El padre de la niña aparecida muerta en una habitación del Hotel Los Bracos (Logroño) había denunciado su desaparición a la Guardia Civil de Haro (La Rioja). Todo indica, por tanto, a que la menor podría haber fallecido de forma violenta. Poco a poco, se van conociendo más detalles y todo indica que lo que parecía un misterio o una muerte natural puede acabar convirtiéndose en un crimen.
La alerta la dio un vecino, sobre las 9:30 horas, al ver que una mujer parecía querer suicidarse. Inmediatamente, la Policía llegó al hotel para ver qué ocurría. Allí, se encontró a esa mujer, la madre de la niña, sentada en el alféizar, con varios cortes. A su vez, encontraron a la menor, tapada con una manta.
Tras contemplar la escena, la Policía procedió a llevarse a la madre en una ambulancia. Ella salió por su propio pie y se metió dentro del vehículo sin oponer resistencia para ser trasladada al Hospital San Pedro.
Todo indica a que se trata de un crimen porque los padres estaban en una crisis de pareja. De hecho, la principal vía de investigación se basa en analizar las cartas encontradas de la madre, que podrían acabar incriminando a la mujer.
El padre denunció la desaparición de su hija a media tarde del domingo y la madre llegó con la hija a última hora al Hotel Los Bracos de Logroño. La muerte, por tanto, se podría haber producido esta noche.
Tras llevarse a la madre, la Policía científica y el jefe superior de la Policía se quedaron en el interior del hotel, en la habitación, analizando qué podría haber pasado. Posteriormente, el coche fúnebre entró en el parking del hotel y se llevó el cadáver de la niña.