Miryam contrajo matrimonio el 3 de agosto de 2013 en la Iglesia de Rollán (Salamanca). Un enlace con más de 80 invitados y que se convirtió en el día más especial de su vida. Hasta ahora. Por motivos que se desconocen, el secretario del ayuntamiento -de por aquel entonces- nunca inscribió este matrimonio en el Registro Civil de la localidad salmantina. Pero ellos nunca fueron conscientes de lo que estaba sucediendo y mucho menos se lo imaginaron cuando recibieron, días después de la boda, el libro de familia sellado y firmado.
La pareja llevan seis años casados por la Iglesia, pero solteros legalmente. "Estamos en un limbo", afirman a La Gaceta de Salamanca. Además, durante todo este tiempo, nunca saltaron las alarmas. "Lo primero que haces es pedir explicaciones, que nadie te da porque la actual secretaria del ayuntamiento de Rollán no sabe qué pasó y no sabe qué tiene que hacer. Lo que sí nos confirmó es que en el tomo 18 página 40 no aparecemos nosotros, sino otra pareja que se casó años después", explican al citado medio.
Pero Myriam y su marido ya han intentado revocar la situación. Acudieron al Registro Civil de los Juzgados de Colón, pero no consiguieron formalizar su relación, ya que no consiguieron declaraciones testificales. "Yo no voy a estar molestando a nadie ahora, seis años después, para que vengan de testigos cuando ha sido un error de ellos", comenta la mujer.
"Me han hecho firmar un documento de que estábamos allí y que me negaba a llevar testigos. Y yo he firmado otro explicando que he llevado documentos probatorios de mi boda. Ahora toca esperar. Aunque nos han dicho que sí nos pondrían fecha de 2013, será el juez el que decida si autoriza a que nos casen sin los testigos y si no lo autoriza, tendré un libro de familia donde sólo aparecerán los niños y no sabremos qué estado civil tenemos", concluye Miryam.