El cojín lumbar que alivia el otro dolor de Felipe VI: solo por 10 euros para un problema de quirófano
El monarca se sometió a un tratamiento con agujas en julio por sus molestias en la espalda, pero todo apunta a que tendrá que operarse de nuevo.
8 enero, 2020 16:51Noticias relacionadas
Los problemas lumbares del rey Felipe VI son más que evidentes. Si ya hizo muestra de ello en la final de la Copa Davis entre España y Canadá, donde se pudo ver al monarca con gesto de dolor y llevándose la mano a la parte baja de la espalda. Ahora, en su última imagen con la presidenta del Congreso de los Diputados, Meritxell Batet, puede advertirse como el Rey necesita incluso un cojín lumbar para la silla de su despacho en el Palacio de la Zarzuela.
En la instantánea, difundida por la Casa Real, el Rey firma en presencia de Batet el Real Decreto por el que nombra presidente del Gobierno a Pedro Sánchez. Un asunto que junto a la cuestión catalana y la inestabilidad política en España también preocupan al Rey. Entre todos los enseres que tiene en su despacho, lo que más ha destacado en esta ocasión no han sido las fotos con la Reina Letizia, sus hijas, la Princesa Leonor y la Infanta Sofía; tampoco sus documentos de Estado o los pisapapeles, sino el respaldo ergonómico lumbar que Felipe VI necesita para trabajar —y descansar la espalda—.
Esta almohada de malla, según ha podido saber EL ESPAÑOL, se ajusta suavemente a los contornos del cuerpo del Rey y le permite tener una postura adecuada cuando se sienta, lo que aliviaría, al mismo tiempo, los problemas de columna vertebral que Felipe VI lleva arrastrando desde hace algunos años. Este cojín lumbar, además, permite una buena circulación del aire para mantener una temperatura corporal correcta. Se puede comprar por 9,99 euros en Amazon y el envío es gratuito.
Su operación
La espalda es el talón de Aquiles de Felipe, que —como sus padres— siempre ha tenido una salud envidiable. No es la primera vez que sufre este tipo de dolores. De hecho, esta dolencia fue la que le llevó el año pasado a la Clínica Ruber Internacional. Fue el 14 de julio cuando se sometió a un tratamiento de radiofrecuencia por aguja, conocido como rizolisis, con el que intentó paliar las molestias. Al tratase de una técnica ambulatoria el Rey no tuvo que ser hospitalizado ya que sólo precisó anestesia local y un poco de reposo.
"Está muy fastidiado. Sufre desde hace años de las lumbares y aún mas con los viajes que ha tenido últimamente. En menos de un mes estuvo en Oviedo, Barcelona —con la tensión que supuso— luego Cuba y después se fue a Estados Unidos, para una visita relámpago a Washington. Así que la espalda le está pasando la lógica factura a semejante paliza", comentaba a EL ESPAÑOL una persona cercana al Monarca.
Aún así, en Zarzuela no le quisieron dar demasiada importancia a la intervención de Felipe VI, y la prensa se enteró por una filtración. No obstante, es evidente que el dolor de espalda del Rey ha vuelto e incluso se ha podido acentuar con el estrés que ha supuesto para él la elección de un presidente del Gobierno, tras la ronda de contactos que ha mantenido con todos los líderes políticos.
"Cuando pasa temporadas de mucho viaje y estrés, se resiente. Ahora está en pleno dolor y pensando con el médico de Zarzuela qué decisión tomar al respecto porque la rizolisis ya ha quedado en nada”, añade la misma persona. En este sentido, es bastante probable que Felipe VI tenga que someterse de nuevo a una operación por su dolencia lumbar.
Fortalecer la espalda
Mientras, Felipe intenta continuar con su trabajo pero ha añadido una vez a la semana, como mínimo, la visita de un fisioterapeuta que intenta evitarle con ejercicios y tratamiento que tenga que volver a pasar a por el quirófano. “Pero la cosa la ven muy negra porque no mejora mucho. Ha tenido que dejar hasta ciertos deportes como el squash durante una temporada, cosa que le encanta”, confiesas desde Zarzuela.
Ahora, ha cambiado su rutina y su tiempo en el gimnasio está más dedicado a fortalecer los músculos de la espalda que a ponerse en forma. El rey ha introducido, por consejo de su mujer, la figura del entrenador personal que sigue un plan acordado con el fisioterapeuta. Bajo la supervisión del equipo médico de la Clínica Ruber Internacional, capitaneado por el doctor Del Corral Salas, amigo personal de los Reyes;Felipe VI intenta cada día con sus ejercicios evitar pasar por el quirófano, porque la siguiente vez ya no se trataría de algo ambulatorio, ya que la rizolisis sólo le ha paliado el dolor durante un tiempo.