Lección básica de teoría de la comunicación: para que un mensaje cale hay que repetirlo cuantas veces haga falta. El mensaje fundamental que nos ocupa no le va a gustar: estas navidades ni pueden, ni deben ser normales. Por eso los expertos no se cansan en repetir las medidas que hacen falta para prevenir una nueva ola de contagios por coronavirus. Bastan un par de semanas de descuidos colectivos para que la situación dé un vuelco de nuevo.
Un equipo de 12 expertos de cuatro países -todos nombrados al final del texto- ha elaborado la guía definitiva de prevención, de la que hemos extraido 30 medidas para unas navidades seguras, aunque eso implique pasarlas más solos que otros años.
Ante todo hay que recordar una y otra vez que las 3 M (mascarilla, manos-higiene, Metros-distancia); y, evitando las exposiciones contraproducentes, las 3 C (lugares cerrados y poco ventilados, concurridos y contactos cercanos sin respetar distancia). Las siguientes consideraciones están destinadas a complementar, y no a reemplazar, cualquier normativa de salud y seguridad de las autoridades sanitarias.
Consideraciones generales
Es imprescindible que asimile los siguientes factores para poder comprender en plena dimensión nuestras recomendaciones. Seguirlas o ignorarlas le puede costar a usted o a un ser querido la vida:
1. Estas navidades ni pueden, ni deben ser normales. Tenemos que recordar que estamos en plena pandemia y no intentar continuar como si no pasara nada. Celebrar las fiestas porque 'tenemos que seguir haciendo nuestra vida' se traducirá en más hospitalizaciones y más muertes, y especialmente de nuestros mayores.
2. Querer salvar la temporada de verano fue lo que precipitó el inicio temprano de la segunda ola. No cometamos el mismo error ahora.
3. Las situaciones más peligrosas son reuniones con personas con las que habitualmente no convives en espacios cerrados durante horas y sin mascarilla. Es exactamente lo que pasa en las cenas de Navidad. Las reuniones en los hogares se están convirtiendo en la fuente más grande de transmisión del coronavirus, con las fiestas navideñas esto se podría agravar.
Recomendaciones generales
Las medidas de protección tienen que ser las mismas ahora que en la primera ola: distancia, mascarilla, lavar manos... Las condiciones no han cambiado. Llevar la máscara de vez en cuando, sin ajustar bien para que nos escuchen, es como no llevarla.
4. El 80% de los pacientes Covid-19 hospitalizados tenían déficits en Vitamina D, reforzar el sistema inmune con alimentos ricos en vitaminas es beneficioso.
5. Dieta sana, la nutrición equilibrada refuerza el sistema inmune y contribuiría a reducir la infección de la Covid, la progresión de la enfermedad y a mejorar la recuperación.
6. Recuerde: el virus sigue existiendo y no ha bajado su infectividad, no hay vacunas aún, no hay medicamentos realmente eficaces, el virus se transmite por gotas y aerosoles y los espacios cerrados fomentan el aumento de aerosoles, la convivencia de la gripe estacional y la Covid-19 aumenta la mortalidad.
Antes de reunirnos
La prevención es la clave para evitar los contagios. Siguiendo unas pautas muy claras, podremos reducir el riesgo, para nosotrs y para los demás.
7. Las compras de regalos deben ser online o anticipadas para evitar aglomeraciones y reducir posibilidades de llegar a la reunión contagiados.
8. Si quiere entregar algún regalo, mejor enviarlos por mensajería y desinfectarlos a la recepción.
9. En caso de vivir en la misma ciudad los intercambios de regalos se pueden hacer en espacios abiertos como parques y entre un número controlado de personas protegidos por mascarillas y guardando distancias.
10. Anular las comidas de empresas, amigos, compañeros de actividades, etc.
11. Fomentar los envíos de comida a domicilio, a ser posible, a empresas locales que se han adaptado y a las que podemos ayudar en su maltrecha economía sin necesidad de estar en sitios cerrados durante largo tiempo, sin mascarilla y con personas ajenas.
12. Favorecer los paseos al aire libre como forma de socialización. Hay que cambiar el estilo de anterior donde sólo se entiende el intercambio social como el consumo de bebidas en un sitio cerrado y lleno de personas.
13. Cuando estamos en privado, debemos tomar las mismas precauciones que tomamos en público.
14. Empecemos a pensar que las burbujas deben ser constituidas por los miembros más importantes, no dejando a nadie solo pero sin invitados accesorios. Hay que priorizar la prevención de riesgos en las personas que quieren estar juntas en las fiestas. Por ello los miembros de dichas burbujas deben de evitar exponerse a situaciones de riesgo en los 10-14 días anteriores a la celebración. Sería aconsejable realizarse una prueba de saliva de antígenos o anticuerpos el mismo día previamente a las reuniones. Una vez finalizada la reunión no ir a otras tertulias a seguir con más celebraciones.
15. Se aconseja la utilización de medidores de CO2 en ambientes cerrados para controlar la calidad de la ventilación. Como regla general siempre que este pase de 800 ppm, deben abrirse ventanas y ventilar la habitación.
Una vez reunidos
Si es posible, debemos definir con antelación un grupo burbuja permanente y cerrado en el que tengamos la seguridad que los demás miembros no están contagiados. Cuando se reducen los contactos sociales, el contagio baja, esto está clarísimo. Y cuando nos relajamos, vuelven a subir.
16. Reduciendo el número de invitados no convivientes a lo indispensable y, a pesar de todo, si se hace, hay crear un espacio seguro para que la gente se siente e interactúe a distancia y usen mascarillas dentro de la casa. Por ejemplo, un salón con sillas distanciadas y ventilado.
17. En caso de reuniones con no convivientes, tratar de hacerlas en espacios abiertos y reducir el tiempo de dichas reuniones por ejemplo a una hora. Particularmente si existen personas de riesgo en casa (ancianos, diabéticos, cardiacos, etc.) tratar de prevenir contagios mediante aislamientos voluntarios de los visitantes de, al menos, diez a catorce días antes de las reuniones. En caso de no poder aislarse, considerar la realización de test de diagnóstico según recomendaciones de esta misma guía.
18. Evitar visitar a alguien con un mayor riesgo de enfermarse gravemente por el COVID-19. Esta enfermedad puede afectar a cualquier grupo de edades pero observamos una curva ascendente a partir de los 40 años que alcanza picos máximos en personas ancianas y aquellos que tienen otras patologías.
19. Las reuniones que duran más tiempo plantean más riesgos que las más breves. Estar a menos de dos metros de alguien que tiene Covid-19 durante 15 minutos o más aumenta significativamente el riesgo de contagiarse. Al acabar la reunión, hay que salir de la casa respetando, una vez más, las distancias de seguridad.
20. Limitar las reuniones no responde a un capricho del Gobierno ni de las autoridades autonómicas. Los encuentros con muchas personas suponen más riesgo comparadas con las reuniones con menos personas.
Comportamientos previos
21. Si las personas que vienen a reunirse con nosotros han venido respetando consistentemente las normas de prevención, incluido mascarillas, higiene de manos, distanciamiento social y evitando haber permanecido en lugares cerrados, concurridos y con contactos cercanos presentarán menos riesgos que aquellos que no se adhirieron al seguimiento de las medidas de seguridad pero ninguno es de fiar excepto haya hecho cuarentena más controles analíticos según recomendaciones de esta misma guía.
22. Como se puede imaginar, las reuniones con más medidas de prevención (mascarillas, distancia física, higiene de manos y ventilación) serán más seguras.
23. Reducir o eliminar el consumo de alcohol u otras sustancias que puedan alterar el juicio y dificultar la práctica de las medidas de seguridad de Covid-19.
Como nota adicional, se aconseja a todos los asistentes al encuentro que tengan un plan de dónde guardar su mascarilla mientras comen y beben. Deben guardarla en una bolsa seca y transpirable (como una bolsa de papel o de tela de malla) para mantenerla limpia entre usos.
En la mesa y sobremesa
Una vez más: lo mejor es no tener invitados ni acudir a reuniones donde usted u otros no pertenezcan a la misma unidad familiar/burbuja.
24. Gel nada más entrar en casa y lavado de manos. Dejar zapatos en la entrada. Lógicamente obviar besos, abrazos y contacto personal directo.
25. El lugar de reunión debe estar ventilado y es recomendable mantener corrientes de aire cruzadas, abriendo ventanas y puertas, para maximizar los cambios de aire en la estancia en la que vayan a reunirse si las temperaturas así lo permiten. Más vale estar bien arropado durante una cena que posteriormente en pijama en la UCI de un hospital.
26. Si la ventilación es deficiente es recomendable añadir un filtro HEPA cuya tasa de renovación del aire se adecúe a las medidas de la estancia -ver calculadora aquí- para añadir una capa de protección extra. El uso de dicho filtro no exime de ventilar y utilizar mascarillas durante el mayor tiempo posible.
27. Debe usar la mascarilla en todo momento excepto cuando va a comer o beber. Los invitados que no pertenecen a la unidad de convivencia deben sentarse en la mesa respetando físicamente una distancia de 1,5-2 metros respecto a los demás. No compartir platos. Raciones individuales repartidas en platos (por ejemplo, cada uno tenga su propio plato de aceitunas o entremeses). No introducir los dedos ni los cubiertos en plato común ni ajeno.
28. No brindar con choque de vasos. Los bordes de nuestros vasos están potencialmente contaminados.
29. No cantar, gritar o hablar en voz alta. Reducir el nivel de ruido (por ejemplo, música a nivel elevado) con objeto de no tener que subir el tono de voz. Acortar el tiempo de visita.
30. Como puede observar son recomendaciones estrictas pero que pueden salvar vidas. Si usted se ve incapaz de cumplirlas lo mejor que puede hacer es evitar la susodicha visita o cena familiar.
En conclusión
Ante todo tenemos que ser prudentes, conscientes del problema, pacientes y no bajar la guardia. Tenemos la responsabilidad social de intentar evitar el máximo de muertes, incluida la suya, antes de que lleguemos a la inmunidad. El fin de la pandemia está aún lejos. Es cierto que pronto habrá una o más vacunas aprobadas, pero queda mucho hasta que se puede vacunar una parte importante de la población y conseguir la inmunidad de grupo necesaria para que esto acabe.
Este informe ha sido firmado por estos 12 expertos:
José Luis Jiménez, profesor de la Universidad de Colorado (EE UU) experto en aerosoles.
Eduardo López Collazo, director científico de Investigación Sanitaria del Hospital de La Paz, físico nuclear y doctor en Farmacia.
José María Martín-Moreno, catedrático de Medicina Preventiva y Salud Pública por la Universidad de Valencia.
Salvador Macip, investigador en la Universidad de Leicester (reino Unido) y doctor en Genética Molecular.
Estanislao Nistal, virólogo y profesor de Microbiología de la Universidad CEU San Pablo.
Sonia Villapol, profesora de Neurocirujía e investigadora en el Methodist Hospital Research Institute de Houston (EE UU) y en la Universidad de Cornell, en Nueva York.
Laurie Ann Ximénez-Fyvie, jefa de laboratorio de Genética Molecular de la Universidad Autónoma de México.
Pablo Fuente, investigador del Covid-19 y experto en estrategias preventivas.
Joan Miquel MJ, experto en estrategias de márketing y comunicación. Director de La Reunión Secreta.
César Carballo, médico de Urgencias en el Hospital Ramón y Cajal de Madrid.
Nicolás Rodríguez, analista de big data.
José Miguel Gaona, neuropsiquiatra forense.