Un joven de 23 años permanece ingresado en el vizcaíno Hospital de Cruces en estado grave tras recibir una paliza grupal la madrugada el pasado domingo en la localidad de Amorebieta (Vizcaya), según ha informado el Departamento vasco de Seguridad. La víctima, que responde a las iniciales A.I., fue linchada varios minutos con botellas, palos y puñetazos por un grupo de "entre veinte y treinta chavales" de entre 16 y 20 años, según el relato de sus amigos.
La Ertzaintza, en colaboración con la Policía local de Amorebieta, trabaja en la identificación y localización de los autores de la paliza a este joven, vecino de Lemoa, aunque aún no se han producido detenciones. Los primeros indicios, no obsante, apuntan a que el joven iba con su pandilla y participaba en un botellón; cuando los agresores intentaron robar un móvil a alguien de su grupo, él se puso en medio y en ese momento comenzó la paliza.
Los hechos ocurrieron alrededor de las tres de la madrugada en un parque de la localidad, en la zona de Jauregiberrian de Amorebieta, cuando se inició el altercado, en el que el herido empezó a recibir diversos golpes por parte de un grupo de jóvenes, mientras se grababa la agresión en un vídeo que ha sido difundido en las redes sociales.
Quedó inconsciente a causa de los múltiples golpes recibidos en la cabeza y fue evacuado en ambulancia al Hospital de Cruces.
Varios cientos de vecinos de Amorebieta se concentraron anoche para protestar por esta agresión, convocados por las asociaciones de hosteleros de esta localidad vizcaína.
La Ertzaintza, en colaboración con la Policía Municipal de Amorebieta, mantiene abierta una investigación en relación a los hechos, para encontrar a los agresores, de entre 16 y 20 años.
Urkullu: "Es intolerable"
El lehendakari, Íñigo Urkullu, se ha referido a este episodio violento durante su visita al Centro Vasco de Inteligencia Artificial en el Parque Tecnológico de Álava, en Vitoria. El mandatario vasco ha calificado de "inaceptable e intolerable" la agresión grupal y ha asegurado que hay "comportamientos y actitudes inaceptables" que "sobrepasan cualquier límite tolerable".
Por ello, ha afirmado que se necesita "el máximo compromiso social para erradicar que hechos así, que avergüenzan como sociedad, no vuelvan a repetirse". En este sentido, ha apelado a realizar una reflexión sobre estos "comportamientos individuales, colectivos, comportamientos sociales".
Tras expresar su solidaridad con la familia y allegados del joven agredido, ha asegurado que se trabaja para detener, "cuanto antes, a los responsables de estos hechos".