Juan Camilo Londoño Cardona, el colombiano de 19 años detenido por haber agredido brutalmente a un sanitario en el metro de Madrid, tenía que estar fuera de España desde febrero. Fue entonces cuando un magistrado de Palma de Mallorca ordenó una orden de expulsión del país.
Tal y como habíamos explicado, el agresor tenía requerimientos judiciales de, al menos, dos tribunales: uno de Alicante y otro de Baleares. Además, un juez de la capital mallorquina ordenó que fuese expulsado del país donde vivía como okupa, después de que su propia familia le echase de casa, tal y como contaba Última Hora.
El magistrado balear, Antoni García, indicó en un auto que Juan Camilo Londoño, de 19 años, no tenía domicilio fijo en Mallorca y carecía de arraigo en el país. "En este supuesto no permiten garantizar que vaya a cumplir con la obligación de residir en un sitio determinado o a presentarse periódicamente ante una autoridad administrativa".
El joven manifestó en el juzgado de guardia, el 18 de febrero, que no residía de okupa en una fábrica abandonada. Reconoció que no tenía permiso de residencia en España y que realizaba trabajos esporádicos sin contrato.
Juan Camilo explicó que vivió en Alicante con una tía suya hasta que lo echó de casa. "Se deduce que el joven no tiene arraigo en este país. No tiene familia puesto que al parecer, la única que tenía era su tía, que además lo sacó de casa y que vive de okupa donde puede", añadió el juez en el auto.
Interno en un CIE
El agresor del sanitario en el Metro de Madrid pasó un mes en un Centro de Internamiento de Extranjeros de la capital hasta que quedó en libertad por orden del Juzgado de lo Contencioso número 3 de Palma.
El 1 de julio del año pasado, Juan Camilo fue detenido en la Estación Intermodal de Palma con móviles robados, una cámara de fotos y una pistola simulada. Los vigilantes de seguridad lo sorprendieron intentando forzar un torno de la estación y avisaron a la Policía Nacional, que lo detuvo.
El juez de Instrucción número 46 de Madrid, en función de guardia de detenidos, ordenó el pasado el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del joven, debido a la agresión que cometió contra un sanitario que le pedía que se pusiera la mascarilla en el metro.
Tras haberse viralizado el vídeo de la agresión, y con el propósito de intentar evitar la detención y tratar de pasar desapercibido, se tiñó el pelo y se escondió las características dilataciones que lleva en las orejas. Además, intentó escapar de su casa cuando la policía fue a apresarlo. Que los agentes le sorprendieron recogiendo sus enseres y que intentaba marcharse de allí para ocultarse en otro lugar.
El detenido será investigado por la supuesta comisión de un delito de lesiones agravadas y, además, el Juzgado tomará declaración al implicado y a cinco testigos de los hechos el próximo 8 de septiembre, según ha informado el TSJM. AHora se encuentra detenido en el penal de Soto del Real.
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