Los trabajadores de Correos continúan de luto por el reciente fallecimiento de su compañera. Manuela D. C., de 39 años, se chocó frontalmente el pasado lunes con otro coche mientras hacía su ruta en Os Blancos (Orense). Era eventual y hacía solo cinco días que había comenzado a trabajar cubriendo una suplencia que iba a durar hasta el 3 de septiembre. Manuela es la tercera trabajadora eventual de Correos que ha sufrido un accidente mortal durante su jornada laboral en un año –contando desde agosto de 2018-.
El sindicato CGT apunta como posible causa de estos graves accidentes a las malas condiciones laborales de los eventuales en Correos. Por otra parte, sindicatos mayoritarios como CCOO y UGT se muestran más cautelosos y desde Correos aseguran que velan por la salud de sus empleados. No obstante, durante toda la semana se han hecho concentraciones por la compañera fallecida en las oficinas de Correos de todo el país y la empresa ha trasmitido "sus condolencias y apoyo total" a la familia de la víctima.
Esta no era la primera vez que Manuela trabajaba como cartera rural. El verano pasado y en noviembre de 2018 también fue contratada, por lo que tenía cierta experiencia sobre el terreno. Sin embargo, Xan Xove, miembro de CGT (Confederación General de Trabajadores), afirma que su sección "llevaba 4 días sin repartirse": "No podemos decir que sea la causa, pero seguro que influye", afirma.
Los tres accidentes mortales producidos desde agosto de 2018 han sido de trabajadores eventuales. El primero ocurrió el 28 de agosto en Vitoria. Irene H. N. repartía con su moto cuando fue arrollada por una furgoneta. Al igual que Manuela, tenía experiencia en el sector ya que llevaba encadenando contratos desde 2014. En esa ocasión, El Correo recogió las declaraciones de un compañero que decía que "un pequeño ciclomotor con semejante carga detrás no es apropiado para repartir en una zona con un tráfico tan pesado como Júndiz -donde ocurrió el accidente-". Aunque también admitía que es habitual tener pequeños accidentes cuando se va en moto.
Unos meses después, el 12 de diciembre, otro trabajador eventual sufrió un accidente de tráfico mortal en el casco urbano de Elorrio (Bizkaia). Felipe M. B. tenía 46 años y llevaba trabajando desde el 20 de noviembre con un contrato temporal de 2 meses. Al igual que Irene, iba en moto en el momento del accidente pero, según fuentes de CGT, estaba parado cuando todo ocurrió.
Presión de los eventuales
El motivo por el que este sindicato apunta a la precariedad del empleo en Correos como condicionante de los accidentes, es que el aumento de carga de trabajo afecta a todo el personal pero "la presión de los eventuales es tremenda" por el miedo a ser despedidos y, en ocasiones, la falta de experiencia. Fuentes del sindicato explican que a los eventuales se les "amenaza con poner una evaluación negativa de desempeño". Esto supone que pueden ser echados de las bolsas de empleo de Correos e incluso "no ser admitidos en los procesos de consolidación".
Mario Murillo, trabajador de Correos y que ha sido eventual desde 2007, asegura que ha visto a gente entrar en las bolsas de empleo y que "a los 3 días les han echado de la bolsa por no dar la talla. Pero, ¿cómo le vas a exigir lo mismo que a una persona que lleva 5 años?", se pregunta. "Ellos ahorran en vehículos, lo que a mí, salvando las distancias, me recuerda a empresas como Glovo o Deliveroo que emplean 'riders'. Es un negocio redondo".
"Luego publica Correos que ha multiplicado por ocho las ganancias. Eso gracias a la reestructuración y la precariedad de la plantilla", continúa. Con respecto al aumento de beneficio en Correos durante el primer semestre de este año, la sociedad postal atribuyó los "buenos resultados" al crecimiento de los ingresos de explotación y a la paquetería, que continuó siendo el principal motor de su facturación.
A pesar de todo, es muy difícil probar si el estrés o la sobrecarga influyeron en estos accidentes. UGT comparte que "en los últimos 10 años venimos padeciendo la precariedad laboral con un recorte de plantilla y exceso de trabajo" pero apuntan a que estas condiciones se manifiestan "en todos los ámbitos de la administración".
"Sería injusto relacionar el accidente con la precariedad laboral, pero también ignorarlo", dice María Isabel González, de la Ejecutiva de UGT Galicia. "Nosotros como sindicato denunciamos la precariedad, pero no queremos utilizar el dolor de las personas que se han marchado como reivindicación", destaca en relación a las protestas de la CGT. "Son momentos de dolor y sé que a la familia no les gusta. Las centrales sindicales tenemos nuestros mecanismos: huelgas, negociación. Es la presión que utilizamos".
Todos los sindicatos y Correos aseguran que esperarán a las conclusiones de la investigación policial. Además, en los casos de Irene y Felipe, tampoco hubo evidencias que apuntasen a la precariedad como desencadenante. CGT afirma que en el caso concreto de Felipe pusieron una denuncia a la inspección de trabajo porque "no había cumplido varios requisitos".
"Los trabajadores tienen que firmar un registro de los equipos de protección en el Portal de Mando, y no lo había hecho. Además, llevaba casco pero no las botas y el chaleco lo tenía porque se lo había dejado un compañero. Tampoco se le había dado formación específica sobre cómo llevar la moto", argumentan fuentes de CGT. Fueron citados tanto el resto de sindicatos como Correos, pero desde la empresa aseguran que el caso todavía está en fase de alegaciones, así que por el momento Correos no ha recibido ninguna sentencia condenatoria.
Los vehículos propios
Otro de los puntos que denuncia CGT es la falta de vehículos para el reparto. Muchos carteros rurales tienen que poner su vehículo propio y, debido a la gran cantidad de paquetes a entregar, este sindicato arguye que se ven obligados a poner parte de la correspondencia en el propio habitáculo del vehículo, algo sumamente peligroso en caso de accidente tal y como avisa la DGT. "En el caso de Manuela hemos constatado que tenía paquetes en los asientos", sostienen, aunque por el momento no han recibido el atestado policial por lo que se desconoce si hubo impacto con dichos paquetes o si fueron determinantes en la trágica consecuencia.
Para evitar esta situación, en marzo de 2018 la CGT presentó una petición para que Correos "provea al personal rural motorizado de vehículos propios de la empresa o vehículos en renting, para el transporte de paquetería dentro de la legalidad", puesto que en base al "artículo 101 de la LOTT (Ley de Ordenación del Transporte Terrestre)" aunque "el vehículo 'turismo' está concebido para el transporte de personas y es apto técnicamente para transportar objetos o paquetes […]" no puede transportar mercancías "por cuenta de terceros desarrollando una actividad profesional que da lugar a remuneración dineraria directa o indirectamente".
Estas exigencias las comparten otros sindicatos como UGT y CCOO, pero María Isabel González, miembro de la Ejecutiva de UGT Galicia, afirma que, aunque "es un tema que siempre se estudia en las mesas de negociación, es un camino muy largo". "Vamos paso a paso porque, ¿quién asume el coste? Correos es una empresa que se está adaptando, abriendo mercados nuevos, pero necesita una transición".
"Empleo de calidad"
Asimismo, Correos defiende que la empresa tiene una "política transversal de prevención de riesgos laborales". "Damos nuestro apoyo máximo a la familia y nos hemos puesto a su disposición. La investigación sobre las causas están ahora en manos de las autoridades competentes", cuentan fuentes de la empresa, que también consideran "comprobable" su compromiso con la seguridad: "Se puede ver que el índice de incidencias de siniestralidad de Correos ha bajado un 8,21 % en todo el Estado".
Igualmente ocurre con la "apuesta por la calidad del empleo": "Se ha hecho un examen de consolidación de más de mil plazas. La mejora en la calidad del empleo se está materializando con la consolidación", explican. En este sentido, en diciembre de 2018 -una semana después del accidente de Felipe-, Correos firmó un acuerdo refrendado por CCOO, UGT y CSIF y Sindicato Libre por el cual se comprometían a crear más de 11.000 empleos fijos y mejorar los salarios.
También se pactó, en un periodo de 2018 a 2020, reducir en un 8 % la cantidad de trabajadores eventuales. Actualmente, la media de temporales es del 30 %, llegando a alcanzar picos de más del 40 % en épocas como el verano, según la CGT. La empresa ya ha publicado las bases de una convocatoria de más de 4 mil plazas, aunque aún no se ha iniciado el plazo de inscripción, una cantidad insuficiente para CGT y un primer paso para el resto de sindicatos.
Correos se justifica en que los procesos para sacar las convocatorias a puestos fijos requieren tiempo, pero un hecho en el que todos coinciden es la ausencia de personal. En cuanto a los accidentes mortales, los sindicatos mayoritarios evitan relacionarlos con la precariedad mientras que CGT apunta claramente al estrés y el exceso de trabajo al que los compañeros, sobre todo los temporales, se ven sometidos. No obstante, debe ser la Policía la que determine las causas concretas que los provocaron.