Kristian y Amantia Toska llevan en paradero desconocido desde el 17 de enero de este año. Los niños, de 11 y 10 años, respectivamente, fueron secuestrados por su padre un fin de semana que a este le tocaba cuidarlos. El hombre se los llevó de Hamburgo (Alemania) a Tenerife y su madre no los ha vuelto a ver. A finales de enero, la pequeña Amantia se las ingenió para hablar con una amiga de su madre. Le dijo que estaban en una isla donde todo el mundo hablaba español. Fue la primera pista que encauzó la investigación.
Durante el mes de junio, el padre se puso en contacto con la madre al ver que ella se afanaba en buscarlos y estaba difundiendo sus rostros. Ahí empezaron las amenazas. “Le dijo que si va a la policía la matará a ella, a su familia y a los niños. Que no los volverá a ver”, explica Joaquín Amills, presidente de SOS Desaparecidos. En una de esas conversaciones, el padre confiesa a su exmujer que, efectivamente, están en Tenerife. Ahora mismo pesa una orden de detención sobre el hombre.
“La madre ha puesto una denuncia en la Policía Nacional. El caso está en manos del juzgado de violencia de género”, asegura Amills. Es el mismo tribunal que investiga el caso de Tomás Gimeno. El paralelismo es notable. En ambos casos es un padre que ha secuestrado a dos hijos menores y, además, ha ocurrido en Tenerife.
Por suerte para esta familia, los casos no son idénticos, ya que Gimeno asesinó a sus hijas a las pocas horas de apartarlas de su madre. Este hombre, en cambio, ha mantenido a sus hijos con vida y, pese a las amenazas, nada hace indicar que los niños hayan sufrido daños. Por eso, Amills insiste en que “es urgente” dar con ellos y pide la colaboración ciudadana.
Kristian tiene 11 años, el pelo castaño y corto, y usa gafas graduadas. Amantia tiene 10 y el pelo rizado y castaño. Del padre no ha trascendido aún su aspecto. Solo se sabe que es un hombre de 45 años de origen albanés y que es muy violento.
Episodios de violencia
El matrimonio estaba separado desde el año 2013. La madre tenía la custodia completa por los constantes episodios de violencia protagonizados por el padre, tal y como consta en el acta de divorcio. “Tenía un régimen de visitas de fines de semana alternos”, explica Amills. Fue en uno de esos fines de semana cuando aprovechó para llevárselos.
“Sabemos que está en Tenerife porque hay constancia de que ha cogido varios vuelos de Tenerife a Madrid, y de vuelta”. Aunque esos viajes siempre los ha hecho solos. También SOS Desaparecidos ha recibido muchas llamadas que sitúan al padre con los niños en un determinado lugar a una determinada hora. Todas en Tenerife.
La madre actualmente se encuentra también en la isla intentando dar con sus hijos. El último contacto que tuvo con el secuestrador fue el pasado día 10 de agosto. En la última llamada, el secuestrador no cejó en sus amenazas.
Ese es un segundo paralelismo con Tomás Gimeno: las amenazas. Cuando el parricida secuestró a Anna y Olivia le confesó lo siguiente: "No vas a volver a verlas nunca más. Ni a ellas ni a mí. Yo me voy a encargar bien de las niñas, pero no vas a saber nada más de nosotros". Posteriormente Gimeno se hizo a la mar con sus hijas ya asesinadas y las arrojó al agua.
Ahora, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en este momento están investigando el paradero de los niños y cada vez están más cerca de lograrlo. Pese a ello, están pidiendo colaboración ciudadana para poder localizarla. La Policía Naocional, SOS Desaparecidos y la madre de los pequeños solicita la ayuda ciudadana ya que cualquier pista o indicio puede ayudar.
Si usted piensa que ha visto en Tenerife a dos niños que se ajusten a la descripción de Kristian y Amantie puede ponerse en contacto con las autoridades en los teléfonos 112, 091 o 062. También están habilitados los móviles 642650775 y 649952957.