Las comisiones falleras están de luto. María Teresa González -May, para los amigos- falleció el pasado fin de semana tras una larga enfermedad. La mujer estaba muy volcada en la tradicional fiesta valenciana y pertenecía a la comisión Industria-Santos Justo y Pastor. Además, fue fallera mayor en dos temporadas: en el año 2008 y en 2015. El año siguiente compartió reinado con su sobrina, Celia, con quien mantenía una estrecha relación.
Teresa proviene de una familia muy fallera. Su hermana, Ana, es muy activa en esta festividad, concretamente en los concursos de playback, organizados por la Junta Central Fallera, donde ganó varios premios. Desde la página web de la comisión fallera han querido transmitir su pésame a la familia y a los más allegados, que están destrozados. May era muy querida en Valencia, era la protagonista de cada fiesta fallera y llevó este sentimiento hasta sus últimos días. Las Fallas le daban aliento, ganas y optimismo.
La fiesta fallera no gana para disgustos. En los últimos días, no sólo ha muerto May, sino también Mari Carmen Gómez, fallera del Pintor Maella-Avenida Francia y esposa del artista Miguel Santaeulalia. Justamente las dos muertes han acontecido cuando las comisiones se reunían para celebrar la preselección a fallera mayor.
La mujer proviene de una estirpe muy vinculada a esta fiesta. Toda la familia ha recibido premios y reconocimientos. Además, May pudo cumplir uno de sus sueños: ver como su sobrina, Celia, se coronaba como reina de las fiestas, junto a Sofía Soler. Precisamente, las familias de las trece jóvenes han sido de las primeras en acompañar a la familia. Teresa quiso siempre estar presente en los logros de su sobrina. Estaba muy orgullosa.
May, al menos, se pudo ir tras ver a su familia triunfar. Además, en un escenario de lo más especial: en el de sus queridas Fallas. Esta festividad le acompañó desde los primeros meses de su vida hasta sus últimos momentos. Fue su alivio.