Fin trágico en el rescate de Rayan, sacan el cuerpo del pequeño sin vida

El rescate del pequeño Rayan, que cayó a 32 metros de profundidad en el pozo familiar en la provincia de Chefchauen el pasado martes, ha tenido el peor desenlace. El equipo de protección civil, que logró finalmente, tras cinco días, acceder el sábado por la noche hasta el niño, encontró su cuerpo sin vida.

El menor fue sacado urgentemente del agujero perforado paralelamente al pozo e ingresado en una ambulancia en medio de un gran despliegue de seguridad. Posteriormente, en un comunicado difundido por la agencia MAP, se confirmaba la muerte del pequeño.

El operativo de rescate, llevado a cabo por los servicios de protección civil, finalizó entrada la noche. Varios equipos han trabajado ininterrumpidamente durante cinco días para sacar al niño con vida, aunque finalmente no lo han conseguido, tras varias dificultades por la calidad del terreno.

Se ha ordenado realizar una autopsia forense al cuerpo del menor para esclarecer la causa de la muerte. Igualmente, las autoridades investigan en el terreno para determinar las circunstancias de la caída al pozo.

El niño se precipitó al interior del pozo familiar abierto y sin cercar el pasado martes y no ha sido hasta el sábado cuando las autoridades marroquíes han logrado sacarlo.

Tras el trágico accidente, el rey Mohamed VI llamó a los padres del fallecido para darles el pésame, según informa una nota de prensa del gabinete real.

En el comunicado real se incide también en que el monarca alauita dio instrucciones durante los días de la operación de rescate a todas las autoridades para tomar las medidas necesarias e intentar rescatar al pequeño. Además, asegura que se desplegaron “los máximos esfuerzos” para salvar la vida de Rayan.

A su vez, el soberano agradeció los esfuerzos de las autoridades y fuerzas públicas, la sociedad civil y la “fuerte” y “amplia” solidaridad expresada a los familiares del pequeño. Lo cierto es que el rescate del pequeño Rayan mantuvo en vilo a todos los ciudadanos del país vecino, que se volcaron con la familia y los equipos de rescate durante las cien horas en que el menor estuvo desaparecido dentro del pozo.