Reinventarse o morir. Fueron las dos opciones entre las que se debatió Inés Ruiz, en 2015. Por aquel entonces, esta alicantina, licenciada en Traducción e Interpretación, tenía 29 años y trabajaba como profesora de español en la Universidad de Cambridge (Reino Unido). Sin embargo, el destino quiso que se cruzase allí con el que poco después se convertiría en su marido, un militar de las fuerzas aéreas estadounidenses.
El trabajo de su pareja suponía que ambos tendrían que trasladarse continuamente de un país a otro y sin mucha antelación. Así que esta docente, enamorada, aceptó y dejó su trabajo en la universidad para mudarse a EEUU, tras una breve aunque brillante carrera académica. Que dejase su empleo, no obstante, no fue una derrota ni mucho menos para Inés Ruiz, sino el aliciente para construir algo mucho más grande poco después.
Tenía dos alternativas: dejar de trabajar o buscar una forma distinta de llevarlo a cabo. Eligió la segunda, claro. ¿Y qué hizo? Fundar una empresa que, viviese donde viviese, siempre podría llevar en la maleta. Una escuela online para formar a profesores de español por todo el mundo, ELEInternacional. Para alcanzar dicha idea, esta alicantina pensó en varios escenarios.
El primero, que en España no se formaba a los profesores para dar clase de castellano en el extranjero. Sí, el grado de Filología existía y existe pero, según cuenta esta emprendedora en una entrevista con EL ESPAÑOL, el objetivo de las universidades españolas es enseñar a los titulados a impartir el idioma dentro de nuestras fronteras. "Yo empecé a dar clases cuando era más joven. En la universidad te enseñan mucha teoría, pero nadie te dice qué debes hacer cuando te pones delante de 30 alumnos; por eso pensé que esta escuela me daría la posibilidad de enseñar a los profesores todo lo que a mí no me habían enseñado".
El segundo, que cada vez era mayor el porcentaje de españoles, titulados en distintas carreras, que ante la falta de trabajo se planteaba ir a vivir a otro país. "¿Acaso había mejor forma de introducirse en el mercado laboral extranjero que enseñando español? Es algo con lo que puedes empezar cuando llegas a un país nuevo. Hacerlo, después, te permite ir escalando a otros puestos", prosigue.
Los datos, además, hablaban por sí solos. Dejando a un lado que más de 585 millones de personas, el 7,5% de la población mundial, habla español, según las últimas cifras del Instituto Cervantes; la demanda de estos profesionales especializados en la docencia española en países de África y Asia era cada vez mayor. Nada entonces podía salir mal e Inés Ruiz, que además tenía un máster en e-learning [aprendizaje online], se lanzó con todo el equipo. Nacía ELEinternacional.
Pandemia y éxito
Los comienzos, no obstante, como le ocurre a la mayoría de empresas, no fueron fáciles. Tras conseguir que la Universidad Europea Miguel de Cervantes certificase los títulos de formación que iban a impartir; en su caso, de tres tipos: enseñanza general en español, online y especializada en niños. La CEO y su equipo de colaboradores tuvieron que lidiar contra ese sentir generalizado, instalado hasta antes de la pandemia, de que lo online era peor que lo presencial. Eso sí, no se rindieron y poco a poco fueron ganando terreno e incorporando a nuevos alumnos-profesores.
Lo mejor, no obstante, estaba por llegar. Hasta finales de 2019, Inés Ruiz había logrado formar a 7.000 profesores con sus cursos. Entonces, llevaban cuatro años en el mercado. Eran una empresa, digamos, pequeña. Y, de pronto, llegó el coronavirus y el confinamiento de la población. Algo que paró prácticamente todo el mundo, pero que a esta alicantina, aunque suene mal, le vino como anillo al dedillo.
Las inscripciones comenzaron a dispararse hasta llegar a los 20.000 alumnos. Y eso hizo que en plena crisis, mientras otras escuelas clásicas de formación cerraban, ELEinternacional aumentase su facturación en más de un 65% alcanzando la cifra de un millón de euros. El negocio se expandía y eso también implicaba la necesidad de más trabajadores. Ahora, ya son 40 los expertos que, repartidos en los cinco continentes, enseñan cada día en esta escuela online a miles de profesores. "¡Quién nos iba a decir a nosotros hace seis años, cuando nos consideraban unos bichos raros, que ahora seríamos una de las academias más potentes de enseñanza para profesores!", exclama Inés Ruiz, en conversación con este periódico.
Con el coronavirus, la demanda creció exponencialmente. Sobre todo, explica la CEO, en el caso de los millennials, es decir, entre los jóvenes de entre 25 y 35 años. "Hay mucha demanda, sobre todo de perfiles que tienen carreras muy distintas, que están en el paro y quieren reinventarse, ya sea viviendo en España o en el extranjero. Con la pandemia, por otro lado, también ha habido mucha gente que ha pensado en la opción de ser profesor de español online. Es normal que se lo planteen. Muchos profesores se quedaron en el paro y qué mejor que formarte y utilizar tu propia lengua para trabajar...", apunta Ruiz.
Su método
Aunque en ELEinternacional tienen a expertos repartidos por medio mundo, el 60% de los alumnos-profesores son españoles y el resto latinoamericanos, de México y Colombia.
Pero ¿por qué ha tenido tanto éxito esta escuela de idiomas online? Se preguntarán, tal vez. Principalmente, por su forma de enseñar. El profesor se adapta al alumno, y no al revés. "Estamos en continua comunicación con ellos, tenemos una especie de red social donde pueden plantear dudas o problemas que les surjan, una vez, por ejemplo, que comiencen a trabajar. Si vemos que necesitan algo o encuentran algún obstáculo, les damos soluciones de la mano de los expertos de ELE", sostiene esta docente alicantina.
Entre tanto, otra de las diferencias es que los cursos no son impartidos únicamente por un experto, sino que se van combinando en función del módulo que se enseñe, y siempre desde un punto de vista más práctico. Los profesores no dan clases magistrales de gramática, sino que te enseñan a enseñar gramática, valga la redundancia. Además, cuando finaliza el curso —de 150 horas y cuyo precio es de 710 euros [497, con beca— la escuela también proporciona bonus a los profesores con vistas a su futuro laboral: esquemas, clases preparadas, casos prácticos...
"Si no hubiese llegado el coronavirus, seguiríamos luchando contra la barrera de lo online. La empresa se ha convertido en una bestia, hemos avanzado diez años del tirón", concluye Inés Ruiz.