehículos y las flotas del mañana (coches autónomos, eléctricos, compartidos o de otro tipo) equipados con Uptis no necesitarán ningún mantenimiento relacionado con los neumáticos, lo que optimizará su productividad", consideran desde el fabricante de gomas.
Fuentes de Michelín han asegurado a EL ESPAÑOL que no solo se trata de una cuestión medioambiental o de imagen, sino que, en la etapa actual de su desarrollo, el neumático Uptis no puede soportar las velocidades o las presiones de un vehículo de combustión de alta gama. Por ello se apuesta por el eléctrico, dado que su conducción suele ser más relajada -siempre enfocada al ahorro de combustible- y sus coches suelen tener menores prestaciones en cuanto a potencia. Por estas razones, además de los propios intereses internos que puedan existir entre ambas empresas, se ha escogido el Volt.
Florent Menegaux, Presidente del Grupo Michelin, declaró sobre esta colaboración que "Uptis demuestra que la visión de movilidad sostenible de Michelin es un sueño realizable. Nuestra colaboración con socios estratégicos como GM, que comparten nuestras ambiciones de transformar la movilidad, nos permite mirar hacia el futuro hoy".
Aunque de momento solo vaya a existir la homologación sobre el coche eléctrico de Chevrolet, no sería extraño imaginar que otros modelos de gama media como el Nissan Leaf, el Hyundai Kona, el BMW I3 o el Renault Zoe también las recibieran, además de otros que están por venir, como el Peugeot e-208, el Opel Corsa-e o el Volkswagen ID.3. Sin embargo, otros de mayores prestaciones, como los de Tesla, previsiblemente se quedarán fuera. Al menos, hasta que se alcance un nivel de desarrollo viable para instalarse en coches de alta gama.