A prisión uno de los dos detenidos en Sevilla por el reto viral de la 'caza al pijo' tras la última paliza

La Policía Nacional ha detenido a dos varones de 17 y 19 años por su presunta participación la noche del pasado viernes 30 de abril en una agresión en Sevilla para robarle un altavoz portátil bluetooth a un menor de edad. Los hechos ocurrieron en el barrio hispalense de Nervión. 

La víctima quedó semiinconsciente tras la agresión. Fue trasladada de urgencia a un centro hospitalario, donde estuvo cinco horas sometiéndose a distintas pruebas médicas. Según denuncian desde hace días los padres de algunos menores de los barrios con mayor renta de Sevilla, esta última agresión obedece a la existencia de un supuesto reto viral denominado "caza del pijo".

Éste consistiría en que grupos de jóvenes procedentes de barrios periféricos de Sevilla se desplazan hasta otros de rentas más altas, como Nervión, Los Remedios o El Porvenir, e insultan, agreden y roban sus móviles y bicicletas a otros menores de edad.

El objetivo sería "conseguir el mayor número posible de peleas", dicen los padres de los chavales afectados, y así lo han trasladado ya a las autoridades policiales.

No hay repunte de denuncias

Fuentes oficiales de la Policía Nacional en Sevilla admiten que "se ha recibido la queja por escrito por parte de los padres", aunque subrayan que no existe "un repunte alarmante de denuncias en estos últimos días".

"Hay algunas denuncias en el distrito de Nervión de esta índole, las cuales se están investigando. Tan pronto se reciba información al respecto, se informará de manera oficial", han añadido. 

Los hechos por los que un varón de 19 años ha acabado en prisión sucedieron sobre las 21.30 horas del pasado viernes. Un grupo de jóvenes de distintas edades -tanto menores como mayores de edad- se encontraban sentados en el banco de un parque escuchando música con un altavoz portátil cuando se les acercó otro grupo de chicos con la intención de robárselo.

Según una nota difundida por la Policía Nacional, los agresores les acorralaron y les empujaron. El dueño del objeto electrónico cayó y, una vez en el suelo, recibió patadas en la espalda y en el rostro.